La prueba de diseño de archivos es un método para evaluar la calidad y estructura de un sistema de archivos. Se analizan factores como la organización lógica de los datos, la asignación de nombres de archivos y directorios, y la facilidad de uso general del sistema de archivos. El objetivo es determinar si el diseño del sistema de archivos es intuitivo, eficiente y fácil de usar para los usuarios.