La cultura egipcia antigua era profundamente religiosa. Creían en muchos dioses como Amón, dios principal del panteón egipcio, Ra el dios sol y Athón el aspecto oscuro del dios sol. Algunos faraones como Amenofis IV trataron de establecer un dios único como Athón pero solo tuvieron éxito temporalmente ya que los egipcios seguían creyendo en múltiples deidades. El dios más importante fue Amón-Ra, una deidad compuesta del dios sol Ra y el dios Amón de Te
2. El pueblo egipcio era profundamente religioso. Toda su vida,
pública o privada, estuvo mezclada con la religión. Era una
concepción optimista, orientada hacia la vida eterna, que se
alcanzaba con la práctica del bien.
La religión egipcia poseía una concepción monoteísta, propicia de
los sabios, con un gran corte filosófico. Pero, por encima de este
monoteísmo, crecieron y se multiplicaron los cultos a numerosos
dioses.
Así fue que cada faraón, al intentar la centralización del poder, se
producía una modificación de los cultos, tratando de llevar al
pueblo a la creencia de un dios único. Sólo lo logró Amenofis IV,
(1366 a.C), quien identificó al dios único con el disco solar: Athón.
CULTURA EGIPCIA
3. Athón no era un nuevo dios, sino un
aspecto oscuro del dios del sol venerado
ya en el Imperio Antiguo . "Athón" era el
nombre tradicional para el propio disco
solar. Durante el Reino Nuevo , el Athón
fue considerado como un aspecto de la
deidad compuesta Ra-Amón-Horus. (Ra
representaba al sol durante el día, Amón
representa el sol en el inframundo y
Horus representa la salida del sol).
Akhenatón proclamó "Athón" (el sol
visible en sí mismo) a ser la deidad
única. Debido a las cualidades
naturalistas de algunas de las obras de
arte de la época, algunos han sugerido
que su religión se basa en la
observación científica de que la energía
del sol es la fuente suprema de toda la
vida.
Dejó claro que la imagen de Athón sólo
representaba al dios de la creación y por
lo tanto no podía ser plenamente
comprendido o representado. Este
aspecto de su fe, tiene un parecido
notable a la religión de Moisés, lo que
llevó a Freud a sugerir que Akhenaton
fue el primer monoteísta.
ATHÓN
4. Esta deidad, originaria de
Tebas, conocido como "El rey
de los Dioses“, alcanzó gran
importancia bajo la XII
dinastía. Su nombre significa
"El secretísimo" o "El
misterioso". Era conocido
como "Padre de todos los
vientos", "alma del viento" y en
muchas embarcaciones se
grababa su nombre en el
timón. Esta deidad era
representada con la forma de
un hombre de piel negra o azul
o como un carnero. A veces se
le puede representar como un
hombre con dos grandes
plumas de avestruz sobre la
cabeza. En una mano
empuñaba el cetro, y en la otra
el ankh, llave de la vida.
AMÓN
5. La leyenda mitológica más
conocida en torno a Ra describe
cómo durante el día cruzaba el
cielo con su barca solar, mandyet,
en tanto que por la noche viajaba
en otra barca, Mesketet, a través
de la Duat, bajo la forma de Sol de
poniente, Auf-Ra (carnero). Según
los momentos del viaje, encarnaba
tres entidades diferentes: al
amanecer era Jepri; al mediodía,
Horajty y al anochecer, Atum. Tras
derrotar a la maléfica
serpiente Apofis, la cual intentaba
detener el avance de la barca,
ascendía de nuevo al firmamento
cada mañana.
A principios del Imperio
Antiguo, Ra era sólo una de las
varias deidades solares existentes,
pero hacia 2400 a. C. se había
convertido en el dios oficial de
los faraones, que se consideraban
sus hijos, e incluso sus
reencarnaciones.
RA
6. Durante la dinastía V fue elevado a
deidad nacional y posteriormente
vinculado al dios tebano Amón para
convertirse en Amón-Ra, la
principal deidad del panteón
egipcio. Durante el Imperio
Medio su importancia cedió ante el
auge del culto a Osiris, si bien en
Tebas fue identificado como el dios
local Amón bajo la forma de Amón-
Ra, venerado como "único creador
de la vida". Ra conservó la
supremacía durante siglos, excepto
durante el corto periodo
de atonismo, en tiempos
de Ajenatón (c. 1350-1335 a. C.),
cuando el culto
monoteísta a Athón se impuso en el
reino de Egipto. Incluso el breve
período durante el cual Ajenatón –
que cambió su nombre a Ajenatón,
intentó imponer a Athón, el disco
solar, en detrimento de Amón, es
interpretado por los historiadores
como una muestra de la
persistencia del antiguo culto a Ra. AMÓN-RA