Este documento resume la historia bíblica de la familia de Isaac, destacando tres errores que llevaron a su destrucción: 1) Edificar el matrimonio y criar a los hijos con los ojos de la carne en lugar de la fe; 2) Segmentar el amor entre los hijos favoreciendo a uno sobre el otro; y 3) Enfrentar las tentaciones confiando en sí mismos en lugar de Dios. Exhorta a las familias a fundarse y guiarse por los principios eternos de la Palabra de Dios.
Lección 8 | Joven | Palabras de sabiduría | Escuela Sabática
Vitácora de una familia destruida: lecciones de fe de Isaac y Rebeca
1. Ptor. Willer Montesinos Unión Misionera Evangélica
Cuenca
Tema: VITÁCORA DE UNA FAMILIA DESTRUÍDA
INTRODUCCIÒN:
Muchas familias son edificadas cada año, con los ojos de la carne. Confiando en su
educación, habilidades de desarrollo humano, profesión, experiencia, etc.
Los matrimonios han dejado de lado la Palabra de Dios y los principios eternos que hay
en ella. La gente ha quitado sus ojos de la fe en el Señor para ponerlos en si mismo. La
Biblia dice: “La fe viene por el oír, el oír la Palabra de Dios.”
Tal vez muchos empezamos nuestros hogares así.
RETO:
Veremos a la luz de la Palabra de Dios, los errores de una familia, que dejó su hogar con
los ojos de la fe, para dar rienda suelta a su carnalidad y por ende dejar en el registro de
las Sagradas Escrituras la VITÁCORA DE UNA FAMILIA DESTRUÍDA.
TEXTO: Génesis 25:27-34
I. EDIFIQUE SU MATRIMONIO CON LOS OJOS DE LA FE. (25:19-26)
A. Isaac y Rebeca se casaron por fe. (25:19-20)
Isaac tenía 40 años cuando tomo a Rebeca como esposa.
Se casaron por fe, porque jamás Isaac conoció previamente a Rebeca, sino que el
deseo de Abraham era que Isaac no se case en yugo desigual con una pagana,
sino con una mujer temerosa de Dios. (24:1-4)
La Palabra del Señor dice en Prov. 18:22 “El que halla esposa, halla el bien, y
alcanza la benevolencia de Jehová.”
B. Isaac y Rebeca tuvieron hijos por fe. (25:21-26)
Rebeca era una mujer estéril, y las estériles no pueden tener hijos.
Sin embargo Isaac oró 30 años por su esposa para que Dios le concediera hijos.
La Biblia dice: “Herencia de Jehová son los hijos, cosa de estima el fruto del
vientre. Como saetas en mano del valiente, así son los hijos habidos en la
juventud.” Salm. 127:3-4
o Muchas veces pedíamos algo a Dios con tanta insistencia sin siquiera saber
PARA QUE lo pedimos, o sin medir si tenemos la madurez para recibir lo que
pedimos.
Dios no le dio un hijo como el pidió, sino dos mellizos .
Note también que cuando ya estaba embarazada y hubo conflicto en su vientre (vs.
22) ella fue dice a “consultar a Jehová”. Eso mostraba el carácter piadoso de este
matrimonio.
Sobre el matrimonio de Isaac y Rebeca descansaban 2 promesas de parte de
Dios.
1. Una descendencia prometida a Abraham su padre.
2. La descendencia de la promesa vendría del hijo menor.
…Ay de mi si no anunciare el evangelio 1 Cor. 9:16
2. Ptor. Willer Montesinos Unión Misionera Evangélica
Cuenca
II. CRÍE A SUS HIJOS CON LOS OJOS DE LA FE. (vs 25:27-34)
En el vs. 27 aparece una palabra interesante, que afecta a todos los padres hoy en
día… “y crecieron los niños”.
Es lindo ver que nuestros hijos crecen en edad y estatura, pero cuando no vemos esto
con los ojos de la fe, varias cosas pueden ser transformadas y una de las mas
importantes son, nuestras PRIORIDADES.
Acompáñeme en la lectura de Deut. 6:4-9
Al principio el problema de este matrimonio era un problema que los unía, luego la
bendición de ambos los dividía.
Cuando usted cría a sus hijos con los ojos de la fe, Dios lo llevará a tomar en cuenta 3
cosas:
A. Respetar las diferencias de sus hijos. (vs. 27)
Isaac y Rebeca tuvieron 2 hijos varones, engendrados al mismo tiempo, nacidos
casi al mismo tiempo, pero totalmente diferentes:
1. Esaú.
o Era un hábil cazador.
o Impulsivo y generoso.
o “Hombre del campo”.
o Sabía todo lo que pasaba a su alrededor.
2. Jacob.
o “Varón quieto”. Era un hombre pacífico.
o “habitaba en tiendas”. De casa, eficiente en el manejo de los asuntos de la
familia.
o Sabía todo lo que pasaba en su entorno.
No hay mayor pecado en la crianza de los hijos que pensar que todos son iguales
en personalidad.
El respetar las diferencias de sus hijos, le llevará a luchar contra la parcialidad.
B. Cuidar de segmentar el amor. (vs. 28)
Isaac y Rebeca tuvieron cada uno a su hijo favorito a quien amaba mas.
Un amor interesado.
o El uno porque su hijo era el primogénito y comía de su caza.
o La otra porque sabía que quien gobernaría sobre su casa era el menor.
El peligro en un hogar es tener hijos favoritos. Amar mas a unos que otros.
Este problema no erradicaba en los hijos, sino en los padres mismos.
Quiero darle dos razones por las cuales se segmenta el amor.
1. Por un concepto equivocado de hogar de los padres.
o Un hogar debe tener metas comunes, intereses comunes, principios
comunes, disciplinas comunes.
o No se puede resaltar ni menospreciar a los hijos, por sus capacidades,
género o edad.
2. Por un interés en particular en nuestros hijos.
…Ay de mi si no anunciare el evangelio 1 Cor. 9:16
3. Ptor. Willer Montesinos Unión Misionera Evangélica
Cuenca
o Cuando existe el énfasis en intereses individualistas de los padres, los hijos
empiezan a hacer elecciones equivocadas.
C. Vigilar la salud espiritual de cada hijo. (vs. 29-34)
Los siguientes versículos nos presenta otras características en la vida espiritual de
Esaú y Jacob como resultado de la parcialidad de sus padres.
1. Esaú.
o Era sensual y materialista, incapaz de apreciar los valores espirituales;
sacrificó lo futuro sobre el altar de lo inmediato.
o Posteriormente despreció el concepto de separación y dedicación que
tenían sus padres y se casón con dos mujeres heteas paganas. (26:34)
o Despreció su derecho de primogenitura (vs. 34) por lo cual se le denominó
“profano” que significa carente de espiritualidad. (Heb. 12:16)
o La primogenitura implicaba 3 cosas:
Ser el cabeza de la familia.
La función sacerdotal en la familia.
Doble porción de la herencia.
2. Jacob.
o Le preocupaba lo espiritual, pero tenía la presunción ante Dios de apresurar
el cumplimiento de sus propósitos. (quería darle una mano a Dios)
o Falta de lealtad a su Padre por arrebatar el derecho de primogenitura al hijo
primogénito y favorecido de su padre.
o Falta de lealtad hacia su hermano por aprovecharse de su lastimosa
situación.
III. VENZA LA TENTACIÓN CON LOS OJOS DE LA FE. (26:1-32)
Este capítulo registra 3 tentaciones sobre las cuales Isaac tuvo que hacer frente.
Toda familia será expuesta a tentaciones y por diferentes frentes. Tentaciones
económicas, familiares, laborales, conyugales, etc. Como pase por ellas marcará la
diferencia.
Satanás sabe eso, conoce muy bien que somos VULNERABLES las tentaciones y
sus intenciones el Señor Jesucristo las describió claramente, “El ladrón sólo viene
para robar y matar y destruir; yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan
en abundancia.”Lc. 10:10
Podemos enfrentar nuestras tentaciones en los ojos de la carne, es decir confiando en
NUESTRO INSTINTO, nuestra capacidad, educación, inteligencia. O podemos
manejarlo desde la perspectiva de Dios.
En 1 Corintios 10:13 la Palabra del Señor dice claramente: “No os ha sobrevenido
ninguna tentación que no sea humana; pero fiel es Dios, que no os dejará ser tentados
más de lo que podéis resistir, sino que dará también juntamente con la tentación la
salida, para que podáis soportar.”
Lo llamativo de este pasaje, es que Dios permitió que Isaac pasara por las mismas
tentaciones que su padre Abraham.
…Ay de mi si no anunciare el evangelio 1 Cor. 9:16
4. Ptor. Willer Montesinos Unión Misionera Evangélica
Cuenca
A. La tentación de la necesidad. (vs. 1-6)
Todos tenemos necesidades, por lo tanto siempre será un frente que tendremos
que manejar.
La necesidad de la familia de Jacob, era el hambre, nos describe el versículo 1.
El hambre había llevado a Isaac a abandonar la tierra que Dios le dijo que
permaneciera CANAÁN, para irse a Egipto en busca de suplir esa necesidad. Error
que ya había cometido su padre.
El conflicto que tuvo Isaac en este caso es el mismo que muchos tenemos. La
LÓGICA vs la FE.
Dios sale al encuentro y confirma sus promesas en la vida de Isaac. (vs. 2-6)
Isaac y los suyos respondieron con obediencia. Siguieron creyéndole a Dios. (vs.
7)
Dios quería enseñar a Isaac, que el tenía el control de la situación y no era
indiferente ante su necesidad.
Cuando usted enfrenta la necesidad con los ojos de la fe, usted descubrirá que
DIOS ES SU SUSTENTADOR.
B. La tentación del ego. (vs. 7-11)
La tentación del EGO, describe, primero yo antes que tu o antes que los míos.
Mi vida es igual de importante y a veces hasta mas que la tuya.
Esta es una tentación bastante peligrosa y común en la familia.
En todo matrimonio, siempre debe haber luto antes que fiesta; SUICIDIO antes que
CELEBRACIÓN.
Nadie es mas importante que nadie.
Isaac se enfrentó con esto. En el vs. 7, el prefirió decir que Rebeca era su
hermana, antes que su esposa. “…porque tuvo miedo de decir: Es mi mujer,
pensando (aquí entra el juicio de valores) que tal vez los hombres del lugar lo
matarían por causa de Rebeca…”
Aquí fracasó Isaac, y a veces aquí fracasamos muchos. Isaac cometió el mismo
pecado que su padre Abraham.
El Dr. Howard Vos dijo: “La fe en Dios por la provisión de sus necesidades, quedó
pronto manchada con el pecado de mentir debido al temor por su seguridad
personal.”
Isaac asignó menor VALOR a su esposa que Él.
o Si decía que era su HERMANA, la tomarían y de esa manera aseguraba su
vida.
o Si decía que era su ESPOSA, tendrían que primero matarle para poder
tomarle. Hubiese sido una muestra de su amor y sacrificio.
En ambos casos la perdería. ¿Cómo prefiere usted esposa que su marido la
pierda??
Lo segundo es lo que Dios esperaría, lea conmigo Efesios 5:25-27.
Cuando usted enfrenta la tentación del ego con los ojos de la fe, usted descubrirá
que DIOS ES SU PROTECTOR.
C. La tentación de la envidia y jactancia. (vs. 12-33)
Esta tentación se ya sea cuando yo tengo mucho o los demás tienen mas que yo.
…Ay de mi si no anunciare el evangelio 1 Cor. 9:16
5. Ptor. Willer Montesinos Unión Misionera Evangélica
Cuenca
Esta tentación es muy frecuente cuando hago mucho énfasis en las riquezas
terrenales, mas que las celestiales. En lo material que en lo espiritual.
Nos invade un sentimiento de desesperación cuando perdemos las cosas
materiales o cuando otros nos sobrepasan en esto. Nos AFERRAMOS.
Los (vs. 12-14) nos dice que Dios cumplió su palabra y bendijo a Isaac y su familia
en gran manera.
Sin embargo la envidia no vino de parte de Isaac sino de sus vecinos. (vs. 16)
1. No se aferre por las cosas materiales. (vs. 17-22)
a. A veces las pérdidas no son malas, nos enseñan que siempre se puede
volver a empezar.
b. Isaac no se aferró, confiaba en lo que Dios le había prometido. No iba a
reñir ni exponer a su familia por cosas materiales.
Ilustración: El finado Steve Jobs.
2. Mas vale perder lo material y terrenal, que lo espiritual y la fe. (vs. 23-25)
3. Reconozca ante otros que todo lo que tiene viene de Dios. (vs. 27-32)
a. Isaac no guardó rencor, ni se jactó de lo que tenía.
b. Los mismos envidiosos vieron la mano de Dios sobre la vida de Isaac y
su familia.
IV. MIRE LAS PROMESAS DE DIOS CON LOS OJOS DE LA FE. (27:1-40)
A. Las promesas de Dios.
1) Dios cumplirá sus promesas.
Sobre esta familia había una promesa de parte de Dios. (25:23)
Toda la Bitácora de esta familia giraba entorno a esa promesa.
Una promesa de parte de alguien confiable lleva en sí el poder para transformar
la mente y la actitud de una persona, y encender la llama de la esperanza.
Podría tratarse de una promesa por un nuevo trabajo, un mejor sueldo, una
nueva casa, o el galardón por un trabajo bien hecho. Sin embargo, una
promesa solamente tiene valor, si quien promete es una persona íntegra. La
promesa de un mentiroso es como el viento que llega y desaparece.
Dios es un Dios de promesas. Él va a cumplir con sus promesas por encima de
lo que nosotros queramos. Num. 23:19 dice “Dios no es hombre, para que
mienta, ni hijo de hombre, para que se arrepienta. ¿Lo ha dicho El, y no lo
hará?, ¿ha hablado, y no lo cumplirá?”
Es importante que sepamos que cuando Dios habla, sus palabras llevan en sí
poder. El declara, “Porque como desciende de los cielos la lluvia y la nieve, y
no vuelve allá, sino que riega la tierra, y la hace germinar y producir... así será
mi palabra que sale de mi boca; no volverá a mí vacía, sino que hará lo que
yo quiero, y será prosperada en aquello para que la envié” (Isaías 55:10-11).
2) Mi carne distorsiona las promesas de Dios.
Jamás vamos a encontrar problemas con las promesas de Dios. El problema es
como VEMOS las promesas de Dios.
…Ay de mi si no anunciare el evangelio 1 Cor. 9:16
6. Ptor. Willer Montesinos Unión Misionera Evangélica
Cuenca
Mirar las promesas de Dios con los lentes equivocados o con los ojos
equivocados, puede llevar nuestras vidas y las de nuestras familias a la banca
rota espiritual.
Isaac y Rebeca comenzaron su vida familiar mirando las promesas de Dios con
los ojos de la fe. Pero cada día mientras mas clara era la promesa, los ojos de
la carne distorsionaron esas promesas.
El apóstol Pablo en Rom. 8:7-8 dijo: “Por cuanto los designios de la carne son
ENEMISTAD contra Dios; porque no SE SUJETAN a la ley de Dios, ni tampoco
pueden; y los que viven según la carne NO PUEDEN AGRADAR a Dios.”
Y el escritor de hebreos, hablando de los grandes de la fe dice: “Pero sin fe es
IMPOSIBLE AGRADAR a Dios; porque es necesario que el que se acerca a
Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan.”(Heb. 11:6)
Como creyentes, debemos a aprender a mirar las promesas de Dios con los
ojos de la fe.
El complot de Isaac para entregar la bendición a Esaú y la contraparte de
Rebeca y Jacob ponen de relieve la CARNALIDAD de toda la familia.
B. Sus acciones en la carne.
1) La carnalidad del padre. (vs. 1-4)
Isaac ya tenía 137 años y al parecer ya era ciego. (vs. 1)
Enceguecido por los impulsos carnales y la parcialidad, Isaac estaba decidido a
dar a Esaú lo que él sabía que no pertenecía al hijo mayor, según la profecía y
la promesa de Dios.
Aparte de eso Isaac sabía muy bien del estilo de vida de Esaú. Su poligamia y
su matrimonio con mujeres paganas o incrédulas. (26:34) Pese a ser un inmoral
y profano, lo cual lo hacía inadecuado para ser el hijo de la promesa, Isaac iba
a bendecirle. Su carnalidad no le permitía ser JUSTO.
Es increíble hasta donde llegaba la parcialidad de Isaac y lo interesado que era;
“hazme un guisado como A MI ME GUSTA, y tráemelo, y comeré, para que yo
te bendiga…” (vs. 4)
2) La carnalidad de Esaú. (vs. 5)
Esaú estaba resuelto a faltar a su palabra para recibir lo que había vendido por
un plato de lentejas. (25:32-33) (27:30-31)
A Esaú no le interesaba el aspecto espiritual de la primogenitura, sino el
material.
Mire lo que dice el escritor de Hebreos sobre Esaú. (Heb. 12:14-17)
3) La carnalidad de Rebeca.
Rebeca Y Jacob no estaban dispuestos a dejar la situación en mano de Dios, ni
a confiar en que Él era capaz de llevar a cabo la promesa, sino que quisieron
aportar sus método carnales.
Note lo que dice el versículo 5. “Y Rebeca estaba oyendo, cuando hablaba
Isaac a Esaú…”. Está madre si confiaba en el Señor y sus promesas, debía
estar de rodillas. Esta mujer que consultaba a Jehová cuando tenía un conflicto
(25:22), ahora estaba tratando de darle una mano a Dios.
…Ay de mi si no anunciare el evangelio 1 Cor. 9:16
7. Ptor. Willer Montesinos Unión Misionera Evangélica
Cuenca
Rebeca hizo dos cosas con tal de favorecer a su hijo preferido.
o Entretejió el engaño. (vs. 6-12; 15-17)
De tal madre tal hijo.
Ella resolvió el problema del olor, vistiendo a Jacob con la ropa de
Esaú para proveer el olor asociado con la caza. (vs. 15,27)
Resolvió el problema de su piel peluda con los cabellos de los
animales. (vs. 16, 21-23)
Resolvió el problema de la comida, preparándole a Isaac el guiso
tal como a él le gustaba. (vs. 14,17, 25)
o Asumió la consecuencias del mismo. (vs. 13)
4) La carnalidad de Jacob.
No le fue suficiente negociarle la primogenitura a Esaú.
Su carnalidad lo llevó a no ESPERAR en Dios, sino hacer todo lo necesario
para conseguir lo que junto con su madre se habían propuesto.
Este es un principio que podemos aprender. NO TRATE JAMÁS DE RECIBIR
LAS PROMESAS DE DIOS POR SUS PROPIOS MEDIOS. ESPERE EN DIOS.
Para conseguir lo propuesto Jacob en su carnalidad tuvo que recurir a:
o La mentira. (vs. 18-19)
o La falta de temor de Dios. (vs. 20)
o La traición. (vs. 27). Tal como Judás traicionó al Señor.
C. Las consecuencias en la carne.
Como resultado todos sufrieron:
Isaac se estremeció. (27:33)
Esaú se desilusionó y amargó contra Jacob (27:34,36,41) y su padre (28:6-9)
Jacob tuvo que abandonar el hogar que tanto amaba y trasladarse a tierra extraña.
(27:42-43)
Rebeca tuvo que despedirse de su hijo amado, para no verlo mas. Murió antes de
que Jacob volviera.
CONCLUSIÓN:
Queridos hermanos
…Ay de mi si no anunciare el evangelio 1 Cor. 9:16