Las figuras literarias son formas especiales de usar palabras que, aunque mantienen su significado habitual, presentan características fonéticas, gramaticales o semánticas particulares que las hacen más expresivas. Se distinguen de los tropos en que no cambian el sentido de las palabras. Junto con los tropos, constituyen elementos básicos de la retórica y el ornato literario. Se dividen en figuras de dicción, que afectan a las palabras, y figuras de pensamiento, que afectan al contenido.
1. Se denomina figuras literarias a ciertas formas de utilizar las palabras en
el sentido de que aunque son empleadas con sus acepciones habituales
(aspecto que las diferencia de los tropos), son acompañadas de ciertas
particularidades fónicas, gramaticales o semánticas, que las alejan de
un uso normal de las mismas, por lo que terminan por resultar
especialmente expresivas. Debido a esto, su uso es característico,
aunque en modo alguno exclusivo, de las obras literarias.
De forma coloquial, reciben también el nombre de recursos literarios,
recursos estilísticos, recursos retóricos, figuras retóricas, etc.
Las figuras, junto con los tropos, constituyen dentro del ámbito de la
Retórica, uno de los formantes básicos del ornatus retórico, el
constituyente principal de la elocutio.
Las figuras literarias se dividen en dos grandes grupos: las figuras de
dicción y las figuras de pensamiento.