Atahualpa Fernández Arbulu - Descubre el poder curativo de los caballos en niños y personas con discapacidad mental, física o con problemas emocionales
2. En la web del Huffington Post, Tim Hayes ha explicado, desde su perspectiva profesional
en el área, los beneficios, en cuanto a la sanación de heridas emocionales, de criar caballos
gracias a las características y valores inherentes al animal. Estos beneficios se pueden
observar en personas con trastorno por estrés postraumático (PTSD, post-traumatic stress
disorder), jóvenes en riesgo de desviarse socialmente, así como en niños con autismo.
Aquí explicaremos las dos características innatas en los caballos que ayudan a tratar estas
condiciones.
Atahualpa Fernández Arbulu
3. HIPERVIGILANCIA
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Los caballos por naturaleza permanecen en alerta continua a fin de conservar sus vidas. Esta
característica la poseen las personas con estrés postraumático y autismo. Esta similitud permite
que el humano desarrolle cierta comunicación no verbal con el animal, pues puede percibir que
éste es semejante a él y lo ayuda a sentirse seguro y cómodo en su presencia. También produce un
aumento en la compasión entre ambos gracias a la relación establecida.
4. DINÁMICA DE MANADA EQUINA
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Los caballos tienen la virtud de llevarse bien con sus congéneres. Dicha cualidad se convierte en
una clave importante durante los viajes de largas distancias, ya que así aseguran la supervivencia
de la manada. Esto les permite desarrollar no sólo conductas agresivas en pos de la defensa
individual o de cada miembro, sino que también desarrollan cualidades como aceptación,
tolerancia, amabilidad, honestidad, paciencia, comprensión, piedad y compasión.
5. Hayes explica que los caballos no juzgan a otros caballos o a los humanos por lo que son,
sino por su comportamiento. Si una persona se muestra amable, comprensiva, tolerante y
compasiva, el caballo también lo será ya que son cualidades generalmente innatas en el alfa
de una manada. El caballo ve al ser humano tal cual es, sin tomar en cuenta sus méritos o
deficiencias físicas, cognitivas o incluso sociales. Un adolescente, por ejemplo, podrá
sentirse aceptado ya que el caballo no le juzgaría sino que tomará en cuenta las virtudes que
despliega como persona.
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