2. ¿Qué es el Cáncer?
El cáncer es un sistema renegado
de crecimiento que se origina
dentro del biosistema de un
paciente, más comúnmente
conocido como el cuerpo humano.
Hay muchos tipos diferentes de
cánceres, pero todos comparten
una característica de contraste:
crecimiento descontrolado que
progresa hacia la expansión sin
límites.
Debido a que el cáncer es tan
común, las personas tienen
muchas preguntas acerca de la
biología, detección, diagnóstico,
causas posibles y estrategias para
la prevención del cáncer.
3. Diferentes Tipos de Cáncer
El cáncer puede originarse casi en cualquier
parte del cuerpo.
Los carcinomas, los tipos más comunes de
cáncer, se originan de las células que cubren
las superficies externas e internas del
cuerpo. Los cánceres de pulmón, de seno
(mama) y de colon son los cánceres más
frecuentes.
Los sarcomas son cánceres que se originan
de células que se encuentran en los tejidos
de soporte del cuerpo, como por
ejemplo, hueso, cartílago, grasa, tejido
conectivo y músculo.
Los linfomas son cánceres que se originan
en los ganglios linfáticos y en los tejidos del
sistema inmunológico del cuerpo.
Las leucemias son cánceres de las células
inmaduras de la sangre que crecen en la
médula ósea y que tienen la tendencia a
acumularse en grandes cantidades en el
torrente sanguíneo.
5. La Pérdida de Control del
Crecimiento Normal
El cáncer se origina por una
pérdida de control del crecimiento
normal. En los tejidos
normales, las tasas de
crecimiento de nuevas células y la
muerte de células viejas se
mantienen en balance. En el caso
del cáncer, este balance se altera.
Esta alteración puede ocurrir
como resultado de un crecimiento
celular descontrolado o de la
pérdida de una habilidad de la
célula de someterse a suicidio
celular mediante un proceso
conocido como "apoptosis". La
apoptosis o "suicidio celular", es
el mecanismo mediante el cual
las células viejas o dañadas
normalmente se autodestruyen.
6. Ejemplo de Crecimiento
Normal y Canceroso
La capa delgada más exterior de la piel normal,
conocida como la epidermis, tiene un espesor
de aproximadamente una docena de células.
Las células en la fila inferior de esta capa,
conocida como la capa basal, se dividen de
manera exacta lo suficientemente rápido para
reemplazar a las células que están
continuamente desprendiéndose de la
superficie de la piel. Cada vez que una de
estas células basales se divide, produce dos
células. Una permanece en la capa basal y
retiene la capacidad para dividirse. La otra
emigra hacia afuera de la capa basal y pierde
la capacidad para dividirse. El número de
células con la capacidad para dividirse en la
capa basal, por lo tanto, permanece igual.
Durante el desarrollo del cáncer de la piel, el
balance normal entre la división celular y la
pérdida celular se altera. Las células basales
ahora se dividen más rápidamente de lo que es
necesario para reemplazar a las células que se
están desprendiendo de la superficie de la piel.
Cada vez que una de estas células basales se
divide, las dos células recientemente formadas
frecuentemente retienen la capacidad para
dividirse, lo que conduce a un aumento en el
número total de células con capacidad para
dividirse.
7. Los Tumores (Neoplasmas) La
Invasión y Metástasis
Este aumento gradual en el número de
células con capacidad para dividirse crea
una masa creciente de tejido conocido
como un "tumor" o "neoplasma". Si la
tasa de división celular es relativamente
rápida y no hay señales de "suicidio" en
su lugar para activar la muerte celular, el
tumor crecerá rápidamente de tamaño; si
las células se dividen más lentamente, el
crecimiento del tumor será más lento. Sin
importar la tasa de crecimiento, los
tumores finalmente aumentan de tamaño
debido a que nuevas células se están
produciendo en cantidades mayores de lo
que es necesario. A medida que más y
más de estas células con capacidad para
dividirse se acumulan, la organización
normal del tejido gradualmente se altera.
Los cánceres son capaces de diseminarse
a través de todo el cuerpo mediante dos
mecanismos: invasión y metástasis. La
invasión se refiere a la migración y
penetración directas de las células
cancerosas en los tejidos vecinos. La
metástasis se refiere a la habilidad de las
células cancerosas para penetrar dentro
de los vasos linfáticos y
sanguíneos, circular a través del torrente
sanguíneo y después invadir los tejidos
normales en otras partes del cuerpo.
8. Los Tumores malignos y
benignos y su peligrosidad
Dependiendo de si ellos se pueden
diseminar o no por invasión y
metástasis, los tumores se clasifican
como benignos o malignos. Los
tumores benignos son tumores que no
se pueden diseminar por invasión o
por metástasis; por lo tanto, ellos sólo
crecen localmente. Los tumores
malignos son tumores que son
capaces de diseminarse por invasión y
por metástasis. Por definición, el
término "cáncer" se aplica sólo a los
tumores malignos
Un tumor maligno, un "cáncer", es un
problema de salud más serio que un
tumor benigno debido a que las
células cancerosas se pueden
diseminar a partes distantes del
cuerpo. Por ejemplo, un melanoma
(un cáncer de células pigmentadas)
que se origina en la piel puede tener
células que entran al torrente
sanguíneo y se diseminan a órganos
distantes, como por ejemplo, el
hígado o el cerebro. Las células
cancerosas presentes en el hígado se
llamarán melanoma metastásico y no
cáncer del hígado. Las metástasis