2. GRACIA INCREADA Y GRACIA CREADA
• La gracia increada es Dios mismo inhabitando en nosotros
• La gracia creada es el efecto de esa Presencia en nuestras vidas
• ¿Quién te da la gracia creada? La increada
• Ejemplo: el ciego de nacimiento está ante Jesucristo (gracia increada: sin
principio ni fin y con todos los atributos de Dios) y él le da la vista (gracia
creada: un don temporal que refleja a Dios en el tiempo y circunstancia de la
vida de una persona)
3. GRACIA SANTIFICANTE Y GRACIA
HABITUAL
• Toda la gracia es santificante pero se llama especialmente
así a la que recibimos por los sacramentos.También se
consideran las virtudes teologales (fe, esperanza y amor) y
los dones del Espíritu Santo. (ciencia, sabiduría, consejo,
entendimiento)
• La gracia habitual es el efecto de la gracia santificante que
se hace una forma de pensar, sentir, actuar y ver el mundo
desde Dios. Se trata de las virtudes que se ponen en acto
en la vida.
4. GRACIA ACTUAL
• Es la gracia puntual y concreta que el fiel recibe para
realizar algo determinado: una inspiración de bondad,
la palabra de alguien que nos ayuda, un evento que nos
acerca a Dios de forma especial o inusitada.
• Es la fuerza que Dios nos da para afrontar una
situación concreta. Se pone en acto en un momento.
5. ¿QUÉ ES LA GRACIA SANTIFICANTE?
• Es la presencia de Dios en la vida humana. La razón de ser de la
gracia es la salvación.
• Es un don sobrenatural, interior y permanente que Dios nos
otorga, por mediación de Jesucristo, para nuestra salvación.
• Don sobrenatural porque supera la naturaleza humana.
• Don permanente porque mora en el alma mientras está sin
pecado mortal.
• Solo Dios da la gracia santificante por los méritos de Jesucristo.
6. LA VIDA SOBRENATURAL
• La gracia santificante comunica a nuestra alma la vida sobrenatural que es
una participación de la vida divina.
• Esta vida divina no le es natural al hombre, le es añadida y eleva su
naturaleza.
• La gracia santificante hace al alma capaz de conocer a Dios como El se
conoce, de amar como Él se ama, de vivir su vida divina.
• La vida sobrenatural no tiene fin, es la más perfecta y la única que importa.
• La vida sobrenatural comienza con el bautismo y está al alcance de todos.
7. SANTIDAD Y JUSTICIA
• La gracia santificante nos santifica y justifica, purifica el
alma, borra los pecados mortales y la pena eterna.
• La gracia santificante renueva el alma
• La belleza del alma en estado de gracia participa de la
infinita hermosura de Dios.
8. HIJOS DE DIOS
• La gracia nos hace hijos de Dios.
• Esta filiación divina es algo intermedio entre la filiación natural y
la filiación adoptiva.
• Dios tiene un sólo Hijo por naturaleza.
• Por Él Dios nos hace partícipes de su naturaleza y de su vida
propia.
• Nosotros somos hijos por adopcion pero no por naturaleza
9. HERMANOS DE CRISTO
• Por la gracia santificante, somos hijos de Dios con
Jesucristo; en consecuencia, Cristo es realmente hermano
nuestro.
• Debemos tener confianza ilimitada en Cristo, en lo que
respecta a nuestra salvación, a nuestros padecimientos y a
nuestros negocios temporales.
• Cristo padeció y murió por conseguir nuestra salvación.
10. HIJOS DE MARÍA
• La gracia santificante nos hace hermanos de Cristo; en
consecuencia, la madre de nuestro hermano es nuestra
madre.
• Si María es madre de la Cabeza del Cuerpo Místico de
Cristo, es madre de los miembros, nuestra madre.
• Madre de Cristo lo es según la naturaleza; madre nuestra,
lo es según la gracia.
• María es medianera universal en la obtención y en la
distribución de las gracias divinas.
• Cristo nos rescató del pecado por el consentimiento de
ella.
11. TEMPLOS DE LA TRINIDAD
• Cristo dijo: Si alguien me ama, mi Padre le amará y vendremos
a él, y estableceremos dentro de él nuestra morada (Jn 14, 23).
• El alma en estado de gracia es comparable a un pesebre, a
un copón, a un templo y a un cielo vivo.
• La presencia de Dios en nosotros origina una intimidad
real. La intimidad consiste en hablarle con familiaridad. Esta
intimidad es fácil, es un deber de cortesía, disminuye las
tentaciones y el ascendiente del pecado, consuela y
conduce a la oración.
12. LA ORACIÓN Y LA GRACIA
• La oración es indispensable es la respiración
sobrenatural del alma.
• Por ella pedimos perdón a Dios por nuestros pecados e
imploramos su gracia.
• La oración es omnipotente; la oración bien hecha lo
recaba todo del corazón de Dios.
• Algunos rezan sin conseguir lo que piden porque rezan
mal: sin intención, sin humildad, sin confianza, sin
perseverancia o piden cosas inútiles o perjudiciales a la
salvación.
• Se debe rezar con atención, con humildad, con confianza
y con perseverancia.
13. EUCARISTÍA: LA GRACIA DE TODAS LAS
GRACIAS
• El sacrificio de la Misa es el mismo que el de la cruz: es el mismo sacerdote y la
misma ofrenda que se diferencia en el modo de ofrecer el sacrificio.
• En la Misa nos unimos con la intención del sacerdote que es la de Cristo mismo.
• La Comunión nos une a Cristo, nos une unos a otros, aumenta la gracia santificante,
condona los pecados veniales y las penas temporales, nos preserva de los pecados
mortales, disminuye la fuerza de la concupiscencia y favorece el dominio sobre las
pasiones.
• Para comulgar dignamente se requiere estar en ayunas, hallarse en estado de gracia y
tener intención recta.
• Para comulgar con fervor es preciso prepararse con cuidado y dar gracias.