Este documento es la introducción a una colección de poemas japoneses traducidos al español. Presenta información sobre el editor, el traductor, y detalles de publicación como la fecha y lugar de publicación. Además, incluye una breve biografía de los artistas cuyas obras aparecen en la portada e interiores del libro. Finalmente, ofrece instrucciones sobre el uso y distribución de los poemas contenidos en la colección.
9. ix
C ON T ENI D O S
L A E
No debí esperarlo
A
Tan solo canto
A
¿Quién es aquella mujer?
Si este fuera un mundo
Aunque me hiciste pensar
¿Qué es peor?
Cuán grande ha crecido
Como las gentes de Nawika
Aunque la pureza
La pureza de la luz de la luna
A M
¿Una flor que cae?
Mirando a las flores
A N
¡Ah, si tan solo en este mundo!
Derrámense al azar, oh, flores del cerezo
B A
Tras una ráfaga de viento
B Y
Cambia el color
C-
Cae la lluvia de la primavera
Con la cubeta del pozo
C-
Simplemente un río
C
Silencio
10. x
E D
Hacemos a un lado
Largas como las largas colas
¿El mundo?
Esta nube pasajera es lamentable
F K
Quizás llegue a vivir lo suficiente
F M
Tus finas promesas
F O
De entre las flores
F S
No vienes.
F S
¿Cómo es que los patos?
¿Volveré a ver esto?
La radiante luna
Allá lejos, en el futuro
¿Cuántas veces ya?
Ardiendo en secreto
La puerta se ha quedado abierta
F T
Allá en el ancho mar
F
El Valle Dorado fue un lugar
G J
Bebo vino frente a las flores
G S
Gorrión en los bambúes
G-K Y
En la vieja capital
Nadie vive ya
E G-T
¿En qué momento?
11. xi
G
¡Ah, esta luna tan fría!
H S
Ahora que no cae ni un pétalo
A H
Despedida
H
En la pálida, pálida luz
H O
Si somos humildes
I T
Si a lo largo de tu vida has despreciado rango y fama
Las hojas del otoño caen con el viento
I S
Como rocío que se evapora
L I
Porque sospechamos
Una flor de olas
I S
En este mundo
Mojado de amor o de lluvia
Un amigo me cuenta que han florecido los cerezos
Las viejas raíces
En noches
No puedo decidirme
Ningún gélido viento
Ya no vienes
Cuando el viento del otoño
Aquel que está conmigo ahora
¿A dónde?
¿De qué nos sirve?
Este corazón
En año nuevo, viendo nevar
En vez de recordar
Hoy
Ven pronto
12. xii
La gota de rocío
Aunque un río de lágrimas
A lo largo de los años
Pienso, al menos en mis sueños
Si aquel a quien tanto he esperado
Recordándote…
Me consolaría
El camino que he de tomar
K K
Mi espiarla en secreto
K M
En esta noche de otoño
K K
Era un rostro que no conocía
K T
Se pone el sol en el camino de la montaña
K T
Cuando la nieve llega en primavera
Cerezo floreciente
¡Así que así es
Los matices son tan ricos
Ah, la luna de otoño
El viento que separa las
Abrumado de amor
Entre los juncos de la ciénaga
K
Las flores se arremolinan
K
¡Algas verdes!
K I
La luna, las flores
La nieve se derrite
Las montañas distantes
Pequeño caracol
En un mundo mejor
En este mundo
Amantes, no lloren
13. xiii
El mundo de rocío
Niños imitando cormoranes
Madre, nunca pensé
Voy a darme vuelta
Luna llena
Bajo los cerezos
K
Si tan solo hubiera
K T
En un anochecer
Por un instante aletean
K
En este mundo nuestro
M S
Un campo de tumbas
Comiendo una manzana
Hasta el llovido porche
La serpiente escapa
Bajo los cielos
Tras matar a esa araña
Viento de otoño
M B
Un arreglo de azaleas
Un campo de algodón
Ante el castillo en ruinas
Pastos del verano
Captura al sol ardiente
Casi siempre odio los cuervos
Sobre su palma abierta
No puede ser que todo lo que uno ve no sea flor
Hasta que no se cae
Canta, canta la alondra
Arte incipiente
Mañana de otoño
M
Oh, si tan solo el fulgor de la primavera conociera mi sentir
M S
Si tan solo el mundo
14. xiv
Nuestra vida en este mundo
Con cada primavera que pasa
M T
Este mundo nuestro
¡Ah, cómo me duele!
M K
Entre los brotes de arroz
M S’
El alboroto de los pájaros
M K
Sobre mi mano
Compadezco, más que a los ciegos
E M
Me prometí a mí mismo
M S
Alguien pasa
M S
Cuando no hay ningún lugar
N S
La vida: una solitaria mariposa
M N
Villa de la montaña: dos versiones
Oh, que pudiera compartir
Ōe A
Los tonos de la hierba se muestran ya por todas partes
O K
No es posible verlo
Tras la visita, a escondidas, de un amante
Mi añoranza por ti
Las cigarras cantan
¿Es este amor sueño
Las noches de otoño
Pensé en cortar
Enviado a un hombre que parece haber mudado en su amor
Los pies cansados del recolector de algas
Como una onda
15. xv
L O
¿Me amará por siempre?
Ōshikōshi M
Se esfuerza en vano
Los blancos crisantemos
Ōshima R
¡Ah, este mundo nuestro!
Luna de otoño
L Ōtomo 124
Salpiquemos con flores de ciruelo
Ōtomo T
Tres poemas en alabanza del Sake
Aquel enebro
Ōtomo Y
Lamento por su amante muerta
El jardín, en primavera
Por la mañana, desde mi cama
La vida que lleva un hombre
P Ō
En vísperas de su ejecución
R
No pienso sino en eso: cuando era joven
En los cielos azules, los gansos, ateridos, gritan
Bajo los árboles
De pura soledad
Dulce es la brisa
Cómo en una noche de otoño
Nuestra vida en este mundo
No es que
El modo en que el aliento sale
Por lo menos los ladrones
No digas que mi cabaña no tiene nada que ofrecer
Nunca aspiré al lado espectacular de la vida
La noche es fresca y clara
Primeros días de la primavera
Nada satisface algunos apetitos
16. xvi
R
De pura soledad
S
El invierno lo ha marchitado todo
A todo alrededor
El estruendo de los vientos de tormenta
No se puede confiar
Limpiamente por a través del agua
Allá en las altas olas
El observador “desapegado”
Durante toda la noche
Cobertizo quieto de montaña
S
No te sonrías
S M
Nuestra vida en este mundo
S
¡Es tu sombrilla!
S
Un poquito fuera de lugar
“No olvides cerrar”
La suegra se venga
P S
Tan exquisito en mi mano
Esa clase de lugar
S
Nunca más
Al amanecer, uno no puede saber
¿Con quién podré compartir?
Encontrar la determinación
Ese que mira
Cielos limpios sobre la nieve
Ahora el Buda mismo
S
Agua que fluye allá a lo lejos
17. xvii
S
Desde el río
Incluso aquí, en la casa de mis dolores
Aunque agotado por los vientos del otoño
No hay forma de saber de dónde llegó
S
Una cosa incierta
Que la vida de un hombre no es más que un sueño
¿En cuál montaña de entre estas?
S
A lo lejos puedo ver
T A
Inclinadas hacia la tierra
Qué delicioso es
Qué delicioso es
Qué delicioso es
Qué delicioso es
T K
¡Ah, aroma del ciruelo!
Ese sueño que tuve
Ah, la luna llena
“Es mía”, pensé
T I
Como un hijo de las colinas
Como una piedra
Su único hijo
Nunca noté
Aunque esta montaña
De noche
Estaba en mi mano
T T
Mosqueta florecida
¡Ah, el primer amor!
T S
Oculta en una choza en ruinas
T M
Ni una pizca de barro
18. xviii
Al pasar
T
¿Qué cosa puedo hacer?
Entre la suma de las penas
L U D
¿Es esto el sueño?
Pensando que mi tristeza
En la corte real
Mi corazón a la deriva
Y A
Escrito tras ver el Monte Fuji
En la bahía de Waka
Los hombres del emperador
Y S
Contemplé aquella luna
Y O
Añoranza por su hijo Furuhi
E Y
Otros podrán olvidarte, pero yo no
Y B
¡Ah, qué placer!
Serenidad
Tal está la luna
Se han separado ya
Ante ese blanco
Tan solo el Fuji
Un ave lejos
Sobre la campana del templo
Entre flores de perales
Cae una camelia
Huele el ciruelo
Entre cerezos
Y A
“La primavera es tan corta”
19.
Una pizca de poemas japoneses
20.
21. 21
Lady Akazome Emon
No debí esperarlo.
Hubiera sido mejor
haber dormido y soñado,
que mirar la noche pasar,
y ponerse esta lenta luna.
23. 23
Anónimos
¿Quién es aquella mujer—
esa que arrastra tras ella su vestido rojo
mientras se aleja caminando
a lo largo de la marea menguante
de la playa Kuroushi?
Si este fuera un mundo
en que no existieran
las falsas promesas,
¡cuán grande sería mi deleite
al escuchar tus palabras!
24. 24 anónimos
Aunque me hiciste pensar
que tu amor sería inagotable
como en la playa las arenas,
lo único que resultó infinito
fue tu poder para olvidar.
¿Qué es peor—
el atardecer
en que esperas y vagas,
o la siguiente mañana
cuando te dice adiós y se va?
25. 25
anónimos
Cuán grande ha crecido
el número de aquellos
que han deseado
tan solo sobrevivir
y ahora ya no están.
Como las gentes de Nawika
hollinosas por el humo de los juncos
que queman en sus hogueras,
¡así es mi mujer!
Y aún así no ha dejado de gustarme.
26. 26 anónimos
Aunque la pureza
de la luna ha silenciado
al ruiseñor y al grillo,
el cuclillo ha cantado
toda la blanca noche.
La pureza de la luz de la luna
cayendo desde el inmenso cielo,
es tan grande que congela
al agua que toca con sus rayos.
27. 27
Arakida Moritake
¿Una flor que cae
y regresa a la rama?
¡Una mariposa!
Mirando a las flores
no puedes sino sentir el dolor
¡en el cuello!
28. 28
Ariwara no Narihira
¡Ah, si tan solo en este mundo
no hubiera tal cosa
como flores de cerezo,
quizás entonces, durante la primavera,
nuestros corazones pudieran descansar en paz!
Derrámense al azar, oh, flores del cerezo,
y nublen por completo el cielo,
de modo que puedan ocultar
el camino que se dice ha de seguir la senectud.
29. 29
Bunya no Asayasu
Tras una ráfaga de viento,
el blanco rocío en el pasto del otoño
se esparce
como una collar de perlas roto.
30. 30
Bunya Yasuhide
Cambia el color
de la hierba y los árboles,
pero la flor
de las olas del mar
no conoce el otoño.
31. 31
Chiyo-jo
Cae la lluvia de la primavera—
las sonrisas de la tierra brotan
en cada uno de los campos.
Con la cubeta del pozo
rebosante de Glorias de la Mañana,
prefiero salir a mendigar mi agua.
34. 34
Eihen Dōgen
Hacemos a un lado
tan casualmente
lo que no atañe a las palabras,
que no queda ni un rastro de ello
en las marcas del pincel.
Largas como las largas colas
de los faisanes de montaña,
las fatigosas colinas:
así de larga es la noche frente a mí—
y sin embargo, todas terminan en el amanecer.
35. 192
Yosano Akiko
“La primavera es tan corta,
¿pero quién ha dicho
que la vida durase para siempre?”
Así le dije, y llené sus manos
con la henchida tibieza de mis pechos.
36.
37.
38. É T es poeta, traductor, editor y promotor de la lectura
de poesía, particularmente. Es autor de las compilaciones de poesía
internacional Wikaráame, Vol. 1 y 2; de la compilación de narrati-
va brevísima mundial Irétari, de volúmenes de traducciones de Jim
Moore, Anna Swirszczynska, Ono no Komachi, Izumi Shikibu, Wi-
lliam Carlos Williams y una colección de poemas chinos antiguos:
Tengo vino, luna y flores, entre otros. Recientemente ha publicado su
libro de poemas La vida espiritual de las hormigas.
39.
40. Sobre el agua, la luna.
Por debajo, la :
¡Luna del mar!
41.
42. Bajo
la sombra
silvestre de un
naranjo, de Édgar Trevizo,
se terminó de editar el mes
de mayo de 2023 en la ciudad
de Chihuahua, México. Para
su composición se utilizaron
caracteres Adobe
Garamond Pro
10.5/16