Atlas de Anatomia Humana - Mark Nielsen.pdf

La anatomía es una ciencia visual y, en ninguna otra disciplina, es tan cierto el dicho de que «una imagen vale más que mil pala-
bras». Teniendo en mente esta premisa, hemos creado este libro para enseñar anatomía de manera real: con fotografías de diseccio-
nes de cadáveres y de los huesos del esqueleto, y micrografías de los tejidos humanos. Creemos que cada palabra que se ha escrito
sobre anatomía es el resultado de que alguien haya descrito lo que observaba en una disección (o, como es el caso de muchos auto-
res actualmente, de parafrasear los conocimientos y los escritos de otras personas sobre la disección). En este libro, le proporciona-
mos imágenes de anatomía reales, con la esperanza de que esto le ayude a visualizar mejor las palabras de la anatomía.
A menudo, oímos que las fotografías no pueden aclarar y enseñar tan bien como el arte. Pero, si bien es cierto que el artista
tiene muchas más licencias creativas que el disector, también lo es que muchas obras de arte anatómico no siempre reflejan con
precisión lo que en realidad observa el disector o, lo que es lo mismo, el cirujano en su práctica clínica. Creemos que una buena
disección y fotografía pueden ser instructivas, especialmente, cuando están unidas creativamente a la enseñanza de conceptos. Con
esta mentalidad, otro objetivo de este libro es presentar imágenes que enseñen y no un mero escaparate con una plétora de anato-
mía. Cada disección ha sido realizada con fines instructivos y se emplean imágenes de referencia para destacar y enfatizar los con-
ceptos representados en las disecciones. Existen muchos modelos de diseño sencillo que organizan y clarifican las estructuras del
cuerpo vertebrado. Intentamos mostrar estos modelos en nuestra presentación de la estructura anatómica a lo largo de los capítulos
de este libro. Las pocas palabras que acompañan las imágenes en el libro ponen de relieve los modelos y las relaciones básicas mor-
fofuncionales de las disecciones y micrografías.
También ha sido nuestro objetivo crear un libro que pudiera resultar útil a los estudiantes de cualquier nivel de la educación
anatómica. Los capítulos están construidos con una aproximación sistemática a la anatomía para satisfacer las necesidades de un
curso típico de anatomía de grado. Cada capítulo ilustra los conceptos y características de un sistema corporal y las describe con
disecciones claras e imágenes de referencia de las disecciones. Por otro lado, dado que es un libro basado en la disección, también
constituye una excelente referencia para los estudiantes de grado de medicina, fisioterapia u otros que estudien la anatomía en ca-
dáveres desde una perspectiva regional. Incluso el lego que quiera aprender más sobre el fascinante cuerpo humano puede benefi-
ciarse de las magníficas imágenes de anatomía que encontrará a lo largo del libro.
Para concluir, queremos agradecer a unas pocas personas la ayuda prestada en las disecciones que han sido fotografiadas para
este libro. Una buena disección es una tarea que consume tiempo y requiere sólidos conocimientos anatómicos, habilidad y destre-
za, y, sobre todo, mucha paciencia. Nathan Mortensen ha desempeñado un papel fundamental ayudando a las disecciones que
encontramos a lo largo de las páginas deeste libro. También las siguientespersonas hanparticipado en alguna disección y queremos
agradecerles su contribución: Richard Homer, Torrence Meyer, Jordan Barker, Jon Groot y John Dimitropoulos. Asimismo, quere-
mos agradecer a Alexa Doig que tomara algunas de las fotografías de los cadáveres.
Esperamos que este libro amplíe su visión de la increíble máquina que llamamos cuerpo humano. Nos encantaría recibir cual-
quier comentario que tenga sobre cómo mejorar el libro en futuras ediciones.
Mark Nielsen, University of Utah
marknielsen@bioscience.utah.edu
Shawn Miller, University of Utah
smiller@biology.utah.edu
Prefacio
v

Contenido
Capítulo 1 Introducción. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1
Capítulo 2 Histología . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 3
Capítulo 3 Tegumento común . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 17
Capítulo 4 Sistema esquelético . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 25
Capítulo 5 Esqueleto axial. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 33
Capítulo 6 Esqueleto apendicular . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 83
Capítulo 7 Sistema articular . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 123
Capítulo 8 Sistema muscular. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 139
Capítulo 9 Músculos de la cabeza. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 143
Capítulo 10 Músculos del tronco . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 157
Capítulo 11 Músculos del miembro superior . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 175
Capítulo 12 Músculos del miembro inferior . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 195
Capítulo 13 Sistema nervioso periférico . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 211
Capítulo 14 Sistema nervioso central . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 231
Capítulo 15 Sistema endocrino . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 249
Capítulo 16 Aparato cardiovascular . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 261
Capítulo 17 Aparato respiratorio. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 289
Capítulo 18 Aparato digestivo. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 299
Capítulo 19 Aparato urinario. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 313
Capítulo 20 Aparato reproductor. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 321
vi

Introducción
1
La anatomía humana es la ciencia que se ocupa de
la estructura y diseño del cuerpo humano. El conocimiento de la anatomía no sólo es
importante para el anatomista, sino que constituye una herramienta esencial para
todos los profesionales que se ocupan del cuerpo humano en cualquiera de las
diferentes modalidades. Además, cualquiera puede beneficiarse del cono-
cimiento anatómico, puesto que es lo que somos y conocer nuestro cuer-
po puede tener un valor inestimable.
La anatomía es una ciencia antigua. Los principales métodos que
usaba, y todavía usa, el anatomista para descubrir lo que se sabe de
anatomía son la disección y el microscopio. La disección implica
realizar cortes de un cuerpo para revelar su macroestructura. Esta
fue la primera técnica empleada para explorar la estructura del
cuerpo y sigue siendo la mejor para conocer verdaderamente el
diseño y las relaciones anatómicas en detalle. Los mejores dibu-
jos, fotografías e imágenes virtuales nunca reemplazarán lo que
un disector experimenta durante una disección. La llegada
del microscopio expandió el conocimiento anatómico,
aportando perspectivas microscópicas que no estaban al
alcance del ojo a simple vista. El conocimiento de la es-
tructura microscópica abrió la puerta a los conocimien-
tos de los aspectos funcionales de la anatomía.
En este atlas, intentamos enseñar la elegante estruc-
tura y diseño del cuerpo humano usando las herramientas y
métodos del anatomista: disección y microscopio. Aunque
hay numerosas y excelentes fuentes visuales que ilustran la
anatomía, creemos que, a excepción del estudio personal me-
diante disecciones, unas buenas fotografías tomadas de una
buena disección y una buena microscopía son la forma más
fidedigna de representar la anatomía en imágenes. Nada ilus-
tra mejor lo real que aquello que es real. El objetivo de los
autores es crear imágenes que enseñen y usarlas para destacar
en los modelos las características del diseño anatómico.
Este atlas aborda el cuerpo desde un enfoque por aparatos y sistemas;
es decir, cubre cada sistema o aparato corporal y los órganos asociados a él.
Cada sistema se destaca en las fotografías de las disecciones. Sin embargo,
las disecciones de la anatomía sistémica, a menudo, revelan perspectivas
regionales y relaciones, por lo que se señalan los detalles estructurales de la
anatomía regional en cada imagen. Diviértase explorando lo que quizá po-
dría ser la mejor alternativa a la disección.
1

2
Las características del diseño del están ilustra-
Atlas de Anatomía Humana
das en esta página usando como ejemplo una página del libro. Cada página
empezará con una corta introducción a la anatomía presentada en la pági-
Diseño del libro
na. Esta breve narración ocupará este espacio de texto. Bajo este texto, la mayor parte de la página se centrará en las
imágenes anatómicas y sus correspondientes leyendas. Los distintos tipos de elementos empleados para enseñar e ilustrar
la anatomía están remarcados en los cuadros inferiores.
Estructura presentada
El encabezado de página mostrará la
estructura anatómica o función que
es objeto de estudio de la página
Texto descriptivo
Una breve descripción morfológica
y funcional de las estructuras
anatómicas de la página
Imagen de referencia
La imagen de referencia ayuda a
identificar fácilmente la anatomía
presentada y ver sus relaciones
Imágenes
de disección
Bellas disecciones que
ilustran la anatomía del
cuerpo humano
Lista de estructuras
Lista numerada con todas
las estructuras visibles en
las imágenes anatómicas
Estructuras
numeradas
Estructuras numeradas y
ordenadas discretamente
para no entorpecer la
visualización de las
imágenes
Imágenes de
microscopio
Nítidas microfoto-
grafías histológicas
ilustran el contexto
microscópico de la
estructura anatómica
Microfotografía de la mucosa
del estómago con detalle superior
40× y 100×
1 Estómago
2 Cardias del estómago
3 Fondo gástrico
4 Cuerpo del estómago
5 Antro pilórico
6 Conducto pilórico
Estómago
7 Píloro
8 Esfínter pilórico
9 Rugosidades gástricas
10 Curvatura mayor
11 Curvatura menor
12 Fosa gástrica
13 Célula mucosa superficial
14 Lámina propia
15 Célula mucosa del cuello
16 Glándulas gástricas
17 Hígado
18 Vesícula biliar
19 Bazo
20 Epiplón mayor
Disección abdominal en la que se muestra
el estómago
Vista anterior
senterio. El estómago realiza diversas funciones, la más importante de las cuales es la de almacenamiento de los
alimentos ingeridos antes de ser vaciados al intestino delgado a un ritmo que permita la digestión y absorción óptimas.
El estómago es un órgano en forma de «J», de tamaño y forma variables, que posee
el mayor diámetro del tubo digestivo. Ocupa el cuadrante superior izquierdo de la
cavidad abdominal, donde se ancla a la pared abdominal posterior mediante el me-
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Leyendas
Las leyendas describen la imagen
y la vista o aumento de la anatomía
o histología
Corte frontal del estómago
Vista anterior
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3

La histología es el estudio de los tejidos,
que son los materiales de construcción del organismo. Al igual que los materiales
que se emplean para fabricar la ropa con la que se viste el ser humano, los tejidos
son los materiales que forman las diversas capas y estructuras de todos los órganos
de su cuerpo. Por ejemplo, una persona puede vestirse poniéndose una camiseta fina
de algodón debajo de una camisa de manga larga y un suéter de lana encima de las dos
camisas: cada capa de ropa está hecha de un material diferente y éste está orga-
nizado en una única estructura que tiene sus propias cualidades funcionales.
Lo mismo es válido para los órganos del cuerpo: cada órgano consiste en
distintas capas estructurales y cada capa en un tipo de tejido específico.
Por ejemplo, el estómago posee una capa interna de epitelio cilíndrico
(columnar) simple que está en contacto con los alimentos ingeridos y
segrega enzimas para ayudar a la digestión de los alimentos. Este teji-
do epitelial está rodeado por una capa vascular de tejido conectivo
laxo que contiene los vasos sanguíneos que transportan las moléculas
absorbidas del estómago. El tejido muscular liso rodea las dos capas
internas y ayuda remover los alimentos en el estómago y los lleva hacia
el intestino delgado. El tejido muscular liso está cubierto por una viscosa
y fina capa de tejido epitelial escamoso que forma la superficie externa del
estómago y que le permite moverse contra los órganos vecinos al tiempo que
reduce el daño por fricción. Y así como las capas de ropa tienen nombres
—camiseta, camisa, suéter—, también los tienen las capas estructurales de
un órgano como el estómago —mucosa, submucosa, muscular y serosa.
Todos los tejidos del cuerpo se pueden organizar en cuatro cate-
gorías básicas de tejido: tejido epitelial, tejido conectivo y de sostén,
tejido muscular y tejido nervioso. Cada categoría de tejido posee
unas características estructurales únicas que son compartidas por los
tejidos de dicha categoría. Los tejidos epiteliales son tejidos de super-
ficie que consisten en numerosas células siempre estrechamente em-
paquetadas. Los tejidos conectivo y de sostén comparten la caracte-
rística de tener relativamente pocas células, que están dispersas por la
matriz extracelular fibrosa que las rodea. El tejido muscular está formado
por células alargadas con una disposición de sus proteínas diseñadas para
acortarse. Las células del tejido nervioso están ramificadas, como células con
cables, con una gran variedad de formas y tamaños. En este capítulo, se explorará estas
cuatro categorías tisulares y los tipos específicos de tejidos que comprenden cada una
de ellas. En los capítulos siguientes, los diferentes tejidos se mostrarán en el contexto
de los órganos y sistemas o aparatos orgánicos de los que forman parte.
Histología
2
3

4
categoría. Obsérvense las numerosas células estrechamente compactadas de los tejidos epiteliales y contrástese con las
células dispersas y rodeadas de matriz brosa de los tejidos conectivo y de sostén. En el tejido muscular, pueden apreci-
fi
arse las células largas, nas y especializadas con capacidad para acortarse; y en el tejido nervioso, las células rami ca-
fi fi
das a modo de «cables». Se explorará cada una de las principales categorías tisulares con más detalle en las páginas
siguientes.
Las páginas opuestas recogen collages microfotográ cos de las cuatro principales categorías de
fi
tejidos: tejido epitelial, tejido conectivo y de sostén, tejido muscular y tejido nervioso. Las microfoto-
grafías muestran las principales características estructurales que comparten los tejidos de cada
Tejidos
Tejidos epiteliales
Tejidos conectivo y de sostén

5
Tejidos musculares
Tejidos nerviosos

6
se basan en la forma de sus células y en el número de capas celulares que presentan. Casi todos los tejidos epiteliales pue-
den ser descritos y denominados combinando el nombre de su forma — (células planas), — con
escamoso cúbico y cilíndrico
los términos si está integrado por una sola capa de células, o
simple, estratificado, si está formado por más de una capa de
células. Las microfotografías de esta página y la opuesta representan los tejidos epiteliales simples (una sola capa de células).
Los epitelios son tejidos de revestimiento constituidos por numerosas células,
donde cada célula está en contacto con las células contiguas a través de la
membrana celular. Por regla general, las descripciones de los tejidos epiteliales
Tejido epitelial
Epitelio escamoso simple, mesotelio
Epitelio escamoso simple, mesotelio
Epitelio escamoso simple, endotelio
Epitelio cúbico simple

7
Epitelio cilíndrico simple
Corte de la mucosa del intestino delgado, 630×
Epitelio cilíndrico seudoestrati cado
Corte de la mucosa de la laringe, 400×
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Las microfotografías de esta página y la opuesta ilustran los tejidos epiteliales
estratificados (más de una capa de células). Nótese que los tejidos presentan
entre dos y numerosas capas y la forma usada para denominar este tejido es la
que tienen las células que se encuentran en la capa super cial.
fi
Tejido epitelial
Epitelio escamoso estrati cado no queratinizado
fi
Corte de la mucosa esofágica, 200×
Epitelio escamoso estrati cado queratinizado
fi
Corte de la piel, 200×
1 Núcleo
2 Citoplasma
3 Capa celular basal
4 Capa celular intermedia
5 Capa celular superficial
6 Estrato basal
7 Estrato espinoso
8 Estrato granuloso
9 Estrato lúcido
10 Estrato córneo
11 Tejido conectivo
12 Membrana basal
13 Luz glandular
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Espitelio cúbico estrati cado
fi
Corte de un conducto de una glándula esofágica, 400×
Epitelio cilíndrico estrati cado
fi
Corte de la mucosa faríngea, 400×
Epitelio de transición
Corte de la mucosa de la vejiga urinaria, 400×
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provienen del tipo y disposición de las bras producidas por las células y segregadas a la matriz extracelular que las en-
fi
vuelve. Hay tres tipos de bras en la matriz: bras de colágeno, bras reticulares (realmente, una forma delgada de co-
fi fi fi
lágeno) y bras elásticas. Las bras son depositadas en varios grados de densidad y están dispuestas de diferentes for-
fi fi
mas. Los nombres de estos tejidos se basan en los diferentes tipos de bras y en su disposición en la matriz.
fi
Los tejidos conectivos tienen relativamente pocas células y éstas están
rodeadas por una matriz extracelular de bras, las cuales son segregadas
fi
por dichas células. La clasi cación y nombres de los tejidos conectivos
fi
Tejido conectivo
Tejido conectivo laxo (areolar)
Corte de la capa subcutánea del tegumento, 400×
Tejido adiposo
Corte de grasa epicárdica, 200×
1 Mastocito
2 Fibroblasto
3 Fibra de colágeno
4 Fibra elástica
5 Fibra reticular
6 Núcleo de una célula adiposa
7 Citoplasma
8 Membrana plasmática
9 Zona de almacenamiento de lípidos
10 Núcleo de una célula reticular
11 Núcleo de un fibroblasto
12 Laminilla elástica
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Tejido reticular
Corte de un ganglio linfático, 400×
Tejido conectivo denso irregular
Corte de la dermis, 200×
Tejido conectivo denso regular (colagenoso)
Corte de un tendón, 200×
Tejido conectivo denso regular (elástico)
Corte de la túnica media de la aorta, 400×
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La categoría de tejido de sostén engloba a los tejidos esqueléticos: cartíla-
go y hueso. Como los tejidos conectivos, los tejidos de sostén tienen relati-
vamente pocas células rodeadas de una signi cativa cantidad de matriz
fi
Tejido de sostén
extracelular, que producen la mayor parte de las células. Sin embargo, a diferencia de la matriz blanda de los tejidos co-
nectivos, la matriz extracelular de los tejidos de sostén es rme y gomosa en el cartílago, y dura en el tejido óseo.
fi
Cartílago hialino
Corte del cartílago de un hueso fetal en desarrollo, 200×
Fibrocartílago
Corte de un disco intervertebral, 200×
Cartílago elástico
Corte del cartílago de la oreja, 400×
1 Sustancia fundamental hialina
2 Fibras de colágeno en la sustancia fundamental
3 Fibras elásticas en la sustancia fundamental
4 Núcleo del condrocito
5 Condrocito en una laguna
6 Pericondrio
7 Trabécula ósea
8 Osteocito
9 Médula ósea roja
10 Canalículo
11 Laguna
12 Laminilla
13 Conducto central
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Hueso esponjoso
Corte de la epífisis de un hueso metacarpiano, 200×
Hueso compacto
Corte de la diáfisis del peroné, 100×; detalle de una osteona, 400×
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matriz extracelular constituye más parte del porcentaje del tejido que las propias células. Sin embargo, la matriz extracelular
de la sangre y linfa es una matriz líquida denominada en lugar de la matriz blanda y
plasma, firme de los tejidos conectivos.
La reciente Terminologia Histologica complejo hematolinfoide.
sitúa la sangre y linfa en su propia subcategoría denominada
Complejo hematolinfoide Los tejidos sanguíneo y linfático han sido tradicio-
nalmente clasificados como tejido conectivo debi-
do a que, como todos los tejidos conectivos, la
Frotis sanguíneo
Tinción de Wright, 200×; ampliación a 630×; células individuales a 1.500×
1 Eritrocito o glóbulo rojo
2 Leucocito o glóbulo blanco - neutrófilo
3 Leucocito o glóbulo blanco - monocito
4 Trombocito (plaqueta)
5 Plasma
6 Eritrocito crenado o equinocito
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que permite a dicha célula especializarse en la contracción (acortamiento). Los nombres de los diferentes tipos de tejidos
musculares provienen de la disposición de las proteínas contráctiles en sus células. En algunos tejidos, las proteínas están
dispuestas de tal manera que confieren a la célula una apariencia estriada (músculo estriado) o rayada, mientras que, en
otros tejidos, la apariencia rayada no es evidente (músculo no estriado o liso).
Las células musculares son células largas y delgadas que tienen una espe-
cial disposición de las proteínas actina y miosina en el citoplasma. El diseño
arquitectónico de estas proteínas forma la «maquinaria» celular muscular
Tejido muscular liso (no estriado)
Corte longitudinal de la pared muscular del intestino, 500×
Tejido muscular estriado esquelético
Sección del músculo vasto lateral, 400×
Tejido muscular estriado cardíaco
Corte de ventrículo del corazón, 500×
1 Núcleo
2 Sarcoplasma
3 Célula muscular lisa
4 Célula muscular cardíaca
5 Célula muscular esquelética
6 Disco intercalar
Tejido muscular
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neuronas del tejido nervioso, están las pequeñas, pero más numerosas, que se encargan de la protección,
células gliales,
aislamiento y nutrición de las neuronas. Las neuronas siempre están agrupadas en estructuras largas y nas denominadas
fi
nervios, médula espinal encéfalo.
que conforman el complejo de circuitos que reciben el nombre de y
El tejido nervioso forma el complejo eléctrico del sistema de computación de
nuestro cuerpo. Las células que caracterizan el tejido nervioso están rami ca-
fi
das, son células a modo de «cables» denominadas Rodeando las
neuronas.
Tejido nervioso
Tejido nervioso
Frotis con neuronas multipolares, 400×
Neurona
400×
Tejido nervioso
Corte del asta anterior de la médula espinal, 200×
1 Núcleo de una neurona multipolar
2 Cuerpo celular de una neurona multipolar
3 Núcleo de una célula glial
4 Axón
5 Dendrita
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5
5
5
5
5
3
3
3

El tegumento común
forma el sistema orgánico que cubre el cuerpo. Procedente del
latín, donde significa cubrir el interior, el integumento o tegu-
mento común es un sistema importante que realiza diversas
funciones esenciales para la vida. Las capas externas del tegu-
mento común son las denominadas epidermis dermis
y , que
formanlapiel,capaconunaimportantefunciónprotectora.La
pielprotegeelcuerpodediversasmaneras.Suresistentecubier-
ta externa de células muertas resguarda las capas internas más
delicadas de la fricción y abrasión. Las células pigmentarias de la
epidermisproducenmelanina,unpigmentoprotectorqueabsorbe
la dañina radiación ultravioleta del sol, para preservar a los querati-
nocitos que se encuentran en rápida división y conforman la mayor
parte de la capa epidérmica de la piel. La estructura de la capa
epidérmica de la piel y sus secreciones también protegen el
cuerpo de una pérdida o ganancia excesiva de agua. La
granreddevasossanguíneosylasnumerosasglándu-
las sudoríparas forman un sistema de enfriamiento
por evaporación que ayudan al cuerpo a resguar-
darse del sobrecalentamiento en condiciones de
calor o durante el ejercicio físico. Además, la im-
penetrablepielyalgunasdesuscélulasespecializa-
das forman la primera línea de defensa contra la
invasiónbacteriana.
Éstos son algunos de los cometidos del tegu-
mento común. Otras importantes funciones son las
siguientes: es la mayor superficie de percepción sen-
sorialpararecibiraferenciasoestímulosdelentorno,es
una superficie excretora que ayuda al cuerpo a la elimi-
nación de restos metabólicos, desempeña un papel funda-
mentalenelalmacenamientoenergéticoyelmetabolismo,consti-
tuyeunimportantesitioparalaproduccióndevitaminaDyvarios
factores de crecimiento y participa en la comunicación socio-
sexual y la identificación. Este capítulo describirá las característi-
cas estructurales del tegumento común que refleja esta gran va-
riedaddeimportantesfunciones.
Tegumento común
3
17

18
18
pas anatómicas: la piel y la capa de tejido subcutáneo o hipodermis. El cadáver y las imágenes histológicas de esta página y la con-
traria ilustran estas dos capas anatómicas. En la piel, formada por la epidermis en la superficie y la dermis en profundidad, se combinan
estructuralmente los tejidos epitelial y conectivo para formar el órgano que cubre el cuerpo. La piel es un órgano que produce pelo,
varias glándulas, las uñas de los dedos, y es responsable de la mayor parte de las funciones del tegumento común. La hipodermis es
una capa de composición variable y puede estar formada por grasa, tejido conectivo fibroso, tejido conectivo laxo y músculo liso.
El tegumento común
está formado por dos
grandes partes o ca-
Subdivisiones del tegumento común

19
1 Epidermis
2 Dermis
3 Hipodermis
4 Fascia
5 Periostio
6 Hueso compacto de la tibia
7 Peroné
8 Cavidad medular
9 Membrana interósea
10 Tendón
11 Músculo
12 Epitelio escamoso estratificado
13 Tejido conectivo denso irregular
14 Tejido adiposo
15 Ligamento cutáneo
16 Conductos excretores
de una glándula sudorípara
Disección por capas de una pierna en la que se muestran
las capas del tegumento común
Vista anterolateral
Tegumento común
Corte del tegumento común, 100×

20
humana. Su grosor puede variar de 0,10 mm en los párpados a 1,5 mm en las palmas de las manos y las plan-
tas de los pies. Los queratinocitos son las principales células de la epidermis. Éstas proliferan desde el estrato
basal y se van diferenciando a medida que ascienden hacia la super cie, donde, nalmente, se forman las cé-
fi fi
lulas muertas llenas de la proteína También están presentes en la capa basal los melanocitos, pro-
queratina.
ductores de un pigmento marrón denominado que protege la piel de la radiación ultravioleta del sol.
melanina,
La epidermis, un tejido epitelial escamoso estrati cado, es la capa
fi
superficial de la piel. Esta capa celular y sus derivados —pelos,
uñas y glándulas— es la parte más identi cable de la anatomía
fi
Piel: epidermis
Epidermis del tegumento común
100×
Epidermis de la piel de un negro
Corte de piel fina, 200×
Epidermis de la piel de un caucásico
Epidermis de la piel de un caucásico
Corte de piel gruesa palmar, 200×
1 Estrato basal
2 Estrato espinoso
3 Estrato granuloso
4 Estrato lúcido
5 Estrato córneo
6 Tejido cojuntivo de la dermis
1
1
1
2
2
2
3
3
3
4
5
5
5
6
6
6
1
1
1
2
2
2
3
3
3
4
5
5
5
6
6
6

21
fase entre la dermis y la epidermis forma un entramado complejo y de encaje recíproco entre las dos capas. Las
zonas de encaje dérmico se denominan papilas dérmicas. Esta disposición tiene múltiples funciones. Asegura
que las dos capas estén fuertemente unidas, incrementa el área de superficie para mejorar el aporte sanguíneo
a la epidermis avascular e incrementa la superficie de contacto para los receptores sensoriales. En las palmas
y plantas, la disposición de las papilas dérmicas crean las crestas de fricción denominadas huellas dactilares.
El tejido conectivo de la dermis se sitúa en profundidad respecto a la epi-
dermis, con la que formará una resistente capa de la piel. La zona inter-
Piel: dermis
Crestas de fricción (huellas dactilares) del dedo índice derecho
Vista anterior
Tejido conjuntivo denso del estrato reticular
Tejido conjuntivo laxo del estrato papilar
1 Epidermis
2 Tejido conectivo laxo del estrato
papilar
3 Papila dérmica del estrato papilar
4 Tejido conectivo denso
del estrato reticular
5 Vaso sanguíneo en la dermis
6 Glándulas sudoríparas
en la dermis
7 Fibras de conectivo longitudinales
8 Fibras de conectivo transversales
9 Crestas de fricción formadas
por las papilas dérmicas
10 Línea de pliegue de flexión
Dermis del tegumento común
100×
1
2
2
3
3
3 3
5
7
7
7
8
8
6
6
6
5
9
10
4
2
2
1
2
2
3
3
3 3
7
7
7
8
8
6
6
6
5
9
10
4
2
2

22
proceso del desarrollo crea los folículos pilosos, como un saco de la epidermis que se proyecta hacia la dermis y que es el responsable
de producir el pelo. El pelo es un cilindro de queratinocitos muertos que se erige desde los queratinocitos basales del fondo del folículo
piloso. La glándula sebácea también deriva del epitelio epidérmico y vacía su contenido en el folículo piloso, y una pequeña banda de
músculo liso dérmico, el músculo erector del pelo, se adhiere a la base del folículo. Cuando el músculo se acorta produce la «piel de
gallina» en la superficie de la piel y causa la erección del pelo. Las uñas también provienen de invaginaciones que producen el pliegue
ungueal superficial y la raíz. Una placa de tejido fuertemente queratinizado emerge de la raíz de la uña para cubrir las terminaciones
dorsales de los dedos.
Durante el desarrollo embrionario y fetal, las células epiteliales de la epidermis
empujaninternamente(seinvaginan)haciaeltejidoconectivodeladermis.Este
Piel: pelos y uñas
1 Epidermis
2 Dermis
3 Pared folicular
4 Pelo
5 Papila
6 Raíz de la uña
7 Uña
8 Lecho ungueal
9 Lúnula
10 Eponiquio (cutícula)
11 Hiponiquio
12 Glándulas sudoríparas ecrinas
13 Cartílago
14 Hueso
Folículo piloso
Dedo de un niño
Corte longitudinal, 50×
Bulbo piloso
Uña de un adulto
Vista dorsal
1
1
2
2
3
3
4
5
5
6
7
8
9
10
10
11
12
13
14
11
1
2
1
2
2
3
3
4
5
6
7
8
9
10
10
11
12
13
14
11

23
Como los pelos, las glándulas provienen de invaginaciones de la epidermis
hacia la dermis durante la vida embrionaria y fetal. Las tres glándulas más
importantes de la piel son la sebácea, la sudorípara ecrina y la sudorípara
apocrina. Las glándulas sebácea y sudorípara apocrina, generalmente, ex-
cretan su contenido en el folículo piloso, mientras que la glándula sudorípara
ecrina lo hace en la super cie de la epidermis.
fi
Piel: glándulas
1 Células secretoras sebáceas
2 Célula secretora ecrina
3 Célula del conducto ecrino
4 Célula secretora apocrina
5 Pelo
6 Folículo piloso
7 Músculo erector del pelo
Glándula sebácea
Glándula sudorípara ecrina
Glándula sudorípara apocrina
6
5
7
1
1
1
1
2
3
4
6
5
7
1
1
1
1
2
3
4

24
Esta capa es el principal lugar de almacenamiento de grasa del cuerpo. Además, entre sus funciones, está
la de capa aislante y lugar de distribución de los principales conductos de drenaje venoso del tegumento
cumún y de los nervios cutáneos que inervan la piel.
La capa subcutánea, también llamada es
hipodermis,
una capa de grosor variable que va desde la na capa de
fi
tejido conectivo laxo hasta la gruesa capa fibroadiposa.
Capa subcutánea
Capa subcutánea
del tegumento común
100×
Tejido adiposo subcutáneo (izquierda), célula adiposa (aumento)
Corte de la capa subcutánea, 200× y 640×
Venas super ciales y nervios cutáneos en la capa subcutánea
Disección por capas del tegumento común del antebrazo, vista anterior
1 Epidermis de la piel
2 Capa subcutánea
3 Fascia
4 Venas superficiales
5 Nervio cutáneo
6 Tendón
7 Músculo
8 Ligamento cutáneo
9 Membrana de una célula adiposa
10 Núcleo de una célula adiposa
11 Vacuola de almacenamiento de grasa
de la célula adiposa
12 Vaso sanguíneo
1
2
2
3
3
4
4
5
6
7
8
8
8
9
9
10
11
12
1
2
2
3
3
4
4
5
6
7
9
9
10
12

El sistema esquelético constituye la estructura in-
terna para los tejidos blandos del cuerpo. No es una estructura estática, sino un anda-
miaje interno altamente dinámico. Por un lado, debido a su diseño articulado, muestra
una extrema flexibilidad y movimiento cuando actúan sobre él los músculos. Por
otro lado, las células de tejido esquelético están constantemente controlando y
modificando la microestructura de este increíble tejido denominado hueso,
proporcionándole máxima fuerza, dureza y resistencia. Además de este
papel de soporte, también realiza un papel protector de diversos órganos
del cuerpo. Esta estructura dinámica muestra, asimismo, una grandísima
capacidad de crecimiento y reparación. Es un almacén de iones de calcio,
que desempeñan un papel importante en diversas funciones corporales.
El esqueleto consta de 206 huesos separados, sin tener en cuenta
diversos huesos sesamoideos y el hecho de que algunos huesos represen-
tan la fusión de múltiples huesos. El tamaño de estos huesos varía desde
los pocos milímetros que miden los huesecillos del oído hasta los más de
50 centímetros que puede medir el gran fémur. El esqueleto puede dividirse
en dos partes: el esqueleto axial y el apendicular. El esqueleto axial comprende el
cráneo, la columna vertebral, las costillas y el esternón. El esqueleto apendicular está
formado por los huesos de los miembros y sus cinturas. Los huesos individuales del
esqueleto pueden presentar diversas formas. Algunos son largos y tubulares, otros po-
seen alas extendidas parecidas a una mariposa. Los huesos se pueden agrupar en cuatro
categorías según su forma. Aunque no es demasiado relevante, las cuatro categorías
agrupan los huesos descriptivamente; así, se pueden agrupar en: huesos lar-
gos, huesos cortos, huesos planos y huesos irregulares. Los huesos largos
son los únicos provistos de una diáfisis o tallo con una cavidad medular.
Los otros tipos de hueso carecen de esta región tubular hueca. Los hue-
sos cortos, planos e irregulares comparten la peculiaridad de presentar
láminas externas de hueso compacto que rodean centros internos de
hueso esponjoso. En general, los huesos largos y cortos se localizan en
el esqueleto apendicular, mientras que los huesos planos e irregulares
se encuentran en el esqueleto axial. En manos adecuadas, el esqueleto
puede ser una biblioteca de información. Posee marcas, forámenes, pun-
tos de referencia y canales que pueden contar cada uno una historia sobre
los tejidos blandos del cuerpo. Tener una base sólida sobre la anatomía del
esqueleto es un punto de partida importante para comprender la anatomía.
Este capítulo está dedicado al tejido óseo y la estructura general de los huesos y
el esqueleto. En los dos capítulos siguientes, podrá explorar las dos subdivisiones del
esqueleto: el esqueleto axial y el apendicular.
Sistema esquelético
4
25

26
posee diversos haces de tejido óseo conectados entre sí mediante una compleja distribución que delimita los espacios patentes
del tejido. A simple vista, confiere al hueso una apariencia esponjosa. La médula ósea ocupa los espacios del hueso trabecular.
El segundo tipo de tejido óseo, el hueso compacto, es muy denso y sólido a simple vista. El hueso compacto forma la superficie
externa de todos los huesos y su espesor varía desde el grosor de un papel hasta varios centímetros. El análisis microscópico
de este hueso denso revela que existen numerosos espacios microscópicos que contienen células y vasos sanguíneos en unas
estructuras circulares denominadas osteonas.
El tejido óseo tiene dos configuraciones generales: hueso trabecular o esponjoso y hueso
compacto. El hueso trabecular es un hueso interno que siempre se ubica en un plano pro-
fundo respecto al más denso hueso compacto. Como su nombre indica, el hueso trabecular
Tejido óseo
1 Hueso trabecular
2 Hueso compacto
3 Trabécula
4 Médula ósea
5 Osteona
6 Conducto central
7 Laguna
8 Canalículo
9 Laminilla
10 Núcleo de un osteocito
Húmero seccionado
Vista anterior, corte frontal de la mitad proximal
Hueso compacto y detalle de una osteona
Corte transversal, 100× y 400×
Hueso trabecular
Corte frontal
Hueso trabecular
200x
1
2
3
3
3
5
7
7
7
8
10
3
3
3 3
3
4
5
6
7
7
7
9
8
10

27
conectivo mesenquimatoso (osi cación intramembranosa). En la osi cación endocondral, el cartílago de crecimiento per-
fi fi
manece entre los centros de desarrollo óseo para poder crecer en longitud y tamaño. Durante la vida de una persona joven,
las placas de crecimiento son evidentes en una radiografía y constituyen un claro indicio de que el individuo sigue creciendo.
El tejido óseo se forma durante el desarrollo por sus-
titución de precursores de tejido cartilaginoso (osifi-
cación endocrondral) o por desarrollo desde tejido
Cartílago de crecimiento
1 Diáfisis radial
2 Epífisis radial
3 Diáfisis cubital
4 Epífisis cubital
5 Placa de crecimiento
6 Huesos del carpo
7 Huesos metacarpianos
8 Hueso diafisario en desarrollo
9 Zona de cartílago calcificado
10 Zona de cartílago hipertrofiado
11 Zona de cartílago proliferativo
12 Zona de cartílago en reposo
Radiografía de la región de la muñeca de un niño
Vista posterior
Placa de crecimiento
200×
1
2
3
4
7
7
7
7
8
9
10
11
12
5
5
6

28
anatomistas de nen cuatro categorías generales de huesos en función de su tamaño y forma. Los huesos largos, como su
fi
nombre indica, son más largos en una dimensión que en las otras dos. Su tamaño puede variar desde el de las pequeñas
falanges de los dedos hasta el de los largos huesos proximales del esqueleto de las extremidades como el húmero y el
fémur. Contrariamente, los huesos cortos son pequeños, a modo de cubo. Al igual que sucede con los huesos largos, los
huesos cortos se encuentran en los esqueletos de los miembros, formando parte de los huesos de la muñeca y del tobillo.
Los huesos planos son aplanados y son comunes en el cráneo. La categoría nal, los huesos irregulares, está integrada
fi
por un grupo de huesos de formas y localizaciones diversas.
Los huesos del esqueleto presentan diversos tamaños y formas. La forma
de cada hueso resulta de su posición y papel funcional en el sistema es-
quelético. En un esfuerzo por clasi car los diferentes huesos del cuerpo, los
fi
Tipos de huesos
Huesos planos
Huesos largos
Huesos irregulares Huesos cortos

29
una gruesa capa de hueso. El tejido óseo trabecular ocupa el cuerpo del hueso por debajo del hueso compacto. Las áreas
de hueso compacto cubiertas por cartílago articular forman las super cies lisas de hueso compacto subcondral. Estas su-
fi
perficies de hueso subcondral marcan las superficies articulares de los huesos. Las fotografías inferiores ilustran las partes
y características básicas de un hueso largo.
Todos los huesos comparten unas características básicas. El teji-
do óseo compacto constituye toda la super cie externa visible del
fi
hueso y puede variar de una cubierta delgada como el papel a
Anatomía del hueso
1 Epífisis
2 Diáfisis
3 Metáfisis
4 Hueso compacto
5 Hueso subcondral
6 Hueso trabecular
7 Cavidad medular
8 Línea epifisaria
Fémur
Vista anterior
Fémur
Corte frontal
Extremo proximal del fémur
Corte frontal
Extremo distal del fémur
Corte frontal
1
3
3
1
1
1
1
3
1
2
2
6
4
8
6
3
1
4
7
8
2
5
5
4

30
huesos maduran hasta alcanzar sus formas adultas. Este proceso de desarrollo combina más de 500 centros de formación
ósea que originarán nalmente los 206 huesos del esqueleto. En esta página, la página opuesta y la siguiente, se muestran
fi
los cambios que experimenta el esqueleto desde el período neonatal hasta la edad adulta.
Los elementos del esqueleto son por primera vez evidentes durante el segundo mes de la
vida embrionaria, cuando aparecen el tejido conectivo y los precursores cartilaginosos de los
huesos. Lentamente, a lo largo de la vida fetal, la infancia, la pubertad y la adolescencia, los
Esqueleto
1 Huesos craneales
2 Columna vertebral
3 Costillas
4 Clavícula
5 Escápula
6 Húmero
7 Cúbito
8 Radio
9 Carpianos
10 Metacarpianos
11 Falanges
12 Coxal
13 Fémur
14 Rótula
15 Tibia
16 Peroné
17 Tarsianos
18 Metatarsianos
Esqueleto de un recién nacido
Vista posterior
Vista anterior
16
16
2
2
3
5
6
7
8
17
12
13
15
1 1
2
2
3
4
6
7
8
9
10
11
12
13
15
9
10
11
16
16
2
2
3
5
6
7
8
17
12
13
15
1 1
2
2
3
4
6
7
8
9
10
11
12
13
15
9
10
11

31
Esqueleto adulto
Vista posterior
Esqueleto adulto
Vista anterior
16
10
11
16
11
17
18
17
3
2
4
5
6
7
8
12
13
15
3
3
2
2
4
5
6
7
8
9
12
13
14
15
1
10
11
1
16
10
11
16
11
17
18
17
3
2
4
5
6
7
8
12
13
15
3
3
2
2
4
5
6
7
8
9
12
13
14
15
1
10
11
9
1

32
Vista lateral
1 Huesos craneales
2 Columna vertebral
3 Costillas
4 Clavícula
5 Escápula
6 Húmero
7 Cúbito
8 Radio
9 Carpianos
10 Metacarpianos
11 Falanges
12 Coxal
13 Fémur
14 Rótula
15 Tibia
16 Peroné
17 Tarsianos
18 Metatarsianos
Esqueleto adulto
Vista lateral
1
1
2
2
3
3
4
4
5
5
6
6 7
7
8
8
9
10
11
11
12
12
13
13
14
15
15
16
16
1
1
2
2
3
3
4
4
5
5
6
6 7
7
8
8
9
10
11
11
12
12
13
13
14
15
15
16
16
17
18

El esqueleto
axial, integrado por el cráneo, la columna verte-
bral, las costillas y el esternón, constituye el eje
central del cuerpo. Este robusto pilar central es la
parte más primitiva de sistema esquelético de los
vertebrados. Evolucionó como el esqueleto inicial
de los primeros animales vertebrados, al que se
añadieron los huesos de las extremidades (tema del
próximo capítulo) en una etapa mucho más tardía.
La mayor parte de los elementos óseos del esqueleto
axial, desde los huesos de la base del cráneo hasta las
vértebras y costillas, se forman a partir de una serie de
homólogos originados de los somitas embrionarios
segmentarios. Debido a este desarrollo similar com-
partido, cada segmento corporal, desde la base del crá-
neo hasta el extremo del cóccix, tiene el mismo diseño
esquelético básico. Esto es claramente evidente en la
estructura de las vértebras y costillas. Cuando se
estudien estos elementos en las fotografías de
este capítulo, adviértanse estas similitudes.
Los elementos del esqueleto axial reali-
zan varias funciones en el cuerpo. El esquele-
to del cráneo y la columna vertebral consti-
tuyen un fuerte armazón protector alrededor
del sistema nervioso central. Además, el crá-
neo fija importantes estructuras nerviosas,
como el oído interno y el ojo, que no podrían
funcionar correctamente en entornos inesta-
bles. El cráneo también desempeña un impor-
tante papel en la adquisición y procesamiento de la
comida, gases respiratorios y aferencias sensoriales
como el sonido. Además, para proteger la médula espinal,
las vértebras forman una fuerte y flexible barra. Esta fuerte
y flexible columna no sólo constituye el eje de soporte cen-
tral del cuerpo de donde suspenden las extremidades, sino
que también es capaz de efectuar una serie de movimientos
articulares que son esenciales para desarrollar sus funciones.
5 Esqueleto axial
33

34
1 Cráneo
2 Hueso hioides
3 Columna vertebral cervical
4 1ª vértebra cervical: atlas
5 2ª vértebra cervical: axis
6 7ª vértebra cervical
7 Columna vertebral torácica
8 1ª vértebra torácica
9 12ª vértebra torácica
10 Columba vertebral lumbar
11 1ª vértebra lumbar
12 5ª vértebra lumbar
13 Sacro
14 Esternón
15 Costillas
Esqueleto axial
Vista anterior
Elesqueletoaxialestáclaramenterepresentadoenlasfotografías
inferiores. Nótese que esta porción del esqueleto está constituida
por tres regiones principales: el cráneo, la columna vertebral y la
Esqueleto axial
caja torácica. Hay 29 huesos craneales, 26 huesos vertebrales y 25 huesos en la caja torácica. En las siguientes
páginas, se explorará cada una de las regiones del esqueleto axial y sus respectivos huesos con mayor detalle.
1
2
6
9
11
12
13
14
15
15

35
Esqueleto axial
Vista lateral
Esqueleto axial
Vista posterior
2
1 1
4
4
5 5
3
6
6
7
8
8
9
9
10
11 11
12
12
13
13
2
3
7
10

36
1 Hueso frontal
2 Hueso parietal
3 Hueso occipital
4 Hueso esfenoides
5 Hueso temporal
6 Hueso etmoides
7 Cornete nasal inferior
8 Hueso lagrimal
9 Hueso nasal
10 Vómer
11 Maxilar
12 Hueso palatino
13 Hueso cigomático
14 Mandíbula
15 Cavidad nasal ósea
16 Apertura piriforme
17 Meato nasal inferior
18 Meato nasal medio
19 Órbita
Cráneo
Vista anterior
tes funciones importantes, entre las que incluyen, la de proteger el delicado tejido del encéfalo, jar el aparato
fi
vestibular del oído interno en el espacio tridimentional, mantener abiertas las vías aéreas para la respiración y
adquirir y procesar alimentos, por nombrar algunas. Existen dos subdiviones principales del cráneo: el neurocrá-
neo viscerocráneo
es la región que rodea y encierra el encéfalo, y el o esqueleto facial, que es el área que
conforma las órbitas y las cavidades nasal y bucal. Esta página, la opuesta y los cuatro pliegos siguientes des-
criben las cinco normas, o vistas, del cráneo tanto en imágenes articuladas como desarticuladas. Los huesos
del cráneo están señalados en estas vistas, junto con las principales referencias que sólo han sido señaladas
en el cráneo articulado. Los puntos de referencia de cada hueso se señalan en las imágenes individuales de los
huesos del cráneo en las páginas que siguen. Este pliego muestra la norma facial o vista facial del cráneo.
El cráneo es el esqueleto compuesto de la cabeza y está formado por 29 huesos. Los
huesos del cráneo varían desde simples láminas óseas sin peculiaridades destacables
hasta otros huesos más intrincados del esqueleto. Los huesos craneales poseen diferen-
Cráneo
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2
4
5
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6
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8
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37
Huesos del cráneo desarticulados
Vista anterior
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38
1 Hueso frontal
2 Hueso parietal
3 Hueso occipital
4 Hueso esfenoides
5 Hueso temporal
6 Hueso etmoides
7 Hueso lagrimal
8 Hueso nasal
9 Maxilar
11 Mandíbula
12 Arco cigomático
13 Fosa pterigopalatina
Cráneo
Cráneo
Vista lateral
En este pliego, se muestra la norma lateral, o cara lateral del cráneo. En esta vista, son claramente
apreciables el neurocráneo y el esqueleto facial, así como las proporciones de estas dos regiones
craneales. En la vista desarticulada, sólo se han mostrado aquellos huesos que son visibles late-
ralmente.
1
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Vista lateral
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Cráneo
1 Hueso parietal
2 Hueso occipital
3 Hueso esfenoides
4 Hueso temporal
5 Hueso etmoides
7 Vómer
8 Maxilar
9 Hueso palatino
11 Mandíbula
12 Coana u orificio nasal posterior
13 Fisura orbitaria inferior
14 Cavidad nasal ósea
15 Meato nasal medio
17 Paladar duro
18 Hueso wormiano
Cráneo
Vista posterior
Este pliego muestra la norma occipital, o cara occipital del cráneo. Desde esta vista posterior, son
claramente apreciables las super cies de los huesos de las cavidades nasal y bucal. En la vista de-
fi
sarticulada, sólo se muestran aquellos huesos visibles desde la vista occipital del cráneo.
1
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Vista posterior
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Cráneo
1 Hueso frontal
2 Hueso parietal
3 Hueso occipital
4 Hueso temporal
5 Hueso nasal
6 Maxilar
7 Hueso cigomático
Cráneo
Vista superior
Este pliego muestra la norma superior, o cara superior del cráneo. En esta vista, se puede obser-
var claramente en neurocráneo, mientras el esqueleto facial queda prácticamente. En el esquele-
to desarticulado, sólo se presentan aquellos huesos que son visibles desde la vista superior del
cráneo.
1
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Vista superior
1
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Cráneo
1 Hueso occipital
2 Hueso esfenoides
3 Hueso temporal
4 Vómer
5 Maxilar
6 Hueso palatino
7 Hueso cigomático
8 Paladar duro
9 Coana u orificio nasal posterior
10 Arco cigomático
11 Foramen yugular
12 Foramen lacerum
13 Foramen palatino mayor
14 Fosa incisiva
Cráneo
Vista inferior
Estas dos páginas muestran la norma inferior (basal), o cara inferior del cráneo. Se ha retirado la
mandíbula para enseñar más claramente la base del cráneo. En esta vista, se observan claramente
el suelo del neurocráneo, el paladar duro, que forma el techo de la cavidad bucal, y la hilera de dien-
tes del maxilar. En la vista desarticulada, sólo se muestran aquellos huesos que son visibles desde
una vista inferior del cráneo.
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Vista inferior
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46
Cráneo
Corte parasagital del cráneo
Vista medial del lado derecho
Estas dos páginas muestran el cráneo seccionado por el plano parasagital que atraviesa la cara
derecha de la cavidad nasal, justo lateral al tabique nasal óseo. En el corte de esta página, se mues-
tra la pared lateral de la cavidad nasal derecha, y el corte de la página opuesta muestra la pared
medial (septal) de dicha cavidad nasal. En estos cortes, se pueden ver todos los senos óseos que se
comunican con la cavidad nasal.
1
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20
19
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20

47
1 Hueso frontal
2 Hueso parietal
3 Hueso occipital
4 Hueso esfenoides
5 Hueso temporal
6 Hueso etmoides
8 Hueso nasal
9 Vómer
10 Maxilar
11 Hueso palatino
12 Mandíbula
19 Celdillas (senos) aéreas etmoidales
20 Seno maxilar
21 Canal incisivo
22 Tabique nasal óseo
23 Foramen esfenopalatino
Corte parasagital del cráneo
Vista medial del lado izquierdo
13 Tabla externa de la calvaria
14 Díploe
15 Tabla interna de la calvaria
16 Surco del seno sigmoideo
17 Seno esfenoidal
18 Seno frontal
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14

48
Cráneo
Cráneo con la calvaria retirada
Vista superior o interna de la base del cráneo
Estas dos páginas muestran el cráneo seccionado por el plano horizontal a través del neurocráneo,
revelando las estructuras internas del suelo y techo a través de la cavidad craneal seccionada. En
esta página, es visible el suelo del neurocráneo, mientras que en la opuesta se ve el techo. La por-
ción superior del cráneo, mostrada en la página opuesta, se denomina calvaria.
1
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49
1 Hueso frontal
2 Hueso parietal
3 Hueso occipital
4 Hueso esfenoides
5 Hueso temporal
6 Hueso etmoides
7 Clivus
8 Foramen ciego
9 Foramen lacerum
10 Foramen yugular
11 Fisura petroesfenoidal
12 Fisura petrooccipital
13 Fosa craneal anterior
14 Fosa craneal media
15 Fosa craneal posterior
16 Fositas granulares
Calvaria retirada
Vista inferior o interna
1
2
16
3

50
Huesos del cráneo: frontal
1 Porción escamosa
2 Tuberosidad frontal
3 Glabela
4 Arco superciliar
5 Escotadura o foramen supraorbitario
6 Escotadura o foramen frontal
7 Superficie temporal
8 Apófisis cigomática
9 Cresta frontal
10 Surco para el seno sagital superior
11 Espina nasal
12 Superficie orbitaria
13 Espina troclear
14 Fosa lagrimal
15 Escotadura etmoidal
16 Seno frontal
Hueso frontal
Vista posterior
Hueso frontal
Vista anterior
dos partes: una vertical y cóncava internamente, denominada y una lámina horizontal que
escama,
forma la pared superior de las órbitas. El hueso tiene una lisa super cie externa, mientras que, en la
fi
interna, presenta impresiones producidas por los vasos meníngeos y forámenes dispersos que con-
ducen los vasos diploicos. La porción escamosa es gruesa; está formada por unas tablas, interna y
externa, que delimitan una capa de hueso trabecular denominado Cerca de la línea media
díploe.
anteroinferior, el hueso esponjoso está ausente entre las dos tablas, interna y externa, y en su lugar,
hay espacios de varios tamaños: los senos frontales. La lámina orbitaria está compuesta por una fina
lámina de hueso compacto, que, en ocasiones, es tan na que, incluso, es transparente. El hueso
fi
frontal se articula con 12 huesos.
El hueso frontal, impar, de
forma parecida a un cuen-
co, está constituido por
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51
Hueso frontal
Vista superior, anterior abajo
Hueso frontal
Vista lateral, anterior a la izquierda
Hueso frontal
Vista inferior, anterior arriba
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3

52
mayor parte del techo y los lados del cráneo. La super cie externa de cada hueso parietal es ligera-
fi
mente convexa, mientras que la interna es cóncava y está marcada por impresiones de los vasos
meníngeos. El borde inferior forma una super cie articular biselada, mientras que los bordes superior,
fi
anterior y posterior presentan super cies articulares profundamente dentadas. El hueso está constituido
fi
por una tabla interna y otra externa de hueso compacto que delimitan una capa de hueso trabecular, el
díploe. Cada hueso parietal se articula con cinco huesos.
Los huesos parietales son
grandes huesos cuadri-
láteros que constituyen la
Huesos del cráneo: parietal
1 Surco para el seno sigmoideo
3 Surco para la arteria meníngea media
4 Línea temporal superior
5 Línea temporal inferior
6 Tuberosidad parietal
7 Borde escamoso
8 Borde occipital
9 Borde frontal
10 Borde sagital
11 Ángulo frontal
12 Ángulo occipital
13 Ángulo esfenoidal
14 Ángulo mastoideo
15 Foramen parietal
Hueso parietal izquierdo
Vista medial, anterior a la derecha
Vista lateral, anterior a la derecha
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Vista anterior
Vista posterior
Vista inferior, anterior a la derecha
Vista superior, anterior a la izquierda
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6

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desde atrás, tiene una forma entre oval y redonda. El hueso posee cuatro regiones distintas. La porción
escamosa es la lámina posterosuperior de concavidad interna y que forma la mayor parte del hueso. La
gruesa porción basioccipital, o basilar, contribuye a la base del cráneo por delante del foramen magno.
Lateral a ésta y convergiendo con la escama, hay dos porciones condilares o exooccipitales. Juntas, las
cuatro porciones del occipital, forman los bordes de la gran abertura circular, el foramen magno, que es
el lugar de paso de la médula espinal desde la bóveda craneal al conducto vertebral. El hueso occipital
se articula con seis huesos.
El hueso occipital forma
la mayor parte del cráneo
posterior e inferior. Visto
Huesos del cráneo: occipital
1 Foramen magno
2 Clivus
3 Tubérculo faríngeo
4 Porción escamosa
5 Borde mastoideo
6 Borde lambdoideo
7 Cóndilo occipital
8 Conducto condíleo
9 Conducto del nervio hipogloso
10 Fosa condilar
11 Tubérculo yugular
12 Escotadura yugular
13 Apófisis yugular
14 Protuberancia occipital externa
15 Línea nucal superior
16 Línea nucal inferior
17 Protuberancia occipital interna
18 Surco para el seno transverso
19 Surco para el seno occipital
21 Fosa cerebral
22 Fosa cerebelosa
Hueso occipital
Vista posterior
Hueso occipital
Vista anterior
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Hueso occipital
Vista inferior, anterior abajo
Hueso occipital
Hueso occipital
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56
tintas. La porción escamosa del hueso es la fina lámina lateral que contribuye a la pared lateral del cráneo.
Ésta se proyecta anteriormente como la apófisis cigomática y forma la fosa mandibular para la articulación
temporomandibular. La porción estiloidea está representada por la apófisis estiloides. Esta proyección del
hueso proviene de los elementos superiores del segundo arco faríngeo. La porción petrosa forma la grue-
sa base piramidal del hueso. Se origina posterior al conducto auditivo externo como apófisis mastoides y
finaliza formando una articulación con la porción basilar del occipital y el ala mayor del esfenoides. La de-
nominación describe su apariencia semejante a la de una roca. Es la parte más gruesa del hueso
petrosa
temporal. Se origina de las cápsulas óticas que estabilizan las delicadas estructuras del oído interno. La
mastoides es la protuberancia posterolateral de la porción petrosa, que es fácilmente palpable justo por
detrás de la oreja. La porción timpánica del hueso temporal tiene forma de anillo y constituye las paredes
del conducto auditivo externo. Cada hueso temporal se articula con cinco huesos.
El hueso temporal es
un hueso complejo
con cinco partes dis-
Huesos del cráneo: temporal
Hueso temporal izquierdo
1 Porción petrosa
2 Apófisis mastoides
3 Escotadura mastoidea
4 Surco para el seno sigmoideo
5 Conducto carotídeo
6 Vértice de la porción pretrosa
7 Conducto musculotubárico
8 Techo del tímpano
9 Hiato para el nervio petroso mayor
10 Hiato para el nervio petroso menor
11 Impresión trigeminal
12 Conducto auditivo interno
13 Conductillo mastoideo
14 Conductillo timpánico
15 Apófisis estiloides (rota)
16 Foramen estilomastoideo
17 Escotadura yugular
18 Anillo timpánico
19 Conducto auditivo externo
20 Espina timpánica mayor
21 Espina timpánica menor
22 Porción escamosa
23 Apófisis zigomática
24 Fosa mandibular
25 Tubérculo articular
26 Fisura pretrotimpánica
27 Fisura timpanomastoidea
1
2
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5
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57
Vista superior, anterior arriba
Vista posterior
Vista anterior
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18
23
24
25
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23

58
ne la apariencia de unas alas desplegadas de mariposa. Como su nombre sugiere, se sitúa como una
cuña en el centro del cráneo donde se articula con doce huesos vecinos y contribuye de manera impor-
tante a formar la base del cráneo. Se puede dividir en cuatro componentes principales: el cuerpo, alas
mayores, alas menores y apófisis pterigoides. Cuando se extrae la calvaria, este hueso puede observarse
desde cualquier vista. Desempeña un papel importante en la base del cráneo. Soporta el cerebro, sirve
como protección de los tallos y cápsulas ópticos, proporciona zonas de paso para diversos vasos y
nervios que entran y salen del cráneo, y forma una cavidad sinusal que se comunica con la cavidad nasal.
El hueso esfenoi-
des es un hueso
complejo que tie-
Huesos del cráneo: esfenoides
1 Yugo
2 Silla turca
3 Tubérculo de la silla
4 Fosa hipofisaria
5 Dorso de la silla
6 Apófisis clinoides posterior
7 Apófisis clinoides media
8 Surco carotídeo
9 Cresta esfenoidal
10 Pico esfenoidal
11 Seno esfenoidal
12 Cornete esfenoidal
13 Ala menor
14 Conducto óptico
15 Apófisis clinoides anterior
16 Fisura orbitaria superior
17 Ala mayor
18 Cresta infratemporal
20 Foramen redondo mayor
21 Foramen oval
22 Foramen espinoso
23 Espina del hueso esfenoides
24 Lámina externa de la apófisis pterigoides
25 Lámina interna de la apófisis pterigoides
26 Escotadura pterigoidea
27 Fosa pterigoidea
28 Fosa escafoidea
29 Apófisis vaginal
30 Gancho pterigoideo
31 Conducto pterigoideo
Hueso esfenoides
Vista anterior
Hueso esfenoides
Vista posterior
6
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Hueso esfenoides
Hueso esfenoides
Hueso esfenoides
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5 6
23
23
23

60
para formar la quijada superior. También contribuye a formar las paredes de la cavidad nasal, la órbita,
la cavidad bucal y el seno maxilar. El seno maxilar es la cavidad hueca central del gran cuerpo del
maxilar. Desde este cuerpo, se proyectan cuatro apó sis de características morfoló cas diversas: la
fi fi
apófisis cigomática posterolateral, la apófi fi
sis palatina que se proyecta en un plano medial, la apó sis
arqueada inferior denominada alveolar y la apó sis frontal que se proyecta superiormente. Cada maxi-
fi
lar se articula con nueve huesos.
Huesos del cráneo: maxilar
2 Surco infraorbitario
3 Foramen infraorbitario
4 Espina nasal inferior
5 Fosa canina
6 Tuberosidad del maxilar
7 Surco lagrimal
8 Seno maxilar
9 Surco palatino mayor
10 Apófisis frontal
11 Apófisis cigomática
12 Apófisis palatina
13 Conducto incisivo
14 Apófisis alveolar
15 Tabique interalveolar
Maxilar izquierdo
Vista anterior
Maxilar izquierdo
Vista posterior
El maxilar es un hueso
par de gran tamaño que
se une con su homólogo
3
4
5
10
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6
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61
Maxilar izquierdo
Maxilar izquierdo
Maxilar izquierdo
Maxilar izquierdo
1
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5
6
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15
11
12
13
14
15
7

62
les, forma la quijada inferior. Posee un cuerpo arqueado provisto de las apó sis alveolares en las que
fi
se insertan los dientes. Por la cara posterior, cada lado del cuerpo arqueado se une con las ramas
verticales en el ángulo mandibular. Las carillas superiores de ambas ramas se articulan con los huesos
temporales en la base del cráneo. La mandíbula es un robusto hueso compuesto principalmente de
hueso compacto. Alberga la hilera de dientes inferior en su arco alveolar. Los potentes músculos masti-
catorios actúan sobre este hueso para mover la articulación temporomandibular. Su forma puede mo-
dificarse enormemente con la edad. Si se produce la pérdida de dientes, el hueso se reabsorbe en la
superficie alveolar, lo que conduce a una disminución de la arcada dentaria. La mandíbula se articula
con dos huesos.
La mandíbula, el
más grande de
los huesos facia-
Huesos del cráneo: mandíbula
1 Cuerpo de la mandíbula
2 Protuberancia mentoniana
3 Foramen mentoniano
4 Tubérculo mentoniano
5 Línea oblicua
6 Fosa digástrica
7 Espinas mentonianas
8 Línea milohioidea
9 Fosa submandibular
10 Porción alveolar
11 Trígono retromolar
12 Rama de la mandíbula
13 Ángulo de la mandíbula
14 Foramen mandibular
15 Apófisis coronoides
16 Escotadura mandibular
17 Apófisis condilar
18 Cabeza de la mandíbula
19 Fosa pterigoidea
20 Tuberosidad maseterina
21 Tuberosidad pterigoidea
Mandíbula
Vista anterior
Mandíbula
Vista posterior
1
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3
4
5
10
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Mandíbula
Mandíbula
Mandíbula
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1
2
3
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16
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18
20
1
6
8
9
13
14
17
21
7
7
14

64
miz. Galeno denominó así a este hueso por el parecido que guarda con un tamiz, debido a los numerosos
pequeños orificios que transmiten los nervios olfatorios a la cavidad nasal. Este hueso impar es complejo y
delicado y es el hueso central de la cavidad nasal. Situado entre las dos órbitas, está formado por una lámina
vertical en el centro, una lámina horizontal perforada por numerosos pequeños orificios y por cavidades neumáti-
cas y regiones laberínticas a ambos lados. Las regiones laberínticas forman la mayor parte de las paredes inter-
nas de la órbita y los cornetes nasales medio y superior. Este hueso está compuesto por finas láminas de hueso
compacto rodeando diversos pequeños senos aéreos, que se comunican con la cavidad nasal. El hueso etmoi-
des se articula con 13 huesos, de modo que posee más articulaciones que cualquier otro hueso del cráneo.
Huesos del cráneo: etmoides
1 Lámina cribosa
2 Forámenes cribosos
3
4 Lámina perpendicular
5 Celdillas aéreas etmoidales
6 Lámina orbitaria
7 Cornete nasal superior
8 Cornete nasal medio
9 Bulla etmoidal
10 Apófisis unciforme
11 Infundíbulo etmoidal
Hueso etmoides
Vista anterior
Hueso etmoides
Vista posterior
Hueso etmoides
Hueso etmoides
Hueso etmoides
El término pro-
etmoides
viene del término griego
ēthmo, que significa ta-
1
3 3
4
4
5
5
5
6
7
8
8
10
3
6
10
1
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
11
1
10
1
2

65
nominado por Galeno proviene de la palabra griega que signi
cigoma, zygon fica por su parecido al yugo
yugo,
que se coloca sobre los bueyes. Este hueso en forma de yugo tiene tres caras diferentes, cinco bordes y dos
apófisis. Se sitúa en la región anterolateral de la cara constituyendo los pómulos, y contribuye a formar las
paredes lateral e inferior de la órbita. Está integrado por unas láminas interna y externa de hueso compacto
con un núcleo interno de hueso esponjoso. El hueso cigomático se articula con cuatro huesos.
Huesos del cráneo: cigomático
1 Cara orbitaria
2 Cara temporal
3 Cara lateral
4 Apófisis temporal
5 Apófisis frontal
6 Foramen cigomaticoorbitario
7 Foramen cigomaticofacial
8 Foramen cigomaticotemporal
Hueso cigomático derecho
Vista anterior
Vista posterior
Vista medial, anterior a la izquierda
El nombre del hue-
so cigomático, ori-
ginariamente de-
4
1
1
3
5
5
4
1
2
3
4
5 5
8
2
3
4
4
5
5
7
8
4
6

66
sitúa profundamente en la región facial posterior donde contribuye a formar el techo de la boca, el suelo
de la órbita, el suelo y las paredes laterales de la cavidad nasal y la fosa pterigopalatina. Posee una fuerte
lámina horizontal con una delicada lámina vertical que se proyecta superiormente. El hueso palatino se
articula con seis huesos.
El hueso palatino es deli-
cado e intrincado y tiene
forma de letra «L». Se
Huesos del cráneo: palatino
1 Lámina perpendicular
2 Escotadura esfenopalatina
3 Surco palatino mayor
4 Apófisis piramidal
5 Apófisis orbitaria
6 Forámenes palatinos menores
7 Espina nasal posterior
8 Cresta del cornete (de la concha)
9 Lámina horizontal
Hueso palatino izquierdo
Vista anterior, lateral a la derecha Hueso palatino izquierdo
Vista posterior,
lateral a la izquierda
1 1
2
2 5
5
3
4 4
7
9
9
5
3
4
4
7
7
9
9
1 1
2 5
5
4
4
9
8
2
2
7
9
9
2
4

67
plana, media, vertical, parecida a una cuchilla, con proyecciones transversas posterosuperiores que
remedan los mangos del arado. Es un hueso pequeño, no e impar situado en el plano medio. Es más
fi
ancho en su base superoposterior y se estrecha hacia su vértice anteroinferior. Forma la porción inferior
de tabique nasal óseo. Sus caras miran lateralmente y conforman la pared medial e inferior de las cavi-
dades nasales. El vómer se articula con seis huesos y un cartílago.
El vómer es un hueso plano,
triangular, que se asemeja a
un arado. Posee una apófisis
Huesos del cráneo: vómer
1 Ala del vómer
2 Surco vomeriano
3 Cresta coanal del vómer
4 Porción cuneiforme
Vómer
Vómer
Vómer
Vómer
Vista anterior
Vómer
Vista posterior
1 1
2
4
1
3
4
1
2
3
1 1
1

68
tituyen el puente de la nariz, donde suelen descansar las gafas. La super cie externa de estos huesos
fi
presta inserción a los músculos prócer y nasal, dos delgados músculos de la expresión facial. Cada
hueso nasal se articula con cuatro huesos.
El par de huesos nasales son
pequeños y rectangulares, con
una sutil forma arqueada. Cons-
Huesos del cráneo: nasal
1 Surco etmoidal
2 Forámenes nasales
3 Borde superior
4 Borde inferior
5 Borde lateral
6 Borde medial
Hueso nasal izquierdo
Vista posterior, lateral a la derecha
Vista anterior, lateral a la izquierda
3 3
3
3
3
4 4
4 4
4
5
5
5
6
6
6
2 1
1
3 3
3
3
3
4 4
4 4
4
5
5
5
6
6
6
2 1
1

69
Hueso pequeño y delicado que se proyecta desde la pared lateral de la cavidad nasal. Se asemeja a una
voluta ya que se arquea en sentido inferior y lateral desde la pared lateral de la cavidad nasal. La super-
ficie medial del hueso es convexa y está surcada por las diferentes hendiduras longitudinales que trans-
portan los vasos sanguíneos bajo la espesa mucosa que recubre esta super cie. La super cie lateral del
fi fi
hueso es cóncava y forma la mayor parte de límite superior y medial del meato nasal inferior. El borde
inferior del hueso es áspero y de apariencia esponjosa. Superiormente, el hueso forma un borde articular
con cuatro huesos.
Huesos del cráneo: cornete nasal inferior
1 Apófisis lagrimal
2 Apófisis maxilar
3 Apófisis etmoidal
4 Superficie lateral
5 Superficie medial
Cornete nasal
inferior izquierdo
Vista posterior,
lateral a la derecha
Cornete nasal
inferior izquierdo
Cornete nasal inferior izquierdo
Vista superior, anterior a la derecha
Vista inferior, anterior a la derecha
3
3
2 2
2
1 1
1
3
4
4
4
4
5 5
5
5
5
3
3
2 2
2
1 1
1
3
4
4
4
4
5 5
5
5
5

70
hueso pequeño, delicado y cuadrilátero tiene un eje vertical ligeramente más largo que el eje horizontal. Es
extremadamente delgado. Si se coloca ante una fuente de luz, ésta atraviesa fácilmente el hueso. El hueso se
sitúa en la parte anterior de la pared medial de la órbita. La superficie orbitaria es lisa y plana en su mitad pos-
terior, donde contribuye a formar la pared medial de la órbita. En la cara anterior tiene un surco longitudinal que
finaliza en la cara posterior en una cresta con forma de gancho dirigida hacia abajo. Este surco mantiene el
conducto nasolagrimal. Cubierta por una membrana mucosa, la superficie medial, ligeramente áspera, del
hueso contribuye a formar la cavidad nasal. El hueso lagrimal se articula con cuatro huesos.
El hueso lagrimal recibe es-
te nombre porque alberga
el conducto lagrimal. Este
Huesos del cráneo: lagrimal
1 Cresta lagrimal posterior
2 Surco lagrimal
3 Gancho lagrimal
Hueso lagrimal izquierdo
Vista anterior, lateral a la derecha
Vista posterior, lateral a la izquierda
Vista superior, lateral a la derecha
Vista inferior, lateral a la izquierda
1
2
1
3
3
3
3
2 2
1
1
3
2

71
Los huesecillos del oído son los huesos más pequeños del esqueleto humano. Estos tres pequeños huesos ocupan la
cavidad del oído medio, donde transmiten y ampli can las ondas sonoras desde la membrana timpánica al oído interno. De
fi
lateral a medial, los huesos son el martillo, el yunque y el estribo, denominados así debido al notable parecido con dichas
estructuras.
Huesos del cráneo: huesecillos del oído
1 Martillo
2 Yunque
3 Estribo
4 Manubrio del martillo
5 Cabeza del martillo
6 Cuello del martillo
7 Apófisis lateral
8 Apófisis anterior
9 Cuerpo de yunque
10 Rama larga
11 Apófisis lenticular
12 Rama corta
13 Cabeza del estribo
14 Rama anterior
15 Rama posterior
16 Base del estribo
Huesecillos del oído en el hueso temporal
Vista anterior, hueso temporal izquierdo
Huesecillos del oído izquierdos
Martillo izquierdo
Yunque izquierdo
Estribo izquierdo
Vista superior, lateral a la izquierda
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
11
12
13
15
14
16
1
2
3
8
11
15
16

72
tos estilohioideos, el hueso hioides en forma de «U» se sitúa en la parte ventrosuperior del cuello, justo
debajo de la mandíbula. Presta inserción esquelética a los músculos asociados a la lengua, laringe y
faringe. Está formado por cinco elementos: un cuerpo y unas astas bilaterales mayores y menores. El
cuerpo es el elemento rectangular ventral situado en el plano transverso. Proyectándose posterolateral-
mente desde el cuerpo, se encuentran el par de astas mayores, largas y esbeltas. En la unión de las
astas mayores con el cuerpo, se hallan unas pequeñas proyecciones superiores: las astas menores.
Suspendido de las apófisis
estiloides de los huesos
temporales por los ligamen-
Huesos del cráneo: hioides
1 Cuerpo
2 Asta menor
3 Asta mayor
Hueso hioides
Vista anterior
Hueso hioides
Hueso hioides
1
1
2
2
3
3
1
2
3

73
dos similares, todas las vértebra presentan una estructura semejante. Los huesos de la columna vertebral se
agrupan en siete vértebras cervicales, doce vértebras torácicas, cinco vértebras lumbares, el sacro —formado
por cinco segmentos fusionados— y el cóccix, que comprende entre tres y cinco segmentos fusionados, gene-
ralmente, cuatro. La columna es el eje central del cuerpo que soporta los miembros y el cráneo, protege la
médula espinal y presta inserción a los músculos que mueven esta exible columna de huesos.
fl
La columna vertebral está formada por 26 huesos deriva-
dos de 33 segmentos corporales embrionarios idénticos.
Debido a que se desarrollan a partir de segmentos repeti-
Columna vertebral
1 Vértebras cervicales
2 Vértebras torácicas
3 Vértebras lumbares
4 Sacro
5 Cóccix
6 Cifosis torácica
7 Cifosis sacra
8 Lordosis cervical
9 Lordosis lumbar
10 Foramen intervertebral
Columna vertebral
Vista anterior
Columna vertebral
Columna vertebral
Vista posterior
1 1 1
2 2 2
3 3 3
4
4
4
5
5 5
6
7
8
9
10
1 1 1
2 2 2
3 3 3
4
5
5
6
7
8
9
10

74
cies articulares poseen una gran amplitud de movimiento. Esto se debe al hecho de que las dos primeras vér-
tebras, atlas y axis, tienen formas que di eren signi cativamente del resto de vértebras de esta serie. Estas
fi fi
diferencias se han producido a medida que han sido modi cadas para proporcionar soporte y movimiento al
fi
cráneo. El resto de vértebras cervicales muestran un menor grado de movilidad y poseen unas formas más
homogéneas. Con pocas excepciones, las vértebras cervicales pueden ser fácilmente distinguibles por la pre-
sencia de un foramen en sus apó sis transversas.
fi
Hay siete vértebras cervicales, que son las vértebras
que presentan una mayor variación estructural. For-
man una delicada columna de huesos cuyas super -
fi
Vértebras cervicales
1 Cuerpo vertebral
2 Pedículo
3 Lámina
4 Escotadura vertebral superior
5 Escotadura vertebral inferior
6 Foramen vertebral
7 Apófisis espinosa
8 Apófisis transversa
9 Apófisis/carilla articular superior
10 Apófisis/carilla articular inferior
11 Foramen transverso
12 Tubérculo anterior de la apófisis costal
13 Tubérculo posterior de la apófisis costal
14 Masa lateral
15 Arco anterior
16 Tubérculo anterior del arco anterior
17 Carilla para el diente del axis
18 Arco posterior
19 Tubérculo posterior para el arco posterior
20 Surco para la arteria vertebral
21 Diente del axis (apófisis odontoides)
22 Carilla articular anterior del diente
Vértebra cervical típica
Vista anterior, superior arriba Vértebra cervical típica
Vista posterior, superior arriba
1
1
1
1
2
3
3
4
5
6
7
7
7
8
8
8
9
9
9
9
10
10 10
11
12
12
12
13
13
13
6
11

75
Atlas, 1ª vértebra cervical
Vista anterior, superior arriba
Axis, 2ª vértebra cervical
1
1
2
3
3
3
4
5
6
6
7
7
7
8
8
8
8
8
8
8
9
9
9
9
9
9
9
10
10
10
10
10
10
10
9
11
11
12
12
16
16
16
13
19
19
13
14
14
15
15
17
18
18
18
20
21
21
22
20
21
12
20
19
22
6
10
11
17

76
el caudal. Excepto en su unión con las vértebras lumbares, la región torácica es la menos móvil de la columna
vertebral. Aparte de articularse entre ellas, las vértebras torácicas también se articulan con las costillas. Además,
las láminas y apó sis espinosas de estas vértebras se proyectan inferiormente y se solapan con la siguiente
fi
vértebra subyacente. Este conjunto de características produce una imbricada columna ósea que forma la im-
presionante caja torácica. Debido a esta asociación con las costillas, las vértebras torácicas pueden ser fácil-
mente identi cables por las carillas articulares costales, presentes en los cuerpos y apó sis transversas.
fi fi
La porción torácica de la columna vertebral está formada
por 12 vértebras torácicas, que van aumentando pro-
gresivamente de tamaño desde el extremo craneal hacia
Vértebras torácicas
1 Cuerpo vertebral
2 Pedículo
3 Lámina
7 Apófisis transversa
10 Fosita costal superior
11 Fosita costal inferior
12 Fosita costal de la apófisis transversa
Vértebra torácica
Vértebra torácica
Vértebra torácica
Vista anterior, superior arriba Vértebra torácica
1
1
1
2
2
2
3
3
5
6
6
6
6
7
7
7
7
8
8
8
8
9
9
10
10
11
12
12
4
5
10
12
4

77
o móviles. Su gran tamaño y la ausencia de forámenes transversos y carillas costales son sus características
identifi fi
cativas. Forman una fuerte columna de soporte en la base de la columna vertebral. Las apó sis articula-
res de las vértebras lumbares son robustas y tienen carillas orientadas en el plano sagital para proporcionar los
característicos movimientos de exión y extensión de la columna vertebral lumbar. Poseen gruesos pedículos
fl
derivados de la cara superior del cuerpo vertebral. Las láminas son robustas y cortas, y se proyectan en sentido
posterior para unirse a la apó sis espinosa, que es gruesa y cuadrilátera. Los cuerpos vertebrales presentan
fi
una marcada forma elíptica cuando se observan desde arriba.
Hay cinco vértebras lumbares que forman la porción
lumbar de la columna vertebral. Las vértebras de esta
región son las más grandes de las vértebras verdaderas
Vértebras lumbares
1 Cuerpo vertebral
2 Pedículo
3 Lámina
7 Apófisis transversa (apófisis costal)
10 Apófisis accesoria (morfológicamente, la apófisis transversa)
11 Apófisis mamilar
Vértebra lumbar
Vértebra lumbar
Vértebra lumbar
Vértebra lumbar
1
1
2
2
3
4
5
6
6
7
7
8 8
9
11
11
3
6
7
8
9
10
11
1
7
8
9
6
4
5
10
6

78
Es cóncavo anteriormente y convexo posteriormente. Los bordes laterales de este triángulo son más amplios
superiormente, donde el hueso se articula con los dos ilíacos. Formando la gran porción basal de la columna
vertebral, el hueso se acuña entre los coxales para formar los elementos posteriores del esqueleto pelviano. Su
cara ventral, más lisa que la rugosa cara dorsal, forma la pared posterior de la pelvis. En su hueca masa ósea
triangular se sitúa el conducto sacro. Este conducto se abre a través de forámenes hacia las caras ventral y
dorsal del hueso. Forma una gran super cie oval superiormente que se articula con la quinta vértebra lumbar y
fi
una pequeña carilla ovalada en su vértice para articularse con el cóccix.
El cóccix es el extremo terminal de la columna vertebral. Es un hueso triangular formado por la fusión
de tres a cinco vértebras, generalmente, cuatro. La cara superior del primer segmento del cuerpo forma una
superficie articular oval que se articula con la super cie inferior del quinto segmento sacro.
fi
El sacro es una gran masa de forma triangular que se forma a partir
de la fusión de cinco segmentos vertebrocostales. La base de este
triángulo es superior y se estrecha y aplana hacia el vértice inferior.
Sacro y cóccix
1 Promontorio
2 Ala
3 Apófisis articular superior
4 Carilla auricular
5 Tuberosidad sacra
6 Cara pelviana
7 Líneas transversales
8 Forámenes sacros anteriores
9 Forámenes sacros posteriores
10 Cresta sacra media
11 Cresta sacra intermedia
12 Cresta sacra lateral
13 Asta del sacro
14 Conducto sacro
15 Hiato sacro
16 Vértice
17 Asta del cóccix
Sacro y cóccix
1
2
4
5
13
10
10
11
12
16
17
17

79
Sacro y cóccix
Sacro y cóccix
1
2
2
3
4
5
6
7
7
7
8
8
9
9
10 11
12
13
13
14
15
16
17
17
2
9
9
13
14
17
17

80
torácicas y facilita la función respiratoria. Aunque sólo las 12 costillas torácicas son denominadas costillas,
en realidad, hay costillas en cada nivel vertebral. Las costillas cervicales, lumbares, sacras y coccígeas se
fusionan con sus correspondientes vértebras para contribuir a la formación de las apó sis transversas. Las
fi
costillas pueden dividirse en dos grupos: Las dos últimas costillas falsas son denomina-
verdaderas y falsas.
das Las costillas verdaderas, de la uno a la siete, se denominan así porque tienen cartílagos cos-
flotantes.
tales que se articulan directamente con el esternón. El cartílago costal de cada una de las tres primeras
costillas falsas se articula con el cartílago de la costilla superior a ella. Las dos últimas costillas falsas no se
articulan con ninguna otra costilla y, por eso, reciben el nombre de flotantes.
Hay 12 pares de costillas, un par para cada una de las 12 vértebras torácicas. Las
costillas unen las vértebras torácicas con el esternón a través de cartílagos cos-
tales para formar el esqueleto del tórax, una pared exible que protege las vísceras
fl
Costillas
Sexta costilla izquierda
Vértebra torácica y costillas
Vista superior, posterior arriba
1
1
2
3
4
4
5
5
6
6
7
8
8
9 10
2
5

81
1 Cabeza
2 Carillas articulares de la cabeza
3 Cresta de la cabeza
4 Cuello
5 Cuerpo
6 Tubérculo
7 Carilla articular del tubérculo
8 Ángulo
9 Surco costal
10 Cresta del cuerpo
11 Tubérculo del escaleno (primera costilla)
12 Tuberosidad del serrato anterior (segunda costilla)
13 Cartílago costal
14 Costillas verdaderas [I-VII]
15 Costillas falsas [VIII-XII]
16 Costillas flotantes [XI-XII]
Costillas izquierdas de la 1 a la 12
Vista superior, primera costilla arriba, posterior a la derecha
Caja torácica
Vista anterior
13
11
12
14
15
16
13
12
14
15
16

82
una hoja que se estrecha o y una punta a lada como vértice denominada Un dis-
cuerpo fi apó sis xifoides.
fi
tintivo ángulo se forma en la unión entre el manubrio y el cuerpo, el Desde éste, un plano
ángulo esternal.
horizontal que se extiende en sentido posterior intersecciona el disco entre la cuarta y la quinta vértebras
torácicas y marca la parte superior del corazón en la cavidad torácica. Los bordes laterales del hueso con-
tienen escotaduras para la recepción de los cartílagos costales y las clavículas. Su cara anterior es ligera-
mente convexa, mientras que su cara posterior es débilmente cóncava. El esternón se articula con dieci-
séis huesos, de modo posee más articulaciones que cualquier otro hueso del cuerpo.
El esternón es el hueso anterior de la pared torácica. Formado por seis elemen-
tos segmentarios, o que se fusionan durante el desarrollo. El hueso
esternebras,
tiene la apariencia de una espada con un ancho mango denominado manubrio,
Esternón
1 Manubrio
2 Escotadura clavicular
3 Escotadura yugular o supraesternal
4 Ángulo esternal
5 Cuerpo
6 Apófisis xifoides
7 Escotaduras costales
Esternón
Esternón
Esternón
Esternón
Vista superior, posterior arriba
2
1
3
1
1
1
2 2
2
3 3
4
5
5
6
6 6
7
7
7
7
2
2
3 3
4
7
7

La porción apendicular del esquele-
to constituye el marco estructural de las extremidades. Esto incluye
las cinturas de los miembros, o porción fija del esqueleto apen-
dicular, y la serie de huesos que se extienden distalmente
desde las cinturas hacia el miembro propiamente dicho, o
porción libre del miembro. Las cinturas de los miem-
bros, escapular y pelviana, permiten anclar el miembro
al esqueleto axial. La porción libre de cada miembro
está constituida por unos grandes elementos proxi-
males, húmero y fémur, que forman el esqueleto del
brazo y muslo, respectivamente. Siguiendo con esta
secuencia, se encuentran el cúbito y el radio del ante-
brazo, y el peroné y la tibia de la pierna. Las regiones
más distales de los miembros son la mano y el pie, for-
mados por los cortos huesos carpianos y tarsianos,
respectivamente, y, más allá, los metacarpianos,
metatarsianos y falanges de los dedos.
Cuando los vertebrados tetrápodos (te-
rrestres) evolucionaron, surgió una gran
diferencia entre los dos miembros. El ante-
rior, o miembro superior, evolucionó como
una herramienta de control, mientras que el
posterior, o miembro inferior, devino en el
miembro locomotor. Acompañando estas mo-
dificaciones evolutivas de las funciones de los
miembros, también se operaron importantes cam-
bios morfológicos. El potente miembro locomotor
posterior desarrolló fuertes fijaciones al esqueleto axial. La ro-
busta articulación sacroilíaca, con sus ligamentos, transfiere las
potentes fuerzas generadas por el miembro posterior al esqueleto axial para
propulsar el cuerpo hacia adelante. Por otro lado, el miembro anterior de-
sarrolló mínimas y débiles fijaciones entre la cintura y el esqueleto axial,
convirtiéndose en un miembro más móvil.
A medida que se estudie el esqueleto de los miembros en las fotografías
que siguen, adviértanse las similitudes y diferencias que existen entre los
huesos de los miembros superior e inferior y recuérdense las diferencias
funcionales mencionadas arriba.
Esqueleto apendicular
6
83

84
capular. Esta cintura ósea proporciona una extensa base de soporte principalmente anclada al esqueleto
axial por músculos más que por ligamentos. La porción libre del miembro superior está formada por el
húmero, el radio, el cúbito y la mano. El húmero constituye la estructura esquelética del brazo. Distal al
brazo, el antebrazo alberga el radio y el cúbito. La región más distal del miembro superior es la mano, que
contiene la región de la muñeca con ocho huesos carpianos, la palma de la mano con cinco metacarpianos
y las 14 falanges de los dedos.
Cada uno de los miembros superiores está formado
por 32 huesos. El extremo proximal del miembro supe-
rior, la clavícula y la escápula, forman la cintura es-
Miembro superior
Miembro superior izquierdo
Vista anterior
Miembro superior derecho
Vista posterior
1 Escápula
2 Clavícula
3 Húmero
4 Cúbito
5 Radio
6 Carpianos
7 Metacarpianos
8 Falanges
1
2
3
4 5
6
7
8
2
1
3
4
5
6
7
8

85
une la escápula al esternón del esqueleto axial. La escápula, ancha y triangular, presenta una extensa área para
la inserción muscular y una amplia fosa lateral para articularse con el húmero de la porción libre del miembro su-
perior. Excepto por las débiles articulaciones que se establecen entre la clavícula y el esternón, la cintura escapu-
lar esencialmente no está unida por ligamentos o articulaciones al esqueleto axial. Esto fue de suma importancia
en el papel evolutivo de este miembro como herramienta de precisión y amortiguador durante la locomoción.
La cintura escapular, formada por la escápula y la clavícula,
constituye la base del esqueleto del miembro superior. La
clavícula, parecida a una vara, forma un puntal horizontal que
Cintura escapular
1 Escápula
2 Clavícula
Cintura escapular izquierda
Vista superior
Cintura escapular izquierda
Vista lateral
1
1
2
2

86
hueso es cóncava en sentido posterior, mientras que la curva de la extremidad lateral o acromial es cóncava
en sentido anterior. Es uno de los huesos más variables del esqueleto. Es típicamente liso y recto en mu-
jeres y rugoso y más curvo en hombres. El hueso forma el puntal ventral de la cintura escapular, que sos-
tiene la articulación del hombro separada de la caja torácica. Es subcutáneo y fácilmente palpable en toda
su longitud. La clavícula se articula con tres huesos: la escápula, el esternón y la primera costilla.
La clavícula tiene una apariencia en forma de «S» más o menos pronunciada:
puede ser casi recta, en forma de «S» poco profunda o tener una curvatura más
pronunciada o prominente. La curva de la extremidad medial o esternal del
Clavícula
1 Extremidad esternal
2 Carilla articular esternal
3 Impresión del ligamento costoclavicular
4 Cuerpo
5 Surco para el subclavio
6 Extremidad acromial
7 Carilla articular acromial
8 Tuberosidad para el ligamento coracoclavicular
9 Tubérculo conoideo
10 Línea trapezoidea
Clavícula izquierda
Vista superior, lateral a la derecha
Vista inferior, lateral a la derecha
1
1
3
4
5
6
6
8
10
7
9

87
1
6
2
1
4
4
6
7
6
9

88
rior y lateral), y es típicamente una fina lámina de hueso. Su ángulo lateral sobresale y forma la fosa glenoidea, que
se articula con la cabeza del húmero. Las tres proyecciones prominentes son la apófisis coracoides, que se proyec-
ta hacia el plano anterior, la cresta que se proyecta en sentido posterior denominada espina y el acromion o proyec-
ción lateral aplanada que forma la expansión lateral de la espina. La escápula se articula con dos huesos: la
clavícula y el húmero.
La escápula un hueso plano y triangular con tres proyecciones prominentes. La parte
triangular aplanada, el cuerpo, se extiende desde la segunda a la séptima costillas y
está formada por tres bordes (superior, lateral y medial) y tres ángulos (superior, infe-
Escápula
1 Fosa subescapular
2 Espina
3 Tubérculo deltoideo
4 Fosa supraespinosa
5 Fosa infraespinosa
6 Acromion
7 Carilla articular para la clavícula
8 Ángulo acromial
9 Borde medial
10 Borde lateral
Escápula izquierda
Vista anterior, lateral a la derecha Escápula izquierda
11 Borde superior
12 Escotadura de la escápula
13 Ángulo inferior
14 Ángulo superior
15 Cavidad glenoidea
16 Tubérculo supraglenoideo
17 Tubérculo infraglenoideo
18 Cuello
19 Apófisis coracoides
1
6
2
7
9
10
11
12
13
13
14 14
15
16
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19
19

89
Escápula izquierda
Escápula izquierda
2
2
3
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5
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6
8
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18
19
12

90
nado de anterior a posterior. Los extremos están formados por un núcleo de hueso esponjoso cubierto por
una na lámina de hueso compacto. El cuerpo es un grueso cilindro de hueso compacto que rodea una
fi
larga cavidad medular. El húmero se articula con tres huesos: la escápula, el cúbito y el radio.
El húmero es el elemento esquelético del brazo y es el hueso más largo del miem-
bro superior. Tiene un gran cuerpo cilíndrico que se extiende desde el extremo
proximal al distal. El extremo proximal es redondo, mientras que el distal es apla-
Húmero
1 Cabeza
2 Cuello anatómico
3 Cuello quirúrgico
4 Tubérculo mayor
5 Tubérculo menor
6 Surco intertubercular
7 Cresta del tubérculo mayor
8 Cresta del tubérculo menor
9 Cuerpo
10 Surco para el nervio radial
11 Cresta supracondílea medial
12 Tuberosidad deltoidea
13 Capítulo
14 Tróclea
15 Fosa olecraneana
16 Fosa coronoidea
17 Fosa radial
18 Epicóndilo medial
19 Surco para el nervio cubital
20 Epicóndilo lateral
Húmero izquierdo
Húmero izquierdo
4
5
6
7
8
9
11
12
13
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1
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20
3
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91
Húmero izquierdo
Húmero izquierdo
Húmero izquierdo
Húmero izquierdo
1
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18
18
20
5
6
6
15

92
El cúbito es el hueso medial y alargado del antebrazo. Es grueso y con una escotadura
en el extremo proximal, aportando la mayor contribución a la articulación del codo. Desde
la escotadura proximal, se estrecha en un delgado cuerpo que naliza distalmente en una
fi
pequeña cabeza redonda. El cúbito se articula con dos huesos: el húmero y el radio.
Cúbito
1 Olécranon
2 Apófisis coronoides
3 Tuberosidad cubital
4 Escotadura radial
5 Escotadura troclear
6 Cuerpo
7 Borde interóseo
8 Borde anterior
9 Borde posterior
10 Cresta del supinador
11 Cabeza
12 Circunferencia articular
13 Apófisis estiloides del cúbito
Cúbito izquierdo
Cúbito izquierdo
1
9
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10
2
3
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93
Cúbito izquierdo
Cúbito izquierdo
Cúbito izquierdo
Cúbito izquierdo
1
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2
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6
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13
13
13
5 5
4
8
7
9
9
7
4

94
lateral para formar la porción más ancha del hueso. El extremo distal es cóncavo anteriormente y convexo y
estriado posteriormente. Los bordes nos del cuerpo le dan una forma triangular en un corte transversal. El
fi
radio se articula con cuatro huesos: el húmero, el cúbito, el escafoides y el semilunar.
El radio es el hueso lateral y alargado del antebrazo. Su cuerpo, parecido a una vara, se
expande entre los dos extremos. El extremo proximal forma una cabeza semejante a una
rueda con una concavidad proximal, mientras el extremo distal se extiende de medial a
Radio
1 Cabeza
2 Carilla articular
3 Circunferencia articular
4 Cuello
5 Cuerpo
6 Tuberosidad del radio
7 Tuberosidad pronadora
8 Borde interóseo
9 Borde anterior
10 Borde posterior
11 Apófisis estiloides radial
12 Cresta supraestiloidea
13 Tubérculo dorsal
14 Canales para los músculos extensores
15 Escotadura cubital
16 Carilla articular carpiana
Radio izquierdo
Radio izquierdo
3
4
5
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6
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1
7
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Radio izquierdo
Radio izquierdo
Radio izquierdo
Radio izquierdo
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13
6
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12

96
dispuestos en dos hileras de cuatro, las hileras distal y proximal. Distales al carpo, están los cinco radios digi-
tales. Hay cuatro dedos con un metacarpiano y tres falanges, el dedo restante es el pulgar, con un metacar-
piano y sólo dos falanges. Las fotografías de las manos que hay debajo y en la página opuesta están coloca-
das como si el lector viera su propia mano.
La mano es una estructura compuesta por 27
huesos. El extremo proximal de la mano es el
carpo o muñeca. Hay ocho huesos carpianos
Esqueleto de la mano
Mano izquierda
1 2
3
4
5
6 7
8
9
10
11
12
13
14
14
14
14
14
15
15
15
15
16
16
16
16
16

97
1 Escafoides
2 Semilunar
3 Piramidal
4 Pisiforme
5 Trapecio
6 Trapezoide
7 Grande
8 Ganchoso
9 Metacarpiano I
10 Metacarpiano II
11 Metacarpiano III
12 Metacarpiano IV
13 Metacarpiano V
14 Falange proximal
15 Falange media
16 Falange distal
Mano izquierda
Vista posterior, lateral a la derecha
1
2
3
5
6
7
8
9
10
11
12
13
14
14
15
16
16
14
14
14
15
15
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16
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