2. ADOLESCENCIA Y VIOLENCIA:
¿CRISIS O PATOLOGÍA?
“Con el puño cerrado no se puede intercambiar
un apretón de manos”
Mahatma Gandhi
Hablar de violencia y adolescencia nos lleva
inevitablemente a plantearnos, el
porqué de un fenómeno que parece estar
convirtiéndose en una pandemia.
En los últimos estudios, las cifras son
alarmantes, acerca de violencia en la calle,
(delitos y violencia en el ocio), la violencia en la
casa, (violencia intrafamiliar) y la
violencia en la escuela (acoso escolar o bullying).
Las cifras
3. Los delitos cometidos por menores siguen una escalada
vertiginosa. En la década
de los 90 se incrementaron en un 34 % lo cual supone una
subida exponencial que
debería alarmarnos. Pero la escalada de delitos es vertiginosa
en los últimos años,
llegando a aumentar en un 366%. Las cifras reales nos hablan
que de 4.500 delitos
contabilizados al principio de los 90, se pasa a 6.020 en el
inicio del nuevo siglo y la
cifra recogida en la actualidad es de 22.039, según datos del
ministerio del interior...
El 20% de los abusos sexuales, son cometidos por menores de
18 años, según
datos que maneja Javier Urra, anterior defensor del menor y
psicólogo de la
fiscalía de menores. En cinco años los homicidios cometidos
por menores subieron
de 8 a 38, y cerca de mil menores acabaron el año pasado en
un centro tutelado, y
de estos se fugaron más de cien. Las sentencias condenatorias
subieron a un 46%.
4. En violencia intrafamiliar los datos arrojan también
cifras verdaderamente
alarmantes. En los últimos años, las denuncias de los
padres hacia sus hijos
agresores, llegaron a alcanzara las 5.100, y aumentan
en un solo año un 28%.
En el colegio, la violencia, está de moda.
Desgraciadamente el tema de acoso
escolar, a raíz de la muerte de Jokin, ha desatado la
alarma social. Las cifras
tampoco son tranquilizadoras.
Casi un 6% de los alumnos españoles han vivido en
sus propias carnes el fenómeno
conocido como “Bullying”: que convierte a algunos
escolares en víctimas de sus
propios compañeros.
5.
6. PREVENCIÓN DEL DELITO Y JUSTICIA PENAL
La delincuencia organizada transnacional es una amenaza
importante para la seguridad pública y constituye una barrera
para el desarrollo social, económico y político de todas las
sociedades en el mundo. Este es un fenómeno multifacético
que se manifiesta en diferentes tipos de delitos como el
narcotráfico, la trata de personas, el tráfico ilícito de
migrantes, el tráfico de armas, el blanqueo de dinero, entre
otros.
La delincuencia organizada se ha influenciado por la
globalización, que ha provocado profundos cambios en la vida
de los pueblos, de las sociedades y de los estados. Como
sabemos, las fronteras entre los países son más permeables y
el tránsito de personas, bienes, servicios y recursos es cada vez
más ágil. Este proceso, que facilita el comercio y la integración
entre las personas, también implica cambios en la dinámica de
la delincuencia y la violencia, pues las mismas tecnologías que
permiten mejoras sustanciales en la vida de las personas
también son utilizadas por aquellos que violan la ley, cometen
delitos y desafían la justicia.
7. Por lo tanto, crece la importancia de la cooperación internacional y del
intercambio de experiencias en materia de justicia penal y prevención
del delito. Es esencial una acción articulada para hacer frente, con
mayor eficacia, a los grupos delictivos dispersos en todo el mundo, que
a menudo tienen grandes habilidades de comunicación y de
organización.
Buscando respuestas coherentes y eficaces a estos problemas, la
Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) ha
estado trabajando estrechamente con gobiernos, organizaciones
internacionales y la sociedad civil para fortalecer las estructuras
institucionales y el imperio de la ley, para un control más efectivo la
delincuencia organizada y del narcotráfico.
Con base en la Convención de las Naciones Unidas contra la
Delincuencia Organizada Transnacional, UNODC presta asistencia a
los gobiernos para aplicar los artículos de la Convención y tipificar
como crímenes, en su legislación interna, los delitos relacionados con
la delincuencia organizada.
En el mismo sentido, la Oficina también ha apoyado la adopción de
medidas destinadas a la asistencia judicial recíproca, con el fin de
facilitar los procedimientos de extradición, cooperación policial,
asistencia técnica entre países y la capacitación de funcionarios del
sistema de justicia penal.
8. Reforma del Sistema de Justicia Penal
El respeto a los derechos humanos requiere la construcción de un
sistema de justicia penal justo y eficaz, capaz de controlar la
delincuencia dentro de los límites planteados por el Estado de
Derecho. La UNODC apoya a los gobiernos en el desarrollo de
estrategias para la reforma de todos los aspectos del sistema de
justicia penal, con especial énfasis en ayudar a los grupos
vulnerables, especialmente mujeres, jóvenes y niños.
La UNODC también trabaja con proyectos sobre justicia de menores,
reforma penal y apoyo a las víctimas y a testigos de delitos. Estas
acciones resultan en una amplia gama de manuales y herramientas
de evaluación(en inglés) que abarcan todas las esferas del sistema de
justicia penal, basadas en normas internacionales y estándares
definidos por las Naciones Unidas.
La UNODC desarrolla proyectos y presta asistencia técnica en los
siguientes temas:
* Justicia de menores
* Reforma penal
* Reforma de la justicia penal
* Justicia restaurativa
* Alternativas a la prisión
* Apoyo a las víctimas
* Violencia de género
* Monitoreo de desempeño del sistema de justicia penal
9. Las actividades de proyectos en diferentes países incluyen una serie de
intervenciones, tales como:
* Educación y formación
* Consultoría
* Reformas legislativas
* Suministro de recursos a las organizaciones no gubernamentales
* Preparación de informes y manuales sobre las mejores prácticas en el área
Comisión de Prevención del Delito y Justicia Penal
La Comisión de Prevención del Delito y Justicia Penal es el órgano principal
del sistema de las Naciones Unidas para formular políticas y recomendaciones
sobre cuestiones de la justicia penal, incluida la trata de seres humanos, los
crímenes transnacionales y los aspectos de la prevención del terrorismo. La
Comisión supervisa el uso y la aplicación de las normas de las Naciones Unidas
relativas a estas cuestiones y guía el desarrollo de políticas para abordar
nuevas cuestiones.
La Comisión ofrece a los Estados miembros un foro para el intercambio de
conocimientos, experiencias e información para el desarrollo de estrategias
nacionales e internacionales. La Comisión también coordina esfuerzos con otros
organismos de las Naciones Unidas con mandatos en materia de prevención del
delito y justicia penal, como el Consejo de Seguridad de la ONU, la Conferencia
de Estados Partes en la Convención de las Naciones Unidas contra la
Delincuencia Organizada Transnacional y la Conferencia los Estados Partes en
la Convención de las Naciones Unidas contra la Corrupción.
10.
11. Causas, efectos y soluciones para la
delincuencia juvenil
Darrin Klimek/Digital Vision/Getty Images
La delincuencia juvenil incluye una variedad de
delitos y crímenes. Los menos graves, como el consumo
de alcohol, el absentismo escolar y las violaciones de
toque de queda, llamados delitos de estado, se
consideran crímenes sólo cuando son cometidos por
menores de edad. Las infracciones, tales como
las infracciones de tráfico, pueden incurrir en estudios
adicionales o multas. Faltas, como la embriaguez
pública, el asalto o robo, resultan en mayores
consecuencias, incluyendo libertad
condicional, multas, horas de servicio comunitario,
detención o una combinación de estos. Los delitos
mayores incluyen crímenes violentos, delitos contra la
propiedad y delitos de drogas. Las consecuencias
pueden incluir la detención, la libertad condicional,
las horas de órdenes de trabajo, la terapia y
lasmultas. Por último, si un menor comete un delito
grave, puede ser objeto de castigo como un adulto,
dependiendo de su edad y la gravedad de la
infracción.