La luz visible es la única parte del espectro electromagnético a la que nuestros ojos son sensibles. Las diferentes longitudes de onda de las ondas luminosas producen diferentes colores. Todas las radiaciones electromagnéticas, incluida la luz, se comportan de la misma manera y no necesitan un medio material para propagarse. El espectro electromagnético abarca todo el rango de posibles radiaciones electromagnéticas y las ondas electromagnéticas se usan en medicina para obtener imágenes del interior del cuerpo.