2. Cualquier consumo de alcohol durante la adolescencia se considera abusivoSi se consume alcohol incluso de forma moderada, tiene una repercusión importante sobre el equilibrio nutricional, el crecimiento y desarrollo. El consumo de alcohol también está asociado a un déficit cognitivo que empeora a lo largo del tiempo, por ejemplo, disminuye la memoria verbal y no verbal, así como la capacidad para entablar conversaciones con sentido. Hacer de un hábito el tomar alcohol altera la concentración de proteínas en la sangre producidas por el hígado, las cuales están implicadas en funciones como el transporte del hierro o del colesterol en la sangre
3. El alcohol es un depresivo; esto significa que hace más lento el funcionamiento del sistema nervioso central. Bloquea algunos de los mensajes que intentan llegar al cerebro, altera las percepciones, emociones, movimientos, vista y oído.
4. En exceso el alcohol puede provocar cambios más grandes en el cerebro y producir una intoxicación. La gente que bebe demasiado pierde el equilibrio, coordinación y tiene dificultad al hablar. La intoxicación puede hacer que los tiempos de reacción se vuelvan mucho más lentos; por eso es que se aconseja no conducir cuando uno bebe.Si se toman grandes cantidades de alcohol en un lapso breve, puede haber envenenamiento por alcohol; el primer síntoma son los vómitos violentos, porque el cuerpo intenta deshacerse del alcohol. Otras consecuencias son la somnolencia excesiva, pérdida de conciencia, dificultades para respirar, una peligrosa baja del azúcar en sangre, convulsiones e incluso la muerte
5. El alcohol puede afectar de 2 maneras bien diferenciadas a nuestro organismo. Por un lado tenemos la intoxicación aguda, que se produce cuando una persona consume de forma brusca, en pocas horas, una cantidad excesiva de alcohol. En este caso se afecta sobretodo el sistema nervioso central, o sea, el cerebro. Se produce una inhibición del mismo que en casos en los que se llega a un consumo de alcohol muy elevado puede llevar al coma y a la muerte. Si el consumo de alcohol es crónico, o sea, de forma continuada durante largo tiempo y en cantidades elevadas, tendremos problemas que afectarán sobretodo alhígado, aunque también se pueden afectar otros órganos, como el cerebro o el corazón.
6. Nuestro organismo o metabolismo está preparado para poder metabolizar el alcohol consumido por lo que, cantidades pequeñas del mismo, son neutralizadas por el hígado sin que produzcan problemas. En el caso de que el consumo sea elevado, nuestro hígado comenzará a tener problemas con la metabolización del mismo. Se alterará su composición y acumulará grasa. A esta fase se le llama fase de hígado graso, que se puede observar fácilmente mediante una ecografía