El documento describe la estructura del marco de buen desempeño del directivo, el cual se compone de dominios, competencias y desempeños. Los dominios son áreas específicas del actuar directivo que influyen en el desarrollo como un todo. Las competencias implican saber hacer en contexto con compromiso y responsabilidad. Los desempeños son las acciones observables de los directivos que evidencian el manejo de las competencias.