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En la selva había una trampa, y en ella cayeron atrapados un león y un burro.
             El león al ver al burro temblando de susto le dice: 

      Tranquilo viejo, yo no como burros, a mí me gustan los venados. 

Y el burro se tranquiliza, pero pasaban los días y nada de comida. El león con
  hambre, el burro arrinconado en la trampa le recuerda que no le gusta la
                     carne de burro, y el león contesta: 

           ¡Sí viejo, pero hoy amaneciste con una cara de venado!

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  • 2. En la selva había una trampa, y en ella cayeron atrapados un león y un burro. El león al ver al burro temblando de susto le dice:  Tranquilo viejo, yo no como burros, a mí me gustan los venados.  Y el burro se tranquiliza, pero pasaban los días y nada de comida. El león con hambre, el burro arrinconado en la trampa le recuerda que no le gusta la carne de burro, y el león contesta:  ¡Sí viejo, pero hoy amaneciste con una cara de venado!