1. Buscan cuidadores para árbol de caucho
Se convirtió en símbolo de la defensa de la naturaleza en Santa
Marta.
Por: Paola Benjumea Brito Corresponsal de EL TIEMPO Santa Marta |
11:24 a.m. | 24 de julio de 2015
Foto: Juliana Alvarez
Aunque no ha sido fácil que permanezca vivo, el caucho sigue aglutinando defensores de la fauna
de la capital del Magdalena.
Tres meses después de su traslado desde el Centro Histórico de Santa Marta hasta el Polideportivo
de la calle 22, el árbol de caucho sigue luchando para continuar brindándole sombra a los samarios
que hacen deporte en este escenario deportivo.
En una visita realizada por EL TIEMPO al Polideportivo, el pasado fin de semana, encontró el árbol
con la mayoría de las ramas secas después de varios días sin ser regado. El martes tres de los
ambientalistas, que participaron en la movilización ciudadana para evitar que fuera talado para darle
paso a la construcción del Centro Comercial Gran Bazar en el predio donde estuvo por años y que
logró que lo trasplantaran, llegaron a echarle agua con baldes.
“Hemos venido regándolo, un día sí y otro no, para que pueda sobrevivir, pero hace un mes no se
venía a regar debido a nuestras múltiples ocupaciones. Sin embargo, así como muchos estuvimos en
esta causa, creo que deberíamos comprometernos a hacer la labor más fácil, que es venir a regarlo”,
dijo Ana Karina Castañeda.
El caucho, que se convirtió en un símbolo de la defensa de la naturaleza en Santa Marta, movió
alrededor de 80 personas que recogieron cerca de 3.000 firmas y compartieron mensajes y
fotografías en redes sociales con la etiqueta #salvemoselarboldecaucho para evitar que lo talaran,
sin embargo, hoy solo cinco o seis personas están pendientes de mantenerlo con vida.

2. “El árbol de caucho no es solo de seis personas, es de todos los samarios. Se logró que no lo
cortaran y mataran, sino que lo trasplantaran, entonces la labor es de todos venir a regarlo y
mandarle la mejor energía para que pueda sobrevivir”, dijo Castañeda.
Por eso, iniciaron una campaña en redes sociales para convocar a personas que vivan en los
alrededores del Polideportivo o que estén dispuestas a ayudar al cuidado y riego del árbol de caucho
porque en ocasiones han tenido inconvenientes para conseguir agua en ese lugar.
“Vamos a retomar la lucha y seguir convocando, diciéndoles a las personas que aquí está el árbol de
caucho, que nos necesita y tenemos que cumplirle porque fue un compromiso que se hizo con él.
No vamos a bajar la guardia hasta que nuevamente lo veamos retoñar y con ese follaje que tenía”,
dijo Elizabeth Patiño, quien el martes dejó a su hija al cuidado de un hermano para ir a darse cuenta
del caucho porque le contaron que se estaba secando.
José Luis Díazgranados, quien es miembro de una organización ambiental, dijo que aunque los
desmotiva que la Administración Distrital autorice la tala indiscriminada de árboles en la ciudad
para construir edificios, avenidas y ampliar puentes, el hecho que el árbol de caucho esté vivo es
suficiente para dar la lucha por salvarlo.
“Lo bueno es que el árbol está vivo, tiene ramas verdes y tiene brotes en camino, entonces es la
hora de retomar el tema, organizarnos y que haya grupos de voluntarios que vivan en las cercanías y
se encarguen de cuidarlo”, expresó.
Para el traslado del árbol de caucho hacia el Polideportivo fue necesaria la participación de cerca de
40 personas y la utilización de una grúa con capacidad para 50 toneladas, una pajarita y dos
camabajas. Antes de moverlo del Centro Histórico hubo que podarle las ramas para que pudiera
pasar por las avenidas y algunas fueron reinsertadas posteriormente.
El ingeniero forestal Luis Alberto López, director de proyectos especiales de Asesorías Forestales,
empresa contratada para el traslado, dijo en su momento que el árbol necesitaba un tratamiento con
nutrientes y regado permanente por mínimo tres meses para adaptarse a su nuevo hogar. El costo del
traslado lo asumió FTS Desarrollo Inmobiliario y Grupo Fernández, promotores del centro
comercial Gran Bazar.