1. Debo aprender a
perdonar
Primaria 1: Soy un Hijo de Dios, 1994
Objetivo
Que los niños comprendan que deben estar dispuestos a perdonar a los
demás.
Preparación
1. 1.
Estudie, con la ayuda de la oración, Génesis 37:12–28; 41:38–43;
42:1–8; 45:1–15; Mateo 18:21–22; Lucas 23:33–34.
2. 2.
Prepare trozos de papel escribiendo en cada uno frases como las
siguientes:
• •
Alguien te golpea y te empuja.
• •
Alguien no te deja jugar.
• •
Alguien te rompe un juguete.
• •
Alguien te dice algo feo.
2. • •
Alguien te saca el juguete con el que estás jugando y no lo quiere
compartir.
Prepare un trozo de papel para cada alumno (cree situaciones
similares si es necesario). Colóquelos todos en una caja chica con una
etiqueta que diga: “Caja del perdón”.
3. 3.
Materiales necesarios:
1. a.
Una Biblia.
2. b.
Las siguientes láminas: 1–47, de unos niños peleando; 1–57, “José
es vendido por sus hermanos” (“Las bellas artes del Evangelio” 109;
62525); 1–58, de cuando José se dio a conocer a sus hermanos; 1–
59, “La Crucifixión” (“Las bellas artes del Evangelio” 230; 62505).
2. 4.
Haga los preparativos para las Actividades Complementarias que
desee llevar a cabo.
Actividades de aprendizaje
Pida a un alumno que ofrezca la primera oración.
Actividad para despertar la atención
Muestre a la clase la lámina 1–47, de unos niños peleándose.
3. • ¿Qué están haciendo estos niños?
• ¿Por qué estarían peleando?
• ¿Cómo creen ustedes que se han de sentir esos niños?
• ¿Qué podrían decirse el uno al otro para dar fin a la pelea y sentirse
mejor?
Hágales recordar lo que aprendieron en la lección anterior acerca de la
importancia de saber pedir perdón. Explíqueles que después de pedirse
perdón, esos dos niños deben perdonarse el uno al otro; eso quiere decir
que ya no están enojados el uno con el otro y que han vuelto a ser
amigos. Repase con ellos el relato que les hizo de Álvaro y Marcelo, y de
cómo Marcelo perdonó a Álvaro por llevarse sus juguetes sin permiso y
así volvieron a ser amigos.
José perdonó a sus hermanos
Relato
Muéstreles la lámina 1–57, de cuando José fue vendido por sus
hermanos, y cuente a los niños esa historia, que se encuentra en
Génesis 37:12–28.
• ¿Cómo creen que se habrá sentido José cuando sus propios hermanos
lo vendieron para ser un esclavo en Egipto?
Explíqueles que José se convirtió en un hombre importante en Egipto
(véase Génesis 41:38–43) y que, después de muchos años, sus
hermanos fueron a Egipto en busca de alimentos porque en su propia
4. tierra éstos escaseaban. Allí se enteraron de que su hermano José
estaba vivo y que tenía gran poder en Egipto (véase Génesis 42:1–8;
45:1–15).
Muéstreles la lámina 1–58, de cuando José se dio a conocer a sus
hermanos.
• ¿Cómo creen que se habrá sentido José al volver a ver a sus
hermanos? (Véase Génesis 45:14–15.)
• ¿Estaba él enojado con sus hermanos? (Véase Génesis 45:5.)
• ¿Cómo creen que se sintieron sus hermanos al verlo, después de
haberlo vendido?
• ¿Cómo les demostró José que los había perdonado? (Véase Génesis
45:5–15.)
Actividad
Haga que los niños dramaticen el encuentro de José con sus hermanos
poniendo a uno en el papel de José y a los demás como los hermanos.
Jesús nos enseñó que debemos perdonar
Muéstreles la Biblia y explíqueles que la Biblia relata lo que dijo Jesús
acerca de perdonar a los demás. Dígales que una vez, uno de los
Apóstoles le preguntó cuántas veces había que perdonar y que Él le
contestó que debemos estar dispuestos a perdonar siempre. Explíqueles
que ese libro también relata la forma en que Jesús mismo perdonó.
5. Muéstreles la lámina 1–59, de la Crucifixión. Cuénteles lo crueles que
fueron con Jesús los soldados, que lo golpearon y le escupieron encima;
después, le clavaron clavos en las manos y en los pies y lo dejaron
colgado de la cruz para que muriera. A pesar de eso, Jesús no estaba
enojado con ellos y los perdonó. (Trate de no hacer la historia muy
dramática, pues algunos niños quizás se impresionen mucho con la idea
de que alguien haya podido hacer tanto daño al Señor.)
Busque Lucas 23:34, y lea a los alumnos lo que Jesús dijo cuando oró al
Padre Celestial, poco antes de morir: “Padre, perdónalos”. Haga que los
niños repitan con usted la frase varias veces.
• ¿Qué hizo Jesús, aun cuando los soldados lo lastimaron?
• ¿Qué quiere Jesús que hagamos nosotros si alguien nos hace enojar o
nos causa tristeza?
Actividad
Diga a los niños que deben hacer todo lo que usted haga. Luego,
levántese, estírese, cruce los brazos y dé una vuelta alrededor del
cuarto, fijándose que ellos hagan lo mismo; después siéntese.
Explíqueles que al hacer lo que usted hizo e ir detrás de usted, ellos
estaban siguiéndole, y que cuando se sigue a alguien, se hace lo mismo
que hace esa persona. Si nosotros perdonamos a los demás, estaremos
haciendo lo mismo que hizo Jesús; y si hacemos lo que Él hizo, lo
seguimos a Él. Jesús quiere que perdonemos a los que nos causen
tristeza o nos hagan enojar.
Podemos perdonar a los demás
6. Actividad
Muéstreles la “Caja del perdón” y haga que los niños se turnen para
sacar de ella un trozo de papel. Cada vez que un alumno saque uno,
léalo en voz alta y hágales preguntas similares a las siguientes:
• •
¿Les ha pasado esto alguna vez?
• •
¿Cómo se sentirían si les pasara eso?
• •
¿Qué debería decirles la persona que les hizo enojar o les causó
tristeza?
• •
¿Qué deben decir o hacer ustedes a la persona que haya sido grosera
o que les haya causado tristeza o enojo?
Cuénteles de alguna vez en que usted haya perdonado a alguien y
dígales cómo se sintió después de hacerlo. Hágales comprender que
nuestro Padre Celestial y Jesucristo quieren que estemos dispuestos a
perdonar.
Canción
Dirija a los niños para que canten o repitan la letra de “Saber
perdonar” (Canciones para los niños, pág. 52):
Hazme, oh Padre, saber perdonar
al que me ofende o se burla de mí.
Oh, buen Señor, hazme vivir
cerca, más cerca de ti.
Testimonio
7. Expréseles su testimonio de que el Padre Celestial y Jesús quieren que
estemos dispuestos a perdonar. Anímelos a orar para pedirle a su Padre
Celestial que les ayude a perdonar a los demás.
Actividades complementarias
Elija algunas de las siguientes actividades para llevar a cabo durante la
lección.
1. 1.
Cuente a los niños la historia del hijo pródigo, que se encuentra en
Lucas 15:11–32; utilice la lámina 1–49, “El hijo pródigo”, para ilustrarla.
Hágales notar que el padre amaba mucho a su hijo y lo perdonó.
2. 2.
Haga con los niños el siguiente juego con movimientos de los dedos.
Dígales que hagan los movimientos mientras usted les dice el verso.
Dos buenos amiguitos, éste acá y éste allí (levantar ambos puños
cerrados),
empezaron a pelear y gritar y discutir (agitar los puños uno frente al otro).
Estaban los amigos tristes y enojados,
pues a jugar en paz les habían enseñado.
Entonces, uno de ellos bajó la cabeza (con el brazo todavía levantado,
bajar el puño derecho y darlo vuelta hacia afuera),
y el otro también, con mucha vergüenza (hacer lo mismo con el puño
izquierdo).
Dijo el primer amigo: “Ya sé lo que haré: (golpear las palmas de las
manos)
para seguir siendo amigos, perdón te pediré” (juntar los dos puños).
“Y yo”, dijo el otro, “te voy a perdonar”.
Así, los dos contentos se fueron a jugar (cruzar los brazos y sentarse).
3. 3.
Prepare de antemano una etiqueta para que los niños lleven a casa
con estas palabras escritas: Yo debo perdonar.
8. Otras actividades para los niños más pequeños
1. 1.
Repítales la historia de la lección anterior, sobre los dos niños que
estaban jugando y uno de ellos hizo llorar al otro (vea “Otras
actividades para los niños más pequeños”, actividad 4). Recuérdeles
que el niño que se cayó perdonó a su amiguito.
2. 2.
Cante o repita la letra de “Ama a todos, dijo el Señor” (Canciones para
los niños, pág. 39); o de “Cristo me manda que brille” (Canciones para los
niños, pág. 38).
3. 3.
Cante o repita la letra de “Si te sientes feliz”(Canciones para los
niños, pág. 125). Explique a los niños que si perdonamos a los que nos
hacen mal, nos sentiremos felices.