El documento describe el caso de un paciente de 40 años que sufrió una luxación de la base del quinto metacarpiano tras una caída. Fue diagnosticado mediante radiografías y tratado con una reducción y fijación con agujas introducidas percutáneamente, así como una férula de yeso. Al mes se retiró la inmovilización y las agujas, recuperando la movilidad completa a los dos meses sin dolor ni pérdida de fuerza.