Los peces marinos beben agua continuamente debido a que pierden agua a través de su piel por ósmosis, dado que su concentración de sales es menor que la del agua de mar. Los peces de río no beben agua, ya que al tener mayor concentración de sales que el agua dulce, correrían el riesgo de absorber demasiada agua. Los salmones se adaptan a ambos medios, evitando beber agua en ríos pero haciéndolo en el mar para eliminar sales.
2. Carlos Michel Fumero
¿Alguna vez se han preguntado si los peces beben agua? Puede parecer una pregunta algo
absurda, pero la respuesta es muy interesante, ya que esto depende directamente del medio
donde vivan. Te explicamos por qué los peces de mar beben agua y los de río no lo hacen.
3. Carlos Michel Fumero
Los peces marinos sí beben agua y, además, lo hacen de manera continua. El agua del mar,
como todo el mundo sabe, es salada, por cada litro hay aproximadamente unos 33 gramos de
sal. En el océano habitan numerosas especies como las esponjas, los bivalvos, las anémonas o
los erizos, entre muchas otras, que tienen la misma concentración de sales en su organismo
que el agua del mar. La ósmosis es el fenómeno de igualación de distintas concentraciones
separadas por una membrana semipermeable, y el agua siempre fluye en los cuerpos de las
concentraciones menos salinas a las más salinas.
PECES DE MAR
4. Carlos Michel Fumero
Por esta razón, al ser su concentración de sales menor que el medio en el que vive, el cuerpo
del pez de mar pierde agua, filtrándose al exterior a través de su piel, y sufre una
progresiva deshidratación. Para contrarrestar esto y mantener el equilibrio de sus fluidos
corporales internos, los peces de mar se ven obligados a beber mucha agua. Aunque al hacer
esto también ingieren sales, éstas no son absorbidas porque no las necesitan, al menos no su
mayoría, y son expulsadas a través de las branquias y la orina, que es muy concentrada y
con poca cantidad de agua.
5. Carlos Michel Fumero
A los peces de agua dulce les sucede todo lo contrario. A diferencia de los marinos que
corren el riesgo de expulsar demasiada agua y, por tanto, de deshidratarse, los peces de río,
al tener en sus fluidos corporales mayor concentración de sales que el agua dulce, corren el
peligro de que les entre demasiada agua o, dicho de otra forma, de que mueran por exceso de
líquidos. Para evitar esto utilizan dos mecanismos muy simples. El primero, consiste en
dotarse de una estructura corporal impermeable al agua, y el segundo, en sencillamente no
beber agua.
PECES DE RÍO
6. Carlos Michel Fumero
Los salmones son un caso muy particular que se adaptan a lo largo de su vida a ambos tipos
de medios. Algunas de las especies de estos peces nacen en los ríos, y después de recorrer su
curso migran hasta el mar. De hecho, algunos regresan al lugar donde nacieron para
procrear. Al principio, en agua dulce, evitan beber agua y perder sales, pero al llegar al
océano no dejan de beber y eliminarlas.