Manifiesto por los bosques de ribera en el entorno de Zaragoza
1. MANIFIESTO POR LOS BOSQUES DE RIBERA DEL ENTORNO DE ZARAGOZA
LAS DEPURADORAS NO LO SOLUCIONAN TODO
Muchas personas consideran que los problemas asociados al agua y a los ríos quedan
resueltos con la instalación de depuradoras y eliminación de vertidos, pero la realidad es
mucho más compleja: agua que se recibe con mala calidad y requiere un elevado gasto en
potabilización, residuos que vertemos de forma indiscriminada por los desagües y que no
son eliminados por las depuradoras, sólidos de todo tipo que las aguas arrastran flotando…
LOS SOTOS-VERTEDERO (O BIEN SIMPLEMENTE: “SOTOS LLENOS DE RESIDUOS)
Las mejanas y los sotos a la salida de Zaragoza almacenan estas decenas de toneladas de
basura, que el río deposita en forma de capas entremezcladas de residuos y manto vegetal,
como si de un vertedero se tratase. Si hiciéramos una cata, encontraríamos varios metros
de profundidad de residuos en estos sotos y mejanas del Ebro. Todo esto es consecuencia
y exponente de nuestra manera de producir y consumir.
UN ECOSISTEMA CON INFINIDAD DE FUNCIONES
Sin embargo, a pesar de esta contaminación y de la presión urbanística, los bosques del
Ebro y del Gállego en la ciudad de Zaragoza atesoran una riqueza y una belleza
inigualables, desconocidas para muchos zaragozanos. Pero tan importante como la belleza
de estos bosques de ribera es su contribución a la funcionalidad y sostenibilidad del
ecosistema fluvial. Entre otras cosas, mejoran de forma sustancial la calidad de las aguas a
su salida de Zaragoza, y éstas a su vez mejoran la calidad de nuestros bosques.
PROPUESTAS PARA MEJORAR LOS BOSQUES DE RIBERA
Pero para que los sotos sigan realizando todas estas funciones, es necesario mantenerlos
en un estado óptimo. En primer lugar, habría que mejorar la unión entre los sotos y galacho
estableciendo corredores biológicos de flora y fauna, así como permitir la entrada suave de
caudales a los galachos, etc. Por otro lado, estos lugares públicos aguas abajo de la ciudad
tienen que constituir territorios de libertad del río, con el fin de mitigar los daños que las
inundaciones pueden provocar.
También son necesarios la ampliación del Camino Natural de la Alfranca a la margen
izquierda del Ebro en Movera como se planificó en un principio en el proyecto del camino, la
retirada de escombreras existentes en la ribera de Movera y la eliminación de los colectores
de aguas residuales que vierten al Ebro en esa margen.
Así mismo, es fundamental respetar la zonificación de usos que marca el PORN en la
Reserva Natural de La Alfranca, realizar estudios de la evolución de la fauna y su
afectación por las nuevas construcciones, estudios de la evolución de los sotos, etc.
EL IMPRESCINDIBLE PAPEL DE LA ADMINISTRACIÓN
Todo ello debe ir acompañado de una figura de protección para los 20 sotos existentes en
el Término Municipal de Zaragoza. En el Año Internacional de los Bosques, solicitamos al
Gobierno de Aragón este reconocimiento que al menos salvaguarde la integridad de estos
espacios, así como una gestión adecuada de los mismos y de su área de influencia. Sólo
así tendremos unos bosques de ribera en buenas condiciones y unas aguas de mejor
calidad.