2. Epílogo
Espero que después que hayas leído este libro, te hayas dado
cuenta, que decir que eres “Ozainista “, es una exageración y
que a pesar de todo, nos falta mucho camino por recorrer en
esta ciencia, por lo menos en lo que se refiere al área médica
que es la de nuestro interés. Ozaín, al igual que la medicina,
requiere años de estudio y dedicación y después que has
terminado de estudiar lo básico, te siguen faltando años de
estudio y dedicación, por el resto de tu vida. Esto te lo digo
para que no tengas que aprenderlo a la dura como me pasó a
mí. Cuando pensaba que sabía mucho, me daba cuenta que no
sabía nada y aun pienso que no sé nada… ¿Frustrante
verdad?
También espero que esa idea de tener que usar a Ozaín como
un punto de hechicería, se te haya quitado de la mente. Claro
que como te he dicho a lo largo de este libro, todo en nuestra
religión tiene una dualidad, pero es mejor hacer medicinas
que curen en vez de hacer medicinas que maten. Debes tener
ética con el conocimiento que adquieres. Sin la ética, solo
serás uno más del montón. Pero debo decirte la verdad,
porque no quiero que salgas solo a la calle a averiguarla de
forma bastante dura y como la culpa nunca cae al piso, me la
echarás encima a mí. El mal, paga más y es más rentable
económicamente que el bien. Hacer el bien, paga menos. Esas
son las ironías de nuestra religión. Todos irán a buscarte para
hacerle daño a alguien. Nadie irá a tu consulta a decirte que
necesita que un amigo se gane la lotería, pero muchos irán a
pedir tu ayuda para darle una puñalada por la espalda a su
propio hermano. No lo hagas.
3. El mal que hagas caerá sobre ti, a la corta o a la larga. Solo
pon atención y mira como viven los estafadores y mal vivientes
de nuestra religión: Siempre están con algún apuro, no salen
de un problema, cuando ya están entrando a otro y al final se
ven en la necesidad de continuar su cadena de estafas, solo
para poder sobrevivir. Hasta que se le acaban las personas a
las cuales estafar. Lo peor de todo el asunto, es que son
incapaces de deducir que la causa de su mal, se debe a que
solo hacen el mal. Orunmila habla claramente: El te elige como
uno de sus sacerdotes, para que te acojas al buen vivir y seas
un ejemplo a seguir (Ogbe Tumako).
Tu conocimiento debe ser aplicado al bien y este libro busca
orientarte a como hacerlo, explicando los conceptos básicos
de forma clara y sencilla y basados en la ciencia y no en la
mecánica o la fantasía y sepas porque hacemos las cosas,
desde una base filosófica y científica. Sé que no te he podido
dar una referencia “todo inclusive “ y que faltan muchas
piedras, animales, peces y plantas, pero no terminaría de
escribirlo nunca. De hecho, me saldría mejor copiarte mis
notas. Lo importante es que tomes la idea y vayas creando tu
propio libro con los secretos que vayas averiguando, pero que
este libro te sirva de modelo en como hacerlo. No te estoy
dando pescado, te estoy enseñando a pescar. Si te doy
pescado, comerás un día, pero si aprendes a pescar, comerás
todos los días.
Solo espero que realmente te haya gustado y que no lo
conserves como un “secreto “ para que no se den cuenta de
donde lo aprendiste. Estos libros los escribo y te los regalo,
para que los divulgues y que otros también puedan aprender
algunas cosas que podría ser muy duro aprender de otra
forma. Además, recuerda, al bajar este libro, el “derecho “ que
cobro por él, es sencillo:
4. Debes divulgarlo, regalarlo, que todos tengan acceso a él y
que no sean víctimas del fanatismo o peor aún, del engaño. Si
yo me he tomado el trabajo de hacerlo con mucho esmero,
cariño y cuidado para que pueda ser apto a “TODO PÚBLICO “,
ten el mismo esmero para divulgarlo y enseñarlo, aun cuando
no te guste. El que no te sirva a ti, no significa que no les sirva
a otros. Eso es un trato y confío en tu palabra.
Solo espero que hayas disfrutado su lectura, tanto como yo he
disfrutado escribirlo y así dártelo con todo cariño y respeto,
para tratar, de alguna forma, enaltecer la tradición que a
todos nos hace sentir un gran orgullo pertenecer:
La Tradición Afrocubana de Ocha/Ifá.
Tu amigo de siempre,