2. NUNCA
MAS!
POR QUE LAS GOLPEAN ?
La violencia contra la mujer por parte de su
cónyuge está sustentada en el mito de la
inferioridad del sexo femenino, a su situación de
desigualdad en la sociedad, a la dependencia
económica, al temor por la vida de sus hijos y la
propia.
También, al desconocimiento de sus derechos ante
la ley, a la falta de confianza de la mujer en sí
misma, a la falta de educación y a las presiones
sociales, lo que conduce a la inoperancia de los
mecanismos de protección de los organismos del
Estado.
3. NUNCA
MAS!
CUALES SON LAS ESTADISTICAS ?
Para determinar la violencia intrafamiliar en contra de la
mujer por parte de su cónyuge, se analizaron los casos
presentados en la Comisaría de Familia de Sincelejo, Sucre,
para el año 2003, tomándose una muestra de 30 casos entre
205 registrados. Se utilizaron como instrumentos: fuentes
primarias (observación directa, entrevistas abiertas y
cerradas, encuestas), fuentes secundarias (libros y motores
de búsqueda en internet).
Durante el proceso de investigación se determinó que
existen diferentes situaciones y conductas personales
(adopción personal de uso o no uso de narcóticos y otros)
que contribuyen a los diferentes tipos de maltrato.
4. NUNCA
MAS!
POR QUÉ CALLAN ?
Muchas han sido las causas que llevan a una mujer a callar,
y en el peor de los casos, a perdonar un maltrato. De manera
que sería bueno conocer qué la empuja hacia esa conducta,
ya que son muchas las interrogantes que suele hacerse la
gente cuando hay casos de reincidencia.
El problema de autoestima que confronta una mujer que es
víctima de violencia suele ser a consecuencia de la misma.
Tomando en consideración que el agresor inicia con
técnicas sutiles a crear una dependencia emocional de la
mujer hacia él, lo cual la va desvalorizando como persona y
la conduce a la sumisión y obediencia.
5. NUNCA
MAS!
QUE HACEMOS AL RESPECTO ?
Detectar los signos de maltrato antes de que ocurran es lo
que más puede protegernos de sufrir situaciones de este
tipo, poniendo fin a la relación antes de que tenga lugar la
segunda bofetada y no permitiendo caer en la trampa del
arrepentimiento y la seducción cuando nuestra integridad
está en juego. Los abusadores tienen miedo. Cada vez es
más fácil y seguro que los denuncien, ya sea en Internet, por
teléfono o personalmente. Si has sido víctima de algún tipo
de abuso, o conoces a alguien que padece este problema,
aunque sea un familiar cercano, no lo pienses dos veces:
¡Denúncialo!