El documento describe los diferentes sistemas que componen el sistema nervioso periférico. El sistema nervioso periférico incluye el sistema nervioso somático, el sistema nervioso autónomo y el sistema nervioso entérico. El sistema nervioso somático controla los movimientos voluntarios. El sistema nervioso autónomo controla funciones involuntarias y está dividido en el sistema simpático y parasimpático. El sistema nervioso entérico controla directamente el aparato digestivo y contiene su propio sistema nervioso completo dentro de
1. Sistema Nervioso Periférico Andrés Montero y Héctor Cejudo SISTEMA NERVIOSO PERIFÉRICO Andrés Montero Héctor Cejudo
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3. El SNP comprende los nervios, ganglios y receptores especializados. La función del sistema nervioso consiste en recibir los estímulos que le llegan tanto del medio externo como interno del organismo, organizar esta información y hacer que se produzca la respuesta adecuada.
4. Los estímulos procedentes del medio externo son recibidos por los receptores situados en la piel, que captan sensaciones generales como el dolor, tacto, presión y temperatura, y por los receptores que captan sensaciones especiales como el gusto, la vista, el olfato, el oído, la posición y el movimiento.
9. El SNS abarca todas las estructuras del sistema nervioso central y del sistema nervioso periférico (SNP), encargadas de conducir información aferente (sensitiva) consciente e inconsciente, y también de llevar información del control motor al músculo esquelético.
47. También regula la secreción, muy importante, en el sistema biliar y al sistema pancreático; es sensible a las hormonas pero en último término es un efector nervioso con un bucle nervioso realmente. Se controlan a las células entero-endocrinas; hay células neuro-endocrinas; se controla también los mecanismos de defensa, las contracciones masivas para el vómito o la diarrea.
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49. Pero la complejidad del sistema nervioso entérico no termina ahí, porque este segundo cerebro también influye en una gran parte de nuestras emociones: la sensación de tener “mariposas en el estómago”, por ejemplo, es en realidad una señal fisiológica que responde a un estado de nervios o de estrés, y que percibimos gracias los nervios presentes en nuestro intestino.
50. La complejidad del segundo cerebro hace que, de él dependa en parte nuestro bienestar físico y emocional cotidiano.