2. Cuando tomamos la decisión de incorporar una mascota a la familia hemos de tener
muy claro que no es un animalito de peluche que adornará nuestra habitación.
Una mascota es un ser vivo que traemos a nuestra casa y al que tendremos la
obligación, tomada libremente, de dedicar una parte de nuestro tiempo.
Es un compromiso, un compromiso a largo plazo. La mascota viene a ser un nuevo
miembro de la familia. Al incorporarla a nuestra vida estamos aceptando que
deberemos prestarlo toda la atención y cuidados que, como un ser vivo que es, va a
necesitar.
Y al hablar de cuidados no nos referimos solo a proporcionarle el alimento que
necesite. Nuestro animal de compañía tiene unas necesidades y los dueños somos los
responsables de que esas necesidades queden absolutamente cubiertas.
3. Hay que elegir el animal que se convertirá en nuestra mascota, o lo que es lo
mismo en un nuevo miembro de la familia, con mucha responsabilidad,
averiguando todo lo necesario sobre él:
Tipo de dieta: la dieta cambiará en las diferentes etapas de su vida.
Lugar dónde debe vivir: si necesita algún recinto especial.
Rasgos biológicos: cuanto suelen vivir, reproducción, etc.
Medidas sanitarias: vacunaciones, cuidados necesarios para que la relación
con la mascota no suponga ningún riesgo para la salud.
Coste económico: hay que alimentarla, llevarla al veterinario, comprar
accesorios, etc.
4. Respeto y cariño
Las mascotas no son juguetes ni objetos. Son seres que sienten y sufren. Antes
de adquirir una mascota piensa si puedes cuidarla durante toda su vida que es
hasta 15 años.
7. LIMPIEZA.
Debes mantenerlo limpio, libre de pulgas y garrapatas. Debes bañar a tu perro
cada 15 días con jabón especial y a los gatos es necesario cepillarlos para
quitarles el polvo y pelo suelto. Mantén también limpia el área donde habita.
8. SALUD.
Lleva a tu perro o gato al médico cuando observes que no actúa normal. Mantén
su cuadro de vacunación y desparasitación siempre al corriente.
No le des remedios caseros ni medicina de humanos.
9. ESTERILIZACIÓN
Como sociedad, tenemos la responsabilidad de que los animales de compañía tengan una
posibilidad real de encontrar un hogar con personas responsables, capaces de brindarles una
vida digna; precisamente por esta razón debemos evitar el nacimiento de aquellos no deseados,
que de lo contrario terminarán por ser sacrificados, maltratados o abandonados. Lleva a tu
mascota a esterilizar.
ESTERILIZAR no es cruel,
SALVAR VIDAS, no tiene precio.