Este documento presenta 10 de las arquitecturas más increíbles del mundo, incluyendo el Pabellón de Aragón en España, el Estadio Nacional de Pekín en China, el edificio 30 St Mary Axe en Londres, el hotel Burj al Arab en Dubai, y el Museo Guggenheim en Bilbao, entre otros.

1. 10 ARQUITECTURAS MÁS INCREIBLES
DE LA ACTUALIDAD
Juana Valentina
Zárate Ceballos
11-2

2. EL PABELLÓN DE ARAGÓN

3. Se encuentra ubicado en Zaragoza,
España. Es un edificio con forma de
canasta de mimbre suspendida en el
aire por tres pilares, construido por el
arquitecto aragonés Daniel Olano.

4. ESTADIO
NACIONAL DE
PEKÍN
El Estadio Nacional de
Pekín es el Estadio
Olímpico para los
Juegos de 2008 en
Pekín, China.

5. 30 ST MARY AXE

6. Es un rascacielos neofuturista de uso
comercial ubicado en la City, el
corazón financiero de Londres. Con
180 metros de altura y 40 plantas.
El edificio fue diseñado por Norman
Foster, su antiguo socio Ken
Shuttleworth y por ingenieros de Arup.

7. Burj al Arab
A 17 kilómetros al sur
de Dubái, el Burj al
Arab es una
construcción faraónica
que se levanta 321
metros sobre una isla
artificial. Es un hotel 7
estrellas

8. TEMPLO DE LOTO

9. La Casa de adoración Bahá'í en Delhi,
India, popularmente conocida como
templo del Loto, por su forma de flor.
El edificio fue completado en 1986 y
sirve de templo madre en el
subcontinente Indio.

10. TEATRO NACIONAL
DE CHINA
El Gran Teatro
Nacional de China,
también conocido
como «El Huevo», es
un teatro de ópera en
Pekín. Abrió sus
puertas en junio de
2007.

11. CINES UFA DE DRESDE

12. Es un complejo de ocho salas
de cine ubicadas en una
importante zona comercial de
ciudad alemana.

13. LA CASA TORCIDA
Es un edificio que se encuentra en la
ciudad polaca de Sopot en el Fue
construida en 2004, según un
proyecto de los arquitectos Szotyński
y Zaleski
Tiene una superficie de alrededor de
4000 m². En la Casa Torcida, funciona
un centro comercial, un restaurante
con terraza, una sala de juegos y la
Radio Muzyka Fakty FM.

14. MUSEO GUGGENHEIM, BILBAO

15. PALACIO IDEAL,
FRANCIA
Ferdinand Chavel, su creador,
contaba que un día se
tropezó con una piedra y se
le ocurrió la idea de esta
obra. Recogió piedras, las
llevo con una carreterilla y
empezó su trabajo. 33 años
tardó en acabarla, entre
críticas de los vecinos que le
creían un loco.