El documento describe el Ara Pacis, un altar monumental construido en Roma en el 13 a.C. para conmemorar el regreso de Augusto de sus campañas militares. El altar está formado por muros decorados que rodean la estructura y dos entradas. Sus relieves representan la procesión del retorno de Augusto, escenas alegóricas y figuras mitológicas relacionadas con el origen divino de Roma. El altar se erigió para celebrar la paz y abundancia traídas por Augusto.