1. EL MEMBRILLO
El membrillo es originario de Asia menor, Irán o Turquía.
Su fruto se utiliza para elaborar carne de membrillo, compotas, jalea, etc. También
puede comerse crudo y utilizase para decorar y aromatizar.
Tiene muchas propiedades: astringente, emoliente y está especialmente recomendado
en niños y personas mayores. La planta sirve como patrón de injerto para otros frutales.
CRECIMIENTO DEL MEMBRILLO
Durante el mes de febrero, y siempre
dependiendo de la temperatura y el clima, el árbol
del membrillo empieza a arrojar, como suelen decir
comúnmente los agricultores, esto quiere decir que
empiezan a salir los primeros brotes y que en muy
pocos días se podrán ver las primeras flores.
Las flores del membrillo son de la familia de las
rosáceas de color blanco, con suaves tonos rosas,
solitarias y de cáliz persistentes.
Durante el mes de marzo podemos ver los
membrillares florecidos y en general suele ser un
espectáculo muy bonito y digno de ser observado. En
estas imágenes podemos ver el membrillo en flor.
2. En los meses siguientes el membrillo va creciendo y engordando, para esto necesita
agua, por esto los riegos deben de ser muy abundantes. En la actualidad el riego se realiza
por goteo, antes se regaba a “manta”, es decir, el suelo quedaba cubierto por el agua.
Durante los meses de mayo a agosto se realizan
varios tratamientos para combatir las enfermedades
que suelen afectar tanto al fruto como al árbol,
normalmente se suelen utilizar fito sanitarios
autorizados pero en nuestros cultivos ecológicos se
sustituyen por estiércol de animal.
La recolección comienza en el mes septiembre
y se prolonga hasta los últimos días de noviembre.
Cuando empiezan los fríos la hoja comienza a
caerse y en el mes de diciembre se empieza con la
poda para preparar el árbol para el año siguiente.
Taller El Membrillar
Texto: Mª Carmen y Manoli Gómez