1. Carlos Eduardo Gómez Gómez
C.I: 15.818.997
Colegio De Ingeniero
El colegio de ingeniero tiene sus primeros inicios en la época de la
independencia, al frente se encontraba el Gran Mariscal De Ayacucho
Antonio José De Sucre, además se encontraba adscrito el cuerpo de
ingeniero militar. Luego vendría a sumarse Juan Manuel Cajigal primer
presidente y fundador del colegio de ingeniero, El Colegio de Ingenieros de
Venezuela se instala el 28 de Octubre de 1861, en virtud del Decreto del
Presidente de la República Manuel Felipe Tovar, de fecha 24 de Octubre de
1860, en el cual a la vez reglamenta a la Academia de Matemáticas y se crea
el Colegio de Ingenieros; en este acto estaban presentes 22 ingenieros de
los 61 que inicialmente habrían de integrarlo, pues eran muy pocos los
hombres consagrados a esta profesión, que en el curso de nuestra historia
se han identificado con todas las tareas del desarrollo de Venezuela.
Mi análisis
El CIV surgió como una necesidad del cuerpo de ingeniero militar en
la época de la independencia para apoyar la causa independentista, de una
manera incondicional, hoy en día el colegio de ingeniero es una institución
que debe estar más aun comprometida con el desarrollo del país, debe estar
más integrado con las comunidades, la dinámica mundial que vivimos hoy lo
exige, y sobre todo la situación de nuestro país.
El colegio de ingeniero está facultado para asesorar al estado
venezolano en materia tecno-científica para así contribuir al desarrollo del
país dejando a un lado el “partidismo”, y nosotros los futuros ingenieros
debemos estar compremetidos no solo por cuestión de profesionalismo, sino
2. que también por cuestiones éticas y morales debemos aportar nuestro grano
de arena al desarrollo del país.
Como futuros profesionales de la ingeniería estamos en la capacidad
técnica de resolver problemas puntuales en nuestras comunidades, debemos
trazar una relación estrecha con los vecinos, ya no debemos ser pasivos
antes los problemas que nos aqueja, la sociedad nos exige un mayor
protagonismo en la resolución de problemas que contengan carácter técnico,
un mayor involucramiento con las realidades de las comunidades nos hará
mejores profesionales y mejores personas.
Ya no basta con estar inscrito en el CIV, también debemos estar
inscrito con nuestra vocación profesional, debemos ser actores protagónico
en la conducción del desarrollo del país, la realidad del mismo nos los exige.
El CIV como institución debe velar por el cumplimiento de sus normas por
aparte de sus agremiados, velar por los beneficios socio económicos de sus
representados y el de su familia.
En resumen, todos los profesionales agremiados al CIV deben aportar
más al país, mantener una relación más estrecha con las comunidades,
debemos mantener ese compromiso, así serán mejores profesionales y
mejores personas. No solo el estado resuelve problemas, los ingenieros
también resuelven problemas, claro está, problemas de orden técnico.