Subtema 1 Fanfiction: Francisca y Raimundo el comienzo.
1. Fanfiction. El comienzo: España- Puente Viejo 1885 por Diana Ceballos
• Los Montenegro eran una familia de abolengo, bastante respetada y conocida por toda la región. El patriarca
de la familia Ricardo Montenegro era un hombre de armas tomar, conocido por su carácter fuerte e
indomable, heredero y terrateniente de gran extensión de puente viejo; Ricardo había tenido como meta de
vida perpetuar sus riquezas al tiempo que mantenía el honor y apellido de su familia. Ricardo estaba casado
con Eloísa Aldecoa que al igual que el provenía de una familia adinerada, pero lo más importante con un
apellido de renombre, su matrimonio había resultado en un gran negocio para las dos familias, y ninguno de
los dos se atrevería jamás a quejarse del enlace, sin embargo pasados los años el matrimonio se había tornado
en un tempano de hielo, Ricardo llevaba a cuestas una gran frustración, el hecho de que su mujer aunque
había sido educada para ser una esposa ilustre y atenciosa, no había podido cumplir con el fin más importante
de su matrimonio, el darle un heredero varón, que una vez Ricardo falleciese continuase con el legado de los
Montenegro, esa frustración no solo asombraba la vida de Ricardo si no también la de Eloísa que se sentía
culpable e incapaz, la pobre mujer había luchado tanto por quedar en cinta que después de varios intentos
fallidos y abortos espontanéenos, cuando por fin puedo llevar a buen término uno de sus embarazos, y sintió
que tocaba el cielo con los dedos por haber cumplido con su deber como esposa, la vida le había dado una
niña.
*Como cualquier padre Ricardo amaba a su hija, pero muy
en el fondo existía el sentimiento de que no era lo que él
esperaba, por su parte Eloísa a sabiendas que su parto había
sido difícil y que esa niña Francisca marcaba su principio y
fin como madre, decidió que sin importar que hubiese
parido una mujer haría de ella una persona con carácter, al
punto de que nadie la mirara por debajo del hombro tan
solo por el hecho de ser mujer, pues pese a la frustración de
su esposo y lo que pudiera decir la gente, Francisca como
única hija del matrimonio seria la heredera indiscutible. Y
así lo hizo, desde el comienzo crio a su hija con firmeza,
mucho más que la cualquier madre pudiese tener con su
hija.
• Francisca creció oyendo siempre las palabras de su madre “Eres una Montenegro y debes estar a la altura”
“Una Montenegro no se amedrenta ante nada” “Serás la heredera de todo y por ello debes tomar las
decisiones siempre pensando en el patrimonio”. El ímpetu de Eloísa por convertir a su hija en una heredera a
la altura de su apellido había hecho que fuese no solo extremadamente estricta con la educación de Francisca,
si no implacable. Por su parte Ricardo con el tiempo se había tornado más benevolente con respecto a la
educación de su hija y aunque no contrariaba a su mujer con lo que tuviese que ver con su hija, sentía que
Francisca estaba siempre condicionada a los deseos de su madre y que no había podido gozar de una niñez
normal. Aunque eran raras las veces en que podía hablar con su padre debido a lo ocupado que siempre se
encontraba, Francisca sabía que solo en él podía encontrar una palabra de consuelo, de conforto cada vez que
algo malo le sucedía. Francisca, aunque era tan solo una niña sabía de su papel como heredera y que no podía
hacer nada frente a su destino, sin embargo, como cualquier otra niña tenía deseos de correr por los montes,
jugar y divertirse, no obstante, esos eran lujos que su madre no le permitía, francisca había entendido desde
muy temprano en su vida que todo lo interesante y excitante que le pasara sería siempre a escondidas de su
madre.
Pintura - Luis Arango