2. • EL AIRE QUE NOS RODEA
• Vivimos sobre un planeta maravilloso, completamente rodeado de aire.
• El aire es una mezcla de varios gases. Entre ellos están el dióxido de carbono y el oxígeno dióxido de carbono
ayuda a las plantas a crecer. El oxígeno nos permite respirar. Sin aire no podríamos vivir, los animales y las plantas
tampoco.
• Sin embargo, nuestro aire es a menudo ensuciado por el humo de las fábricas y de los coches que hay en las
ciudades. A eso se le llama “polución” o “contaminación” Esto afecta nuestra salud y la de las plantas y animales
que nos rodean, por eso es necesario que aprendamos a cuidarlo.
• El aire pasa por todos los sitios y se apoya sobre todos los objetos. Transporta los ruidos, la música, las voces e
incluso los olores y alimenta la llama de las velas y del fuego. Puede ser seco, como en el desierto o húmedo y
cargado de lluvia. Puede ser caliente o frío. También le da al cielo ese hermoso color azul que vemos.
• Y sobre todo, se mueve, entonces lo llamamos viento. Puede servir para hacer avanzar los veleros y para hacer
girar los molinos de que producen electricidad. Pero cundo sopla muy fuerte puede volverse peligroso y provocar
tempestades que destruyan pueblos y ciudades enteras.
• El aire es como un mago maravilloso que está en todos lados, aunque no lo podamos ver.
3. • DON LALO
• En un pueblo lejano vivía un señor que tenía una tienda. Se llamaba don Lalo y tenía muy mal genio.
• Cuando un niño iba a comprar caramelos o galletas, se los aventaba, le gritaba y le daba lo que quería y el niño no
podía reclamar nada.
• Por eso, a los niños no les gustaba que sus mamás los mandaran a comparar a la tienda de don Lalo; Siempre les
daba menos de lo que pedían y luego sus mamás los regañaban.
• Un día varios niños del pueblo fueron a jugar al rio y vieron que un viejito se estaba ahogando; lo salvaron entre
todos y el viejito les dio las gracias y les dijo que por ser tan buenos niños les iba a conceder un deseo, el que ellos
pidieran.
• Los niños le contaron lo que sucedía con don Lalo y le pidieron al viejito que le quitara el mal genio. Este les dijo
que ya no se preocuparan, que desde ese momento don Lalo siempre iba a estar de buen humor.
• Y así fue; que desde ese día, los niños iban a comprar a la tienda de don Lalo, él siempre los trataba muy bien y
hasta les regalaba dulces o les daba más de lo que ellos le pedían.
• Cuando los niños buscaron al viejito para darle las gracias ya no lo encontraron; pero siempre lo recordaron por
haberles concedido su deseo.