1. FORMAS BÁSICAS DEL DISCURSO EXPOSITIVO
A) LA DEFINICIÓN: Se utiliza para identificar los rasgos constitutivos esenciales de
un referente determinado. La definición consiste en declarar las características y
deferencias, de manera precisa y clara, de cualquier tipo de persona, objeto o
cualquier otro elemento de la realidad. Existen diversas formas de definición, entre
las más importantes podemos destacar.
Definición por generalización y diferencia específica: Se explica el
significado identificando lo más próximo y, luego, la diferencia específica
que la aparta de la generalización.
Ejemplo:
Cóndor: Ave rapaz diurna, de poco más de un metro de largo y tres de envergadura.
Generalidad: Ave
Diferencia específica: Rapaz, diurna, de poco más de un metro de largo…
Ballena: Mamífero, cetáceo balénido, el mayor de todos los animales viviente, llega a
alcanzar 30 metros de longitud.
Generalidad: Mamífero.
Diferencia específica: Cetáceo balénido…
Perro: Mamífero, carnicero doméstico, de la familia de los caninos, que se caracteriza por
su finísimo olfato.
Generalidad: Mamífero.
Diferencia específica: carnicero doméstico, de la familia…
Definición por uso o función: se define a través del uso o función que tiene
un objeto.
Ejemplo:
Termómetro: Instrumento para medir la temperatura.
Cocina: Pieza donde se guisa la comida.
Brújula: Instrumento para determinar las direcciones de la superficie terrestre.
Definición por etimología: Se señala el origen del término y su
significado. Otro tipo de definición que está íntimamente relacionada con la
2. etimología es la histórica, ya que señala la evolución de la palabra a través
del tiempo.
Ejemplo:
Literatura: Del latín literatura, que significa escritura, lo escrito. Arte que emplea como
instrumento la palabra.
Teólogo: Del latín theologus y este del griego teo, “dios” y de logo “estudio”. Persona que
profesa la teología o tiene en esta ciencia especiales conocimientos.
Definición por sinonimia: Se señalan sinónimos del término que se
define.
Ejemplo:
Oprobiar: Vilipendiar, infamar, causar oprobio.
Precavido: Cauto, sagaz, prudente, previsor.
Definitivo: Decisivo, resolutivo, concluyente.
Definición por negación: Se define a partir de lo que no significa el
término.
Ejemplo:
Libertad: Libertad no es libertinaje.
Barbilampiño: Que no tiene barba.
Alimentarse: No significa el hambre sino tener una dieta equilibrada.
B) LA DESCRIPCIÓN: Se utiliza cuando se entregan diversos datos para configurar
una imagen de los objetos, de sus diferentes aspectos y de los elementos que lo
constituyen. La descripción suele ser estática, en contrastes con la narración que
es esencialmente dinámica, porque está relata hechos o acontecimientos.
Desde el punto de vista del enfoque del autor, puede ser:
Descripción denotativa (u objetiva): el autor tiene una actitud ajustada al objeto,
eliminando al máximo sus opiniones personales, enumera con precisión los rasgos
que definen lo descrito. La función dominante es la referencial y se encuentra, por
ejemplo, en textos científicos.
Descripción connotativa (o subjetiva): actitud personal del autor, que plasma lo
que le “sugiere” el objeto que describe. Suele utilizar el lenguaje poético
(comparaciones, metáfora, epítetos, etc). La función predominante es la poética,
por ejemplo, se encuentra en textos artísticos y literarios.
3. DESCRIPCIÓN DE OBJETOS:
Ejemplo 1: La silla de mi pieza es de madera de color blanco y su base es de género. La
descripción puede formar parte, literalmente, de un relato donde la acción se focaliza en el
ambiente o en un personaje.
Ejemplo 2: A continuación, otro ejemplo de descripción, esta vez tomado de un aviso
publicitario:
“Jeep Cherokee, con motor de 2.5 lts, 150 caballos de fuerza, transmisión manual de 6
velocidades, doble air bag, frenos de disco en las 4 ruedas, con ABS y aire
acondicionado, en modelo deportivo: $ 13.490.000”.
La descripción, en general, y la de un objeto en particular, debe seguir un orden, que
puede ser el siguiente:
Primero, reconocer con detenimiento el objeto utilizando los sentidos:
- Con la vista: observemos con minuciosidad y fijaremos nuestra atención en el
color, la forma, el volumen y la disposición.
- Con el oído: escucharemos o imaginaremos los sonidos que se producen o que
pueden caracterizar lo descrito.
- Con el olfato: captaremos o recrearemos los olores que lo singularizan.
- Con el gusto: intentaremos asemejar los sabores o gustos conocidos.
- Con el tacto: reconoceremos la textura, temperatura y consistencia de lo descrito.
En segundo lugar, debemos hacer una selección de sus aspectos más
relevantes. Estableceremos un criterio para la organización de los datos. El
criterio puede ser:
- Partir del aspecto general para llegar a las características particulares.
- Partir del espacio: derecha – izquierda, arriba – abajo.
Finalmente, redactaremos el texto. Para ello debemos señalar con claridad
qué aspecto se describe y utilizar referencias que permitan al lector
localizar la parte descrita (arriba, abajo, encima, debajo, derecha,
izquierda, delante, detrás).
DESCRIPCIÓN DE PERSONAS O CARACTERIZACIÓN:
Entrega información sobre los rasgos de personas, personajes o figuras personalizadas.
La caracterización, además, suele incorporar el factor de la subjetividad, por lo tanto el
emisor, al referirse a estos sujetos, emite un juicio acerca de ellos.
4. 1) La prosopografía: descripción de una persona en su aspecto físico.
2) La etopeya: se describen las cualidades morales o psicológicas de las personas.
3) El retrato: se entremezclan las características físicas y psicológicas.
Ejemplo: La niña era delgada y morena. No tenía más de 11 años y generalmente se veía
triste. Al leer el enunciado “y generalmente se veía triste” comprendemos de inmediato
que estamos frente a una caracterización: se habla de una persona, pero también se
expone el punto de vista subjetivo del emisor, quien concluye que el aspecto de la niña es
de tristeza, de acuerdo a su apreciación.
A esta forma del discurso expositivo podemos asociar una gran variedad de tipos de
textos, específicamente aquellos en los cuales exista una referencia a personas,
personajes o figuras personalizadas, tal como dijimos antes. De esta manera,
encontramos caracterizaciones en textos literarios (por ejemplo, en relatos épicos,
novelas y cuentos, cuando se presenta a un personaje) o en textos no literarios
(semblanzas de un personaje de interés público, como un actor de cine o un político).
El siguiente es otro ejemplo de caracterización:
“Como buen Sagitario, Nicolás es el centauro alegre y optimista que avanza a paso firme
en una vida llena de obstáculos. Expansivo; en este caso, además de apuesto y
seductor”.
Al describir a las personas, el emisor suele elegir un orden que permita al lector hacerse
una idea de cómo es el personaje. El emisor puede describir el físico con dos
procedimientos distintos: de lo general a lo particular o de lo particular a lo general. El
primer procedimiento consiste en expresar la impresión que nos produce la persona en su
conjunto, y posteriormente, ir dando cuenta de los rasgos (rostro, figura, edad,
indumentaria). En el segundo procedimiento, hacemos lo contario: dar cuenta de los
rasgos concretos que más nos llaman la atención y, posteriormente, expresar la impresión
que nos produce la persona en su conjunto.
Pero, además, en la descripción escrita de las personas, se suelen incluir sus rasgos
psíquicos para tener una completa visión del personaje: cómo es físicamente y cómo es
por su forma de ser.
DESCRIPCIÓN DE ESPACIOS
Esta descripción es la relación de las características y rasgos predominantes de un lugar,
ya sea un interior – en un recinto o dentro de una construcción o exterior en la naturaleza,
al aire libre.
El emisor de un texto descriptivo suele ofrecer al lector una primera visión general del
espacio que describe. Después elige una organización para describir los distintos
elementos de ese espacio: de arriba abajo, de derecha a izquierda, de lo más cercano a
lo más lejano, recorriendo el espacio, fijando su atención en un elemento de ese espacio,
etc.
1) Pictórica: tanto quien describe como el ambiente se encuentran estáticos, como si
fuera un cuadro.
5. 2) Topografíca: el descriptor está en movimiento y el ambiente estático (imagínate
que estas describiendo el jardín de una casa mientras paseas por él).
3) Cinematográfica: quien describe se encuentra estático, mientras que el ambiente
se presenta en movimiento (imagínate en un cine).
C) NARRACIÓN: Consiste en relatar hechos o situaciones que suceden en una
secuencia temporal definida.
Ejemplo: Primero compré chocolate, luego visité a mi amiga un rato corto.
Posteriormente, me fui a mi casa a estudiar para la prueba. Esta forma del discurso
expositivo establece un orden temporal de los acontecimientos o acciones, no
debemos olvidar que también ciertos textos literarios (como el diario íntimo) pueden
contener, por momentos, discursos narrativos combinados con otras formad
expositivas. Esto en el caso de que se cuenten acciones en un orden temporal.
D) DISCURSO DEL COMENTARIO: se trata de un discurso en que predomina la
finalidad de informar al receptor opinando acerca del tema del cual se habla. Por
ello, también suele entendérselo como un tipo de discurso argumentativo. Según
la RAE, comentar significa explayarse, “declarar el contenido de un escrito, para
que se entienda con más facilidad”. Su función es comentar, explicar, precisar
información, aclarar los datos que se entregan o declaran el punto de vista del
emisor.
Ejemplo: Las clases pendientes de bioquímica se realizaron ayer ante un entusiasta
estudiando.
En este ejemplo, no solo se informa acerca de lo que ocurrió, sino que se opina
(“entusiasta”) al respecto. Es posible asociar al discurso del comentario la editorial
periodística y las críticas literarias o de cine, ya que en ellos se informa y a mismo
tiempo se manifiesta una opinión acerca de los temas tratados.
Al respecto es importante señalar que los discursos se clasifican según su finalidad y
la situación comunicativa en la que se presentan. Por ello, las clasificaciones aquí
presentadas corresponden a distinciones analíticas que permiten comprender los
fenómenos discursivos, pero que no pueden ser aplicadas sin considerar las
situaciones en que ocurren y las finalidades con que los discursos han sido emitidos.
El discurso del comentario es un caso en que la consideración de estas variables es
especialmente relevante para su clasificación, pues se trata de discurso que algunas
veces se sitúa entre lo expositivo y lo argumentativo. En otras palabras: cuando un
texto se articula como comentario (información que presenta opinión) forma parte del
discurso expositivo pues su finalidad principal es informar, en cambio, si esta opinión
busca influir sobre el receptor (más que informarle), con la finalidad de convencerlo o
persuadirlo para que adopte un determinado punto de vista, entonces el discurso se
estructurará probablemente en torno a un conjunto de argumentos que apunten a
comprobar una tesis. En resumen, el discurso del comentario no se caracteriza por
recurrir a la estructura argumentativa (tesis + argumentos + conclusión), pues no tiene
6. como finalidad principal convencer o persuadir, sino básicamente informar opinando
sobre determinado tema.