El documento analiza los problemas y soluciones relacionados con la comercialización del maíz amarillo duro en un país. Los problemas incluyen precios fijados por debajo del costo de importación, permisos de importación por encima de la demanda real que afectaron la producción nacional y exceso de stock. Las soluciones propuestas son no emitir permisos de importación hasta vender la cosecha nacional, exportar maíz a Venezuela, incrementar el almacenamiento y requerir que las industrias compren un 40% más que en 2011.