SlideShare una empresa de Scribd logo
1 de 2
Descargar para leer sin conexión
Sobre la Unidad Política, aportes para el
debate.
Cuando en el debate político encaramos conceptos como la Unidad Política, debemos primero poner
sobre la mesa cuáles son los fines de tal Unidad, es claro que para conseguir objetivos difíciles, la
Unidad es necesaria, pero para que la misma sea sólida y permita enfrentar los más complicados
desafíos, primero debe definirse con claridad lo siguiente: unidad para qué, unidad con quién y unidad
hasta dónde.
La unidad no puede ser un fin en sí mismo, es necesario definir los límites de esa unidad, para ir por el
absurdo, no existe “la unidad del mundo entero” mientras éste se separe en diferentes clases sociales
producto del sistema de producción.
Cuando se pregona la Unidad sin profundizar en su objetivo y sin definir los límites de la misma, sólo
se corre el riesgo de colocar a una casta de dirigentes que promueven en el discurso la palabra
Unidad, mientras que en los hechos sólo se consolidan como dirigencia cristalizada, casi como un
estrato social ajeno a la dialéctica renovadora de la vida.
Qué es, desde el punto de vista teórico, lo que tenemos que tener en cuenta cuando hablamos de
unidad:
 La independencia política de la clase obrera, o trasladado a nuestra realidad, una expresión
política propia, independiente, entendiendo que ésta independencia se usará para
defender los intereses de los sectores populares.
 Allí donde existen expresiones sindicales de trabajadores de masas, es justo tener una
política unitaria, y trabajar dentro de las mismas con independencia política, defendiendo y
promoviendo la democracia gremial.
 La unidad en los sectores intermedios (campesinado, pequeña burguesía, estudiantado,
intelectualidad, etc.) no es de principio, como sectores intermedios tienden a oscilar, el
papel de los revolucionarios es ganar a los más que se puedan para que se posicionen del
lado de los trabajadores.
 La política de unidad hacia los sectores de la sociedad, se delinea luego de haber estudiado
las contradicciones que se dan en la estructura económico – social.
 Del estudio de las contradicciones en la estructura económico – social, se elabora el
programa de la revolución, y según el carácter que se le dé (“socialista”, “democrático,
agrario y antiimperialista”), se desarrollan las correspondientes alianzas políticas.
 La unidad es siempre para la lucha y en torno a programas claros, los acuerdos electorales,
sean en la interna de los gremios o en elecciones nacionales tienen que ir acorde a esto.
 Para forjar la verdadera Unidad que permita recorrer un camino de transformaciones
sociales, se requiere discutir honestamente y con claridad sobre los objetivos que se buscan
y en función de eso determinar las alianzas.
Para forjar la Unidad es fundamental poner sobre la mesa cuáles son los objetivos por los cuales nos
unimos. Esa es la Unidad que hace la fuerza. Unidad no es pensar todos iguales, unidad no es ocultar
las diferencias obvias que existen, unidad no es dejar de profundizar la discusión. La Unidad se
construye siendo francos con los compañeros, explicitando ideas y programas.
Unidad es discutir en profundidad, no para ganar una discusión o posición, sino para crecer en el
debate, para aceptar con altura que a pesar de las grandes coincidencias hay diferencias y se trabaja
desde la unidad con un objetivo claro a pesar de las diferencias. Unidad es dar una lucha fraterna, es
adaptar la táctica más nunca bajarse de los principios.
Yendo a lo que nos toca en el día a día, a nivel de la Universidad y del Movimiento Estudiantil, el
lanzamiento del Frente de Participación Estudiantil Susana Pintos y su aparición pública ha generado
sorpresa, asombro y confusión, y también ha provocado reacciones contrarias que tildan de
divisionismo la creación del Frente.
En el fondo, la verdadera razón detrás de estas reacciones parece ser que no se comparte lo que el
programa del Frente postula y el ataque que hacen a éste sólo esconde el temor de que el mismo
crezca, ya que si algo permite el Frente de Participación Estudiantil es que se pueda, justamente, decir
lo que se piensa, mostrarlo, cristalizarlo, sin esconderlo, y quizá es lo que les genere mayor temor:
crecer, porque ello implica que se convenzan cada vez más compañeros.
Que históricamente en la FEUU han habido corrientes, no es ninguna novedad. Desde épocas más
“lejanas” hasta el presente y pasado reciente, han variado en expresiones que por momentos han
sido más o menos explícitas. En el último tiempo se adoptó una lógica de agrupamientos que se
fueron dando naturalmente pero nunca bajo algo explícito, y nunca diciendo claramente dónde se
ubicaba cada uno.
En ese sentido fue que, no sin la debida discusión y reflexión, se puso a rodar el Frente Estudiantil,
difundiéndolo públicamente y mostrando sin esconder lo que se piensa y se pretende. Nuclea
compañeros en torno a un programa y todo quien lo suscriba es bienvenido.
El Frente de Participación Estudiantil no tiene meros fines electorales, aspiramos a que sea un espacio
de militancia donde las personas se formen, discutan y militen, pero siempre volviendo a sus lugares
de base, ya sea los Centros y Asociaciones de Estudiantes u otros, a participar de los mismos y dar allí
las discusiones, que son las que enriquecerán y permitirán fortalecer a la FEUU toda.
Nada más opuesto a vaciar la FEUU o dividirla, por el contrario se trata de darle contenido mediante
la discusión de ideas, que entendemos hace un tiempo se ha perdido. Es además de todo, un acto de
honestidad hacia nuestros compañeros del día a día.
Citamos a un referente revolucionario de nuestra Universidad de la República, quien reflexiona en el
sentido antes expuesto:
“La cuestión es, como solía decirse antes, de “unidad y lucha”, es decir, de búsqueda ahincada,
persistente, fraternal, de los caminos de la unidad en la lucha común contra el fascismo y el
imperialismo, por la democracia y la libertad, contra las posibles intentonas contrarrevolucionarias o
los virajes regresivos; de unidad para “avanzar en democracia” juntos, o sea, concertar esfuerzos en
pos de la conquista de mejoras sustanciales, no sólo en materia de reivindicaciones económicas y
sociales, sino para dar pasos adelante en el terreno Político y en el enfrentamiento al sistema de
dominación imperialista. Al mismo tiempo, de crítica fraternal y franca a posturas reformistas que no
condicen con el radicalismo de ciertas formulaciones verbales, de confrontación de apreciaciones y
opiniones ideológicas, sin caer en el doctrinarismo escolástico y estrecho, ni mucho menos en la
agresividad. Ni por un instante podemos olvidar que se trata de aliados reales o potenciales, con los
cuales debemos marchar juntos, codo con codo, quizás por un muy prolongado trecho histórico. Como
dice Arismendi (en “Acerca del historicismo”), debemos saber “combinar la brega por la unidad y el
cultivo del respeto mutuo, con el diálogo científico y el intercambio trance de experiencias a la luz de
una multicoloreada praxis revolucionaria mundial”
Ing. José Luis Massera – 1985.
El Frente de Participación Estudiantil como lo aspiramos a construir debe ser una organización política
independiente en el movimiento estudiantil, una forma de ahogar nuestros avances es tener una
elección sin sobresaltos, es tapar las diferencias políticas con listas que pueden entenderse como
demagógicamente unitarias.
En el escenario actual donde existe una fuerte hegemonía del reformismo en el movimiento popular,
la lista única hacia la derecha -que es como viene propuesta- es el sometimiento de nuestras ideas a lo
imperante.
La unidad dentro de la FEUU la entendemos respetando las instancias de resolución que tiene la
federación: elecciones, plebiscitos, federales y convención, y los espacios de discusión y resolución de
cada Centro o Asociación de Estudiantes. No la entendemos como el rebajamiento de nuestro
programa y de nuestra política.

Más contenido relacionado

Destacado

Destacado (15)

Jobs
JobsJobs
Jobs
 
Laalalalalalalalalallalalalalalalalalalal
LaalalalalalalalalallalalalalalalalalalalLaalalalalalalalalallalalalalalalalalalal
Laalalalalalalalalallalalalalalalalalalal
 
Diagrama de flujo 1.
Diagrama de flujo 1.Diagrama de flujo 1.
Diagrama de flujo 1.
 
Schoology
SchoologySchoology
Schoology
 
Formato de atoevaluación unidad 2 sesión 12
Formato de atoevaluación unidad 2 sesión 12Formato de atoevaluación unidad 2 sesión 12
Formato de atoevaluación unidad 2 sesión 12
 
Mat1
Mat1Mat1
Mat1
 
Como hacer un ensayo
Como hacer un ensayoComo hacer un ensayo
Como hacer un ensayo
 
Problemas
ProblemasProblemas
Problemas
 
Formato pregunta-e (1)
Formato pregunta-e (1)Formato pregunta-e (1)
Formato pregunta-e (1)
 
Los medios de comunicacion
Los medios de comunicacionLos medios de comunicacion
Los medios de comunicacion
 
ABP Y ABPr
ABP Y ABPrABP Y ABPr
ABP Y ABPr
 
Un 6% de los españoles compran por el móvil (La Voz de Galicia)
Un 6% de los españoles compran por el móvil (La Voz de Galicia)Un 6% de los españoles compran por el móvil (La Voz de Galicia)
Un 6% de los españoles compran por el móvil (La Voz de Galicia)
 
Sesión 12
Sesión 12Sesión 12
Sesión 12
 
Leccion 2 hdp
Leccion 2 hdpLeccion 2 hdp
Leccion 2 hdp
 
Flavianilici
FlavianiliciFlavianilici
Flavianilici
 

Sobre la unidad política, aportes para el debate.

  • 1. Sobre la Unidad Política, aportes para el debate. Cuando en el debate político encaramos conceptos como la Unidad Política, debemos primero poner sobre la mesa cuáles son los fines de tal Unidad, es claro que para conseguir objetivos difíciles, la Unidad es necesaria, pero para que la misma sea sólida y permita enfrentar los más complicados desafíos, primero debe definirse con claridad lo siguiente: unidad para qué, unidad con quién y unidad hasta dónde. La unidad no puede ser un fin en sí mismo, es necesario definir los límites de esa unidad, para ir por el absurdo, no existe “la unidad del mundo entero” mientras éste se separe en diferentes clases sociales producto del sistema de producción. Cuando se pregona la Unidad sin profundizar en su objetivo y sin definir los límites de la misma, sólo se corre el riesgo de colocar a una casta de dirigentes que promueven en el discurso la palabra Unidad, mientras que en los hechos sólo se consolidan como dirigencia cristalizada, casi como un estrato social ajeno a la dialéctica renovadora de la vida. Qué es, desde el punto de vista teórico, lo que tenemos que tener en cuenta cuando hablamos de unidad:  La independencia política de la clase obrera, o trasladado a nuestra realidad, una expresión política propia, independiente, entendiendo que ésta independencia se usará para defender los intereses de los sectores populares.  Allí donde existen expresiones sindicales de trabajadores de masas, es justo tener una política unitaria, y trabajar dentro de las mismas con independencia política, defendiendo y promoviendo la democracia gremial.  La unidad en los sectores intermedios (campesinado, pequeña burguesía, estudiantado, intelectualidad, etc.) no es de principio, como sectores intermedios tienden a oscilar, el papel de los revolucionarios es ganar a los más que se puedan para que se posicionen del lado de los trabajadores.  La política de unidad hacia los sectores de la sociedad, se delinea luego de haber estudiado las contradicciones que se dan en la estructura económico – social.  Del estudio de las contradicciones en la estructura económico – social, se elabora el programa de la revolución, y según el carácter que se le dé (“socialista”, “democrático, agrario y antiimperialista”), se desarrollan las correspondientes alianzas políticas.  La unidad es siempre para la lucha y en torno a programas claros, los acuerdos electorales, sean en la interna de los gremios o en elecciones nacionales tienen que ir acorde a esto.  Para forjar la verdadera Unidad que permita recorrer un camino de transformaciones sociales, se requiere discutir honestamente y con claridad sobre los objetivos que se buscan y en función de eso determinar las alianzas. Para forjar la Unidad es fundamental poner sobre la mesa cuáles son los objetivos por los cuales nos unimos. Esa es la Unidad que hace la fuerza. Unidad no es pensar todos iguales, unidad no es ocultar las diferencias obvias que existen, unidad no es dejar de profundizar la discusión. La Unidad se construye siendo francos con los compañeros, explicitando ideas y programas. Unidad es discutir en profundidad, no para ganar una discusión o posición, sino para crecer en el debate, para aceptar con altura que a pesar de las grandes coincidencias hay diferencias y se trabaja desde la unidad con un objetivo claro a pesar de las diferencias. Unidad es dar una lucha fraterna, es adaptar la táctica más nunca bajarse de los principios. Yendo a lo que nos toca en el día a día, a nivel de la Universidad y del Movimiento Estudiantil, el lanzamiento del Frente de Participación Estudiantil Susana Pintos y su aparición pública ha generado sorpresa, asombro y confusión, y también ha provocado reacciones contrarias que tildan de divisionismo la creación del Frente. En el fondo, la verdadera razón detrás de estas reacciones parece ser que no se comparte lo que el programa del Frente postula y el ataque que hacen a éste sólo esconde el temor de que el mismo
  • 2. crezca, ya que si algo permite el Frente de Participación Estudiantil es que se pueda, justamente, decir lo que se piensa, mostrarlo, cristalizarlo, sin esconderlo, y quizá es lo que les genere mayor temor: crecer, porque ello implica que se convenzan cada vez más compañeros. Que históricamente en la FEUU han habido corrientes, no es ninguna novedad. Desde épocas más “lejanas” hasta el presente y pasado reciente, han variado en expresiones que por momentos han sido más o menos explícitas. En el último tiempo se adoptó una lógica de agrupamientos que se fueron dando naturalmente pero nunca bajo algo explícito, y nunca diciendo claramente dónde se ubicaba cada uno. En ese sentido fue que, no sin la debida discusión y reflexión, se puso a rodar el Frente Estudiantil, difundiéndolo públicamente y mostrando sin esconder lo que se piensa y se pretende. Nuclea compañeros en torno a un programa y todo quien lo suscriba es bienvenido. El Frente de Participación Estudiantil no tiene meros fines electorales, aspiramos a que sea un espacio de militancia donde las personas se formen, discutan y militen, pero siempre volviendo a sus lugares de base, ya sea los Centros y Asociaciones de Estudiantes u otros, a participar de los mismos y dar allí las discusiones, que son las que enriquecerán y permitirán fortalecer a la FEUU toda. Nada más opuesto a vaciar la FEUU o dividirla, por el contrario se trata de darle contenido mediante la discusión de ideas, que entendemos hace un tiempo se ha perdido. Es además de todo, un acto de honestidad hacia nuestros compañeros del día a día. Citamos a un referente revolucionario de nuestra Universidad de la República, quien reflexiona en el sentido antes expuesto: “La cuestión es, como solía decirse antes, de “unidad y lucha”, es decir, de búsqueda ahincada, persistente, fraternal, de los caminos de la unidad en la lucha común contra el fascismo y el imperialismo, por la democracia y la libertad, contra las posibles intentonas contrarrevolucionarias o los virajes regresivos; de unidad para “avanzar en democracia” juntos, o sea, concertar esfuerzos en pos de la conquista de mejoras sustanciales, no sólo en materia de reivindicaciones económicas y sociales, sino para dar pasos adelante en el terreno Político y en el enfrentamiento al sistema de dominación imperialista. Al mismo tiempo, de crítica fraternal y franca a posturas reformistas que no condicen con el radicalismo de ciertas formulaciones verbales, de confrontación de apreciaciones y opiniones ideológicas, sin caer en el doctrinarismo escolástico y estrecho, ni mucho menos en la agresividad. Ni por un instante podemos olvidar que se trata de aliados reales o potenciales, con los cuales debemos marchar juntos, codo con codo, quizás por un muy prolongado trecho histórico. Como dice Arismendi (en “Acerca del historicismo”), debemos saber “combinar la brega por la unidad y el cultivo del respeto mutuo, con el diálogo científico y el intercambio trance de experiencias a la luz de una multicoloreada praxis revolucionaria mundial” Ing. José Luis Massera – 1985. El Frente de Participación Estudiantil como lo aspiramos a construir debe ser una organización política independiente en el movimiento estudiantil, una forma de ahogar nuestros avances es tener una elección sin sobresaltos, es tapar las diferencias políticas con listas que pueden entenderse como demagógicamente unitarias. En el escenario actual donde existe una fuerte hegemonía del reformismo en el movimiento popular, la lista única hacia la derecha -que es como viene propuesta- es el sometimiento de nuestras ideas a lo imperante. La unidad dentro de la FEUU la entendemos respetando las instancias de resolución que tiene la federación: elecciones, plebiscitos, federales y convención, y los espacios de discusión y resolución de cada Centro o Asociación de Estudiantes. No la entendemos como el rebajamiento de nuestro programa y de nuestra política.