La Argentina recibió una gran cantidad de inmigrantes europeos en el siglo XX, especialmente entre 1880 y 1930. Los factores que impulsaron la inmigración incluyeron la desocupación, bajos salarios y crisis en Europa, así como las oportunidades económicas en Argentina. Los inmigrantes provenían principalmente de Italia y España y trabajaron principalmente en el campo y las ciudades, aunque algunos regresaron a Europa. La industrialización en las décadas de 1930 y 1940 atrajo a más trabajadores a las ciudades desde el campo.
2. La Argentina fue uno de los países de América que más inmigrantes recibió en el período de emigración de masas, de acuerdo a los datos del censo de 1914, una tercera parte de los habitantes del país y la mitad de los habitantes de la ciudad de Buenos Aires eran extranjeros.
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4. La inmigración es uno de los elementos que estos hombres creen indispensable para que el país se pueble, sobre todo con razas que puedan mejorar el nivel étnico y la mentalidad de los argentinos criollos. Los inmigrantes que llegaron en décadas posteriores no fueron los que el estado había deseado. Imagen de inmigrantes agricultores.
5. Millones de europeos cruzaron el océano Atlántico, venían a “hacer la América”, tentados por la posibilidad de trabajar como mano de obra rural o acceder a la propiedad de tierras y por los beneficios que otorgaba el Estado a los extranjeros que tenían voluntad de trabajar en la Argentina. La gran mayoría no se instaló en el campo; algunos sí, pero luego se desplazaron a las ciudades.
6. Algunos inmigrantes venían con la idea de enviar periódicamente sus ganancias a la familia que habían dejado en el país natal. Otros venían a instalarse. Muchos de ellos eran hombres que hacían la travesía solos, y luego enviaban el dinero necesario para que se trasladara el resto del grupo familiar. Y algunos otros, después de trabajar un tiempo en la Argentina, finalmente, retornaron a sus pueblos de origen.
7. Desde mediados de la década de 1930 y durante la década de 1940, en la Argentina se registró el crecimiento de nuevas industrias (principalmente en Buenos Aires, Córdoba y Rosario) dedicadas a la sustitución de importaciones de bienes de consumo. Este proceso de industrialización motivó una fuerte corriente migratoria interna, desde el campo a las ciudades. Este fenómeno es una tendencia que se manifiesta mundialmente y es conocido como éxodo rural.