Las lenguas son parte de la realización social de un sistema adaptativo complejo que llamamos comunicación. Se debe cambiar la aproximación al estudio del lenguaje, abandonar el atomismo y las concepciones lineales, en favor de los sistemas complejos. Asumir este cambio tiene grandes implicaciones para la traducción automática, la enseñanza de idiomas y la lingüística aplicada en general (comunicación para el XXX congreso Internacional de la Asociación Internacional de Jóvenes Lingüistas en el CIESE de Comillas, Cantabria).