2. Paso 1:
Ahora que tenemos un teclado
comenzamos por quitarle sus soportes, es
decir, quitarle los tornillos.
3. PASO 2:
Con cuidado retiramos las teclas sin botar
ninguna, y debajo de estas aparece un conjunto
de tres laminas plásticas en donde cada una de
ellas tiene una serie de caminos hechas de un
material conductor.
4. Todas las pistas que tienen estas láminas se
conectan a una plaqueta que contiene el
microchip que controla al teclado.
Cuando presionas una tecla, hace que la lámina
con contactos que está arriba toque a la que
está debajo cerrando así el circuito.
Luego esa señal se transmite a la plaqueta que
la interpreta y la envía por el cable hacia la
computadora.
5. PASO 3:
Con cuidado retiramos las laminas
conductoras del cable que envía al
computador cada tecla. Y si es necesario o
de utilidad limpiarlas con un trapo suave
6. PASO 4:
Debajo de ellas se encuentran una serie de
gomitas, estas al ser presionadas da una
señal que es transmitida a las laminas
plásticas
7. Estas gomitas plásticas cumplen dos
funciones, la de devolver la tecla a su lugar
una ves presionada (como si fuera un
resorte) y la otra es la de presionar los
contactos.
8. PASO 5:
Una vez todo este reparado o limpio, se
colocan en orden según el que tengan.
Podría ser:
Las gomitas
Las laminas plásticas
Las teclas
La tapa
9. Cuando todo este listo se colocan de
nuevo los tornillos, se ajusta y se conecta
de nuevo a la computadora.