SlideShare una empresa de Scribd logo
1 de 17
Descargar para leer sin conexión
ACTOR: HAROLD THEODOR RONNERBECK
ESCUDO Y SELLO NACIONAL
ESCUDO Y SELLO NACIONAL
a) La heráldica preceptúa específicamente que un escudo, en su fase de creación puede tener
variadas formas, que se conciben en base a las influencias predominantes en el ente a blasonarse
o en otros casos, en formas propias; pero una vez instituidos los Escudos, el todo, forma y
contenido como adornos, deben respetarse siempre; salvo que por expresas leyes competentes,
sean modificados o instituidos nuevos escudos!
Sabemos también por la Constitución Nacional, que la forma de nuestro Escudo Nacional es
circular, y por consiguiente no de forma ovalada, elíptica, polaca, etc.
Al desconocimiento del blasón se unieron otros hechos que aumentaron la anarquía de nuestra
Escudería, y en tal relación, el año de 1903 marca un año infeliz para la Armería Paraguaya.
Efectivamente, en ese tiempo en la “Revista de Instrucción Primaría” de difusión oficial, vieron a
luz pública una serie de fantasías heráldicas literarias, entre las que se entresacan, por ejemplo,
con relación a la forma de nuestros escudos:
“DIRECCION PRACTICAS PARA LAS CLASES
EN LOS GRADOS SUPERIORES:
"Presentará a la clase, dibujadas en el pizarrón varias figuras limitadas por curvas, como ser:
círculos, elipses, óvalos y ovoides. Hará notar sus diferencias y analogías, llamando la atención,
especialmente, sobre la elipse, haciendo ver que de las curvas cerradas es la más graciosa y que
su aplicación está generalizada en casi la mayor parte de los escudos de las naciones
americanas".
En seguida se procederá a enseñarles su construcción con la limpieza y exactitud. Se les hará
observar también que hay otra figura semejante a la elipse, que es la llamada óvalo, pero que sus
contornos no son tan proporcionados, ni tan elegante como los de la elipse".
Se constata así que se enseñaba oficialmente hasta incluso todavía en la década del 40, que a
nuestro blasón debía dársele una forma elíptica antes que oval o circular por "que de las curvas
cerradas es la más graciosa" prescindiendo de la propia Constitución Nacional que siempre
impuso la forma circular!
Es inexacto además que "la mayor parte de los escudos de las naciones americanas" sean de
forma de una elipse, lo cual demuestra a las claras lo aventurero de la incursión de su autora en
ésta materia".
En dicha publicación, con idénticas ligerezas se refería también a los demás atributos de nuestros
blasones. Su autora, Educacionista argentina Prof. Corina Echenique, fue merecedora del
reconocimiento oficial por su labor en tal sentido!
El término circular se describe en diccionarios y enciclopedias de la lengua española y
empleados naturalmente en la heráldica, como sigue:
.
Circular: De figura de círculo.
Círculo: Superficie plana limitada por una circunferencia.
Circunferencia: Línea curva cerrada, cuyos puntos están todos a igual distancia de un punto
medio interior llamado centro.
.
Queda así demostrado y comprobado que la forma de nuestro Escudo Nacional es únicamente
circular, y cualquier otra forma que se le dé es irregular y descalificante.
b) Palma y Oliva: Así como así, Palma y Oliva a secas, no conforman la verdadera figura
heráldica de nuestro Escudo Nacional, pues bien sabido es que ni la Palma ni la Oliva son
especímenes de la flora nacional, y si fueron instituidas en nuestro Escudo Nacional, a semejanza
de otros países, fue para simbolizar precisamente a través de figuras heráldicas universalmente
empleadas, la significación que se deseaba dar a nuestros escudos.
En ese sentido, la rama de Palma y la de Oliva no son en nuestro Escudo Nacional dos ramas
separadas de manera a interpretarse que representa cada una de ellas únicamente cosas o casos
independientes. Por el contrario, y confirmando lo que aseveramos en el blasonado de este
escudo, ellas conforman la: CORONA DE OVACION instituida al valor y hazañas militares del
pueblo paraguayo; encontrando en la propia Constitución Nacional su fundamento, pues leemos
en ella:
"...una palma y una oliva entrelazada en el vértice...'' es decir, como se arman heráldicamente las
coronas de ovación. Aquí igualmente nos referimos a la explicación castiza sobre el término:
Entrelazar: Cruzar una cosa con otra.
Ejemplo: entrelazar mimbres.
Esta descripción, traducida gráficamente, produce la siguiente figura, coincidente en un todo con
las normas del blasón para formación de las coronas de ovación:
.
A más de confirmar la conformación cae la
Corona de Ovación con la Palma y la Oliva, el término entrelazar anula automáticamente el
moño que por mera concepción artística le han aplicado a nuestro Escudo Nacional; pues el
moño, del color que fuere, es siempre una figura artificial que, no se halla instituida por nuestra
Constitución, ni requerida por los preceptos heráldicos para este tipo de corona.
Y para mayor gloria y dignificación de estos Símbolos Patrios, queda así conformada la
CORONA DE OVACION, también denominada "Oval", que sí es una figura heráldica, siendo
Insignia Honorífica y de Dignidad, como reconocimiento al valor y hazañas militares del pueblo
Paraguayo; a semejanza de las conferidas a los militares romanos festejando sus hazañas bélicas.
Lamentablemente, el prolongado ayuno heráldico en que se hallaba postrado nuestro país,
permitió que se estuviera escamoteando en todo tiempo a nuestro Escudo Nacional esta figura
heráldica, símbolo de Honor y Dignidad!
Naturalmente, a su vez, como se hiciera notar en la introducción, la Palma y la Oliva que
conforman la Corona de Ovación, simbolizan también entre otros, la Justicia y la Paz
respectivamente; que en el reverso de nuestra bandera el escudo trae escrita en forma de divisa
"Paz y Justicia", asociación que convierten a estos Símbolos Patrios en las así llamadas "Armas
Puras", declaradas así cuando poseen cuerpo y alma. Es decir cuando está expresada una divisa
de un blasón en palabras y en símbolos respectivamente.
c) Sigue diciendo el Art. 4°, 1) de nuestra Constitución:
"... resaltando en medio de ellas una estrella. . . ".
Heráldicamente, cuando se indica una estrella, siempre se la señala con cinco puntas; caso
contrario debe estar expresamente señalado su número, pues según ellas, varían los significados.
Además, nuestra estrella no debe dibujarse como en relieve, ya que todo dibujo heráldico es
plano!
Al blasonar nuestro Escudo Nacional, indicamos la simbología y representación de esta estrella;
significando además en las Fuerzas Armadas, al Estado Mayor.
Aquí también se constatan irregularidades en las muchas versiones de este Símbolo Patrio.
Efectivamente, la Constitución establece:
".. en medio de ellas..." (refiriéndose a la colocación de la estrella en medio de la Palma, y la
Oliva) lo cual obliga heráldicamente a abismar la estrella en el escudo es decir, sin que sus
puntas toquen a ninguna de las figuras o piezas que la circunvalan. Además, deben desecharse
las versiones con la estrella terrazada, es decir, no debe pintarse una terraza detrás o debajo de la
estrella, pues para ella debe estar expresamente señalado en la letra de su institución o requerido
por el blasón.
Respondiendo a las preguntas del porqué en la versión de color, en la descripción y su
correspondiente ilustración, aparece rodeando a la estrella un cielo de azur, citemos que, así
como en algunos casos la ciencia del blasón prohíbe o excluye figuras o piezas no instituidas; en
otros casos definidos como el nuestro, con sus preceptos viene en ayuda de la Armería para
solucionar disidencias como la que se presenta en nuestro caso, cual es la estrella de oro (metal)
sobre campo de plata (metal).
Se preceptúa básicamente en el blasón que no se podrán aplicar metal sobre metal ni color sobre
color, constituyendo lo contrario una verdadera ilegalidad heráldica, capaz de descalificar
honoríficamente a todo escudo en que aparezca tal situación, con la única excepción, se dice, y
universalmente aceptada, del Escudo de la Ciudad de Jerusalén.
Es admitido y necesario que el artista interprete acabadamente la letra de la institución de un
escudo y que al ilustrar un Masón, configure las piezas y Figuras de tal forma que no contra
vengan dicho precepto; y en nuestro caso precisamente es que se deberá pintar la estrella rodeada
de un cielo de azur, para salvar tal situación. Reglamentada así por la Ley, esto quedará
definitivamente salvado.
A su vez, la superficie de nuestro Escudo Nacional, el campo es de Plata, que a más de oro, es el
otro metal heráldico. Por otra parte, la estrella de nuestro Escudo Nacional no es reluciente,
refulgente o radiante, pues en tal caso debe estar expresamente señalada así, ya que los rayos de
estrellas tienen su simbología bien definida, según su cantidad.
d) Nos referimos ahora a la pieza honorífica de primer grado de nuestro Escudo Nacional, cual es
la ORLA, expresamente instituida por la Constitución Nacional del Paraguay. En efecto, leemos
en ella:
" ... y en la orla una inscripción que dice: República del Paraguay..."
Como puede comprobarse, la orla está instituida por la propia Constitución, y el artículo "la"
antepuesto a "orla", es determinante, quedando así demostrado que nuestro Escudo Nacional
carga una pieza heráldica honorífica de primer grado que es la ORLA, la única pieza honorífica
de éste símbolo, pero no por ello menos importante; lamentándose que por tanto tiempo le fue
negada en las versiones conocidas, despreciándose con ello la verdadera función de esta pieza
honorífica y la posición que le corresponde con ella a nuestro Escudo Nacional.
Para aclarar esto de la Orla, señalaremos las diferencias de una tal pieza honorífica con relación a
la Bordura y a la inscripción directa del título de nuestra Nación directamente en el campo del
escudo, como suelen presentarse estos símbolos con más frecuencia:
.
ORLA: Pieza honorífica de primer grado,
puesta dentro del escudo y separada de los bordes de éste otra tanta distancia como ella tiene de
ancho, y que es la doceava parte del escudo, En casos de escudos circulares se añade compuesta
de dos círculos concéntricos.
(Pieza expresamente instituida por la Constitución y que simboliza "Protección"; en este caso
Protección honorífica al título nacional).
.
.
BORDURA (Imagen superior): Pieza honorífica de primer grado, que rodea el ámbito del
escudo por lo interior de él, tomando la sexta parte de su latitud.
(No instituida a nuestros símbolos por la Constitución. Representa la cota de malla de los
caballeros).
INSCRIPCIÓN EN EL CAMPO (imagen inferior): La heráldica preceptúa básicamente que
no podrá aplicarse inscripciones, abreviaciones, lemas, divisas, empresas, motes, voces ni gritos
de guerra en el campo de los escudos.
En las versiones de color, las piezas heráldicas no dejarán ver el campo del escudo a través de
ellas.
.
e) Necesitándose reglamentar la versión de color de nuestros Símbolos Patrios, es necesario
establecer las normas de dónde partir, para las tales ejecuciones en color. En tal relación, no se
justifica la inscripción en sable (negro) del título de la Nación, por ser el sable símbolo de
sufrimiento, muerte, dolor, aflicción, tristeza y luto, por consiguiente no es el esmalte requerido.
En la heráldica eclesiástica esto sería diferente, ya que el negro en esa jurisdicción simboliza fe,
esperanza y resurrección futura, pero que no es nuestro caso.
En cuanto al oro de la inscripción del título Nacional y la divisa, dos fundamentos heráldicos
legitimizan su empleo en nuestros blasones:
1 No puede ser de color, pues la Orla ya es de gules; por consiguiente debe ser de metal (recordar
precepto básico: no se empleará metal sobre metal ni color sobre color).
2 Siendo en nuestro caso la inscripción del título de una Nación, corresponde el primer metal de
la gradación heráldica: Oro, que es el único metal heráldico que simboliza la Soberanía, el poder,
la grandeza de la nación, esplendor y gloria!
Siendo en nuestros Símbolos Patrios, la Orla símbolo de Protección Honorífica al título
Nacional, únicamente puede aplicarse el primer esmalte de la escala heráldica cual es gules; por
hallarse exclusivamente en este color la simbología de protección total, es decir, inclusive con
derramamiento de sangre! Ningún otro metal ni esmalte heráldicos reunen la simbología que
requiere esa inscripción del título Nacional ni de la Orla.
Quedan así demostrados los fundamentos que establecen la utilización del gules en la Orla y el
oro en la inscripción del Título de nuestra Nación, en las ejecuciones de color, en nuestros
blasones.
En las versiones de blanco y negro, impresas ó pintadas y las ejecuciones metálicas, se admiten
desde luego los dibujos simplemente perfilados; no así las versiones educativas en blanco y
negro, que deben representar los metales y colores originales que se reglamenten; los que
deberán confeccionarse en base a las reglas heráldicas relativas a la señalización de los colores y
metales, señales gráficas creadas por el Jesuita Silvestre Pietrasanta, universalmente aceptadas y
empleadas.
f) Señalaremos seguidamente la irregularidad del empleo de la Filiera en nuestros escudos, ya
sea en las versiones en color como en las de blanco y negro. Se trata en efecto, de la zona
orillada en que los dibujantes y artistas colocan generalmente el tricolor patrio.
Particularmente hallamos una tal colocación del tricolor Patrio de buen gusto, desde el punto de
vista artístico; pero el buen gusto tiene sus limitaciones en la Armería, y más aún cuando se trata
de Escudos Nacionales, y para colmo empleando piezas honoríficas disminuidas.
.
Efectivamente, la Ciencia Heráldica establece para la: Filiera: Pieza Honorable Disminuida
Bordura disminuida a la tercera parte de su anchura ordinaria.
(Pieza no instituida desde luego por la Constitución Nacional
SÍMBOLOS PATRIOS
.
A mi esposa Nélida Meza y a mis hijos
Ruth Nélida, Christian Jorge y Carlos Alberto
.
AL LECTOR:
La sensibilidad patriótica hacia la dignificación de nuestros SÍMBOLOS PATRIOS se manifiesta
con fervor en todos aquellos que se interesan por la problemática que los envuelve.
En tal sentido, es propicio resaltar, la favorable disposición de las siguientes personas:
- Excmo. Sr. Ministro de Educación y Culto Dr. Don Raúl Peña por el suministro de papeles y
cartulinas,
- Jefe de Publicaciones de las Fuerzas Armadas de la Nación y Presidente de la Comisión de
Heráldica Militar del Comando en jefe, Cnel. DEM., Don Jorge R. Guggiari por la impresión de
esta edición.
A ellos mi especial reconocimiento, en el entender que con la publicación de estas
investigaciones, legisladores y dignatarios nacionales contarán con un medio informativo
adecuado para un preciso estudio y tratamiento del proyecto de Ley que caracterice y determine
el uso de nuestros Símbolos Patrios. EL AUTOR
PREFACIO
Durante los primeros años de vida de la Academia de la Historia Militar del Paraguay, cuya
Presidencia a la sazón la ejercitaba, recibimos el cartapacio que contenía las investigaciones
concernientes a nuestra insignia, escudos, sellos y demás emblemas nacionales, llevadas a cabo
por el consagrado heraldista Don HAROLD RONNEBECK, que las consideré de inicio, como
de gran valor y de alto interés patriótico.
Por tal motivo, lo alenté y apoyé en el sentido de que dichos trabajos sean difundidos y
publicados de ser posible, con la aquiescencia del Excmo. Sr, Presidente de la República y
Comandante en Jefe de las FF.AA. de la Nación, General de Ejército Don Alfredo Stroessner,
hasta cuyo despacho accedimos, con el referido propósito.
Ahora, en la inminencia de concretarse esa tan deseada finalidad, que pretende poner término a
la anarquía reinante en el uso y abuso de los sagrados símbolos de la Patria, formulo mis más
fervientes deseos porque, los ejemplares de esta limitada edición, contribuyan eficazmente para;
que por Ley de la República, se reglamente definitivamente sus características, conforme a sus
legítimos títulos determinando además,; el adecuado y justo empleo de los mismos, por
demandarlo así el más elemental acervo ciudadano.
CEFERINO VEGA GAONA , Gral. División (SR)
INTRODUCCIÓN
Nuestra Nación posee junto a su patrimonio cultural un cúmulo ingente de valores morales,
espirituales e intelectuales, conformadores del conjunto de caracteres específicos que la
distinguen de las demás naciones, y que por sí mismos sirven a través del tiempo, como fragua
modeladora que ha forjado nuestra nacionalidad.
En tal sentido, como patrimonio patrio, nuestros escudos y sellos ocupan un sitial de
preponderancia, puesto que ellos constituyen la imagen de la Nación, de este país pletórico de
nacionalismo y fervor patriótico de este suelo defendido por prohombres que con sus acciones
heroicas hicieron posible el surgimiento del Paraguay, como un Estado Libre y Soberano.
Pero he aquí que nuestros Símbolos Patrios, por desconocimiento de la materia, entre otros, antes
de ser respetados v distinguidos, a veces son desnaturalizados, desvirtuando la verdadera imagen
de nuestra Nación; admitiéndose, naturalmente, que los mismos siempre han ejercido una
bienhechora influencia sobre todos aquellos que en todo tiempo los han venerado y defendido.
A raíz de todo ello, presentamos a través de esta publicación, un extenso sondeo del material que
permaneciera oculto por largo tiempo y cuyo tratamiento por ende descuidado, y que ha estado
ahondando cada vez más la problemática de nuestra Armería.
Las labores realizadas a través de muchos años de cuidadosa investigación con respecto a los
Escudos y Sellos de nuestro país, han corroborado sin embargo que, conforme a la Carta Magna
que los instituyó, nuestros blasones son tan y muy dignos como los más, tratándose en el
concierto de la Heráldica Nacional de Occidente, de las así llamadas "Armas Puras"; por
componer con los atributos de los dos escudos de nuestro país, unos blasones con "alma y vida,
que resulta cuando se presenta la divisa Nacional en forma de leyenda y al mismo tiempo de
manera simbólica, es decir, que, a "Paz y Justicia" inscripta en el escudo del reverso del pabellón
se asocia la alegórica Oliva y Palma del anverso, que en ese orden también simbolizan Paz y
Justicia.
En cuanto a la problemática de la caracterización y uso de nuestros símbolos en el transitar del
tiempo, con estas investigaciones se ha echado luz sobre situaciones desconocidas, cotejándose
los términos constitucionales con la aplicación de los preceptos heráldicos correspondientes;
mereciendo la importante atención y el profundo interés de las más altas Autoridades Nacionales,
quienes con su más puro fervor patriótico, expresaron así el pronunciamiento que seguramente
permitirá a la Ley reglamentar las características de los Símbolos Patrios y a determinar su uso
adecuado.
En tal sentido, nos honramos en manifestar que el Excmo. Señor Presidente de la República y
Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas de la Nación, General de Ejército Don Alfredo
Stroessner ha declarado su total apoyo a esta acción tendiente a la dignificación de nuestros
Símbolos Patrios; y a quien hemos dedicado como un modesto homenaje el original de estas
investigaciones, en oportunidad de celebrar la ciudadanía el vigésimo aniversario de su ejercicio
de la Primera Magistratura de la Nación.
Otros ejemplares de este trabajo también han encontrado igual atención por parte de altas
Autoridades Civiles y Militares e Instituciones Nacionales, entre las que me permito mencionar:
- Excmo. Sr. Presidente del Poder Legislativo
- Dr. Don Juan Ramón Chaves
- Excmo. Sr. Ministro de Defensa Nacional Gral. Div. (SR) Don Marcial Samaniego
- Excmo. Sr. Ministro de Educación y Culto Dr. Don Raúl Peña
- Excmo. Sr. Ministro de Hacienda Gral. DIM (SR) Don César Barrientos
- Honorable Academia Paraguaya de la Historia
- Honorable Academia de la Historia Militar del Paraguay
- Honorable Círculo de jefes y Oficiales Retirados de las Fuerzas Armadas de la Nación, como
igualmente Oficiales Generales de la Nación y otros Dignatarios.
Cábenos citar con satisfacción aquellas memorables e importantes reuniones -de las que
publicamos sus actas- llevadas a cabo por iniciativa del Circulo de Jefes y Oficiales Retirados de
las Fuerzas Armadas de la Nación representado por el Presidente del Departamento Técnico del
Salón de Bronce el Gral. Brig. (SR) Don Francisco Vega Gaona, sus Miembros Cap. Frag. (SR)
Eloy Recalde, Cap. Frag. (SR) Bernardino Duarte y el Cap. (SR) Juan E. Melgarejo,
conjuntamente con el Cnel. Manuel W. Chaves, Director del Instituto de Historia Militar del
Ministerio de Defensa Nacional; el Sr. Carlos Pussineri Scala, Director de la Casa de la
Independencia; el Tte. 1º de Marina (SR) Don Juan B. Gill Aguínaga, Presidente del Instituto de
Numismática del Paraguay; el Dr. Marcos A. Laconich, Presidente de la Academia Paraguaya de
la Historia; el Dr. J. Antonio Ramos, Historiador Nacional y el Autor, en torno a estas
investigaciones, las que fueron objeto de estudio y confrontaciones; resolviendo el Presidente del
Círculo de Jefes y Oficiales Retirados de las FF.AA. de la Nación y Senador Nacional Cnel.
DEM (SR) Don Juan Manuel Torres Villanueva buscar con esos antecedentes, la pertinente
reglamentación por la Ley que la propia Constitución Nacional prevé. De esa forma, estos
excelsos historiadores nacionales y una muy respeble entidad, desarrollaron una fructífera acción
en pro de la dignificación de los SÍMBOLOS PATRIOS.
El interés de nuestras instituciones por esta cuestión de nuestros blasones constitucionales, se
puede observar igualmente en publicaciones de entidades importantes de nuestro país, como ser,
IPVU, Revista Militar, Editorial FVD, Bco. Nacional de Fomento, Editorial Hermes, campaña
radial de Radio Asunción, y otros.
Siendo los SÍMBOLOS PATRIOS, patrimonio de todos los Paraguayos, nadie puede sin
embargo ahora alzarse con la autoría de la versión constitucional, que corresponde únicamente al
CONGRESO GENERAL EXTRAORDINARIO DE 1842, durante la sabia conducción de Don
CARLOS ANTONIO LÓPEZ.
Esta publicación ofrece al juicio crítico constructivo, el deseo de aportar datos para un mayor
conocimiento de nuestros auténticos ESCUDOS Y SELLOS DEL PARAGUAY.
HAROLD RONNEBECK
REUNIONES DEL DEPARTAMENTO TÉCNICO DEL SALON DE BRONCE
DIA 20-VI-75
ACTA N° 4 - Las: 17,30 hs.
En la ciudad de Asunción, capital de la República del Para-guay, reunidos en el local social del
Círculo de Jefes y Oficiales en Situación de Retiro de las FF.AA. de la Nación, los Señores
Miembros del Departamento Técnico del Salón de Bronce del Círculo, y presidido por su
Presidente el General de Brig. Don Francisco Vega Gaona y los Miembros Cap. de Frag, (SR)
Eloy Recalde, Cap. de Frag. (SR) Bernardino Duarte, Cap. (SR) Juan E. Melgarejo, el Coronel
de Cab. Res. Manuel W. Chaves, Señor Carlos A. Pussineri Scala, Director de la Casa de la
Independencia, Señor Tte. 1° de Marina (SR) Juan B. Gill Aguínaga y el señor Harold
Ronnebeck, Heraldista, a los efectos de definir la composición del escudo nacional que deberá
encabezar el Orden de Batalla del Ejército que actuó durante la guerra contra Bolivia en los años
1932-35, en vista de que hasta la fecha existe una verdadera anarquía a este respecto. Abre el
acto el General Gaona para expresar que., el Departamento Técnico, preocupado en cumplir
debidamente con todo lo referente a las representaciones simbólicas que deberá guardar el Salón
de Bronce, por cuanto su contenido tiene profundo sentido histórico cuya fisonomía no debe ser
alterada bajo ningún concepto; y que, teniendo en cuenta que nuestro escudo nacional, según es
usado en las instituciones tanto civiles como militares, en muchos casos no guardan relación con
lo determinado en nuestra Carta Magna, dando como resultado un heterogéneo grupo de
símbolos de los que el Departamento Técnico no quisiera a hacer uso para no caer en errores
fundamentales que no guardarían relación con la trascendencia de la obra emprendida; que, por
otro lado, tampoco existe una reglamentación de las disposiciones expresadas en nuestra
Constitución que nos sirva de orientación en la obra emprendida, razones por las cuales fueron
invitados los señores presentes para estudiar dicha situación. En el uso de la palabra el Heraldista
señor Ronnebeck, expresa, en primer término, "mi satisfacción -dice- por encontrarme reunido
con tan distinguidas personalidades a cuyo cargo están los trabajos del Salón de Bronce; y más
aún sabiendo que es el Círculo la promotora de la reunión para estudiar exhaustivamente lo
relacionado con nuestro escudo nacional". Prosigue haciendo un resumen técnico de la
composición de los diferentes signos de nuestro escudo, para afirmar, finalmente que, para hacer
uso de los símbolos que representan nuestro escudo, en forma correcta, el escudo de la República
debe fijarse a la izquierda del observador puesto frente a él; y el de Hacienda, a la diestra del
mismo, con la leyenda Paz y Justicia en forma distribuida; y no en el campo del escudo, como se
viene haciendo hasta la fecha. El Tte. 1° Gill Aguínaga expresa que coincide totalmente con lo
pormenorizado por el señor Ronnebeck con respecto a la posición de los símbolos de nuestro
escudo, y que la existencia de la anarquía en su uso se debe, precisamente, al hecho de que no
existe una reglamentación al respecto. En el uso de la palabra el Coronel Chaves expresa que el
Círculo debe elevar un Memorándum a las altas autoridades nacionales solicitando la
reglamentación de nuestro escudo, cuya importancia no debe escapar a nadie, pues el correcto
uso de los símbolos de la patria debe guardar relación estricta, en todas sus faces, con los
preceptos de la Heráldica, cuya vigencia es universal. Seguidamente es escuchada la opinión de
los demás señores presentes quienes coinciden totalmente con lo hasta ahora expresado al
respecto de los símbolos de nuestros escudos y su cabal posición de conjunto, aceptándose la
moción concreta del Coronel Chaves; pero antes se resuelve realizar otra reunión el día 26 del
corriente a las 17 horas, para lo que se extenderán invitaciones a importantes personalidades de
nuestras instituciones históricas, así como de, estudiosos de la materia. Sin otra cosa que tratar,
se levanta la reunión, siendo las 19.45 horas".
JUAN E. MELGAREJO
Cap. Transm. (SR) Secretario
DIA 26 DE JUNIO DE 1975
ACTA N° 5
"En la ciudad de Asunción, capital de la República del Paraguay, reunidos en el local social del
Círculo de Jefes y Oficiales en Situación de Retiro de las FF. AA. de la Nación, los Señores
Miembros del Departamento Técnico del Salón de Bronce del Círculo, y presidido por su titular,
el General de Brigada S R ., Don Francisco Vega Gaona y los Miembros Cap. de Frag. S. R.,
Eloy Recalde, Bernardino Duarte, el Cap. S. R . , Juan E. Melgarejo, el Señor Juan B. Gili
Aguínaga, Presidente del Instituto de Numis-mática del Paraguay, el Seòor Carlos Alberto
Pussineri Scala. Director de la Casa de la Independencia, el Doctor Marcos Laconich, Presidente
de la Academia Paraguaya de la Historia, el Dr.. Antonio Ramos, Historiador Nacional y Señor
Harold Ronnebeck; Heraldista Nacional, quienes se constituyen en Sesión a los efectos de dar
cumplimiento a lo dispuesto en la Sesión anterior, llevada a cabo el día 20 de los corrientes, para
tratar de definir lo relativo al Escudo Nacional y el trámite posterior a realizar. Abre el acto el
General Vega Gaona, expresando su satisfacción por la presencia de tan distinguidas
personalidades para estudiar los asuntos relativos a nuestro Escudo Nacional, principal
preocupación del señor Presidente del Círculo de Jefes y Oficiales en Situación de Retiro de las
FF. AA. de la Nación en especial; y del Departamento Técnico del Salón de Bronce en general,
por el hecho de que, en el panel central debe fijarse los dos escudos, el de la República y el de
Hacienda, símbolos de la Patria que hasta la fecha se viene usando en forma por demás anárquica
por lo incorrecta. A una pregunta del Doctor Laconich, usa de la palabra el Cap. Melgarejo
explicándole pormenorizadamente los deseos del presidente del Círculo y la preocupación del
Departamento Técnico, por cuanto el trabajo que se quiere realizar tiene importancia histórica, y
no sería el caso de reincidir en la anomalía explicada por el Gral. Vega Gaona, que es el de usar
o fijar en la cabecera del panel central el símbolo de nuestra Patria en forma indebida. En el uso
de la palabra el señor Ronnebeck, expone técnica y detalladamente sus conclusiones sobre lo que
debe ser y la forma de fijar nuestro escudo nacional, recomendando que se redacte un
cuestionario con todo lo relacionado al escudo nacional desde la fecha de su creación, las
diferentes formas que se le dio para su uso etc., etc., de manera que el Círculo de Jefes y
Oficiales en Situación de Retiro de las FF. AA. de la Nación, sea la iniciadora de un movimiento
institucional ante las autoridades nacionales para obtener la reglamentación de la composición de
nuestro escudo, de manera a dar un corte definitivo a su conformación y uso. El Doctor Laconich
mociona concretamente que se designe para la tarea de la redacción del cuestionario al señor
Harold Ronnebeck, por ser la persona más llamada para hacerlo, por cuanto esa es precisamente
su especialidad. El Doctor Duarte mociona que dicho cuestionario, una vez que el señor
Ronnebeck lo haya terminado y entregado su original al señor Presidente del Círculo, esta
Institución la envíe al Doctor Laconich, Presidente de la Academia de la Historia, para que, por
su intermedio, se disponga la providencia exacta sobre la conformación y uso de nuestro escudo;
y con estos antecedentes, elevar el Círculo, como promotora de la iniciativa, un petitorio a las
autoridades nacionales de reglamentación y uso de nuestro escudo. Finalmente el señor
Ronnebeck agradece la confianza depositada en su persona para llevar a cabo las tareas sobre los
antecedentes de nuestro escudo, prometiendo elevar al Presidente del Círculo un original de ese
trabajo en la brevedad posible. El General Vega Gaona agradece a los presentes por su espíritu
de colaboración: y no habiendo nada más que tratar, se levanta la Sesión siendo las 20 horas diez
minutos del día 26 de Junio del año mil novecientos setenta y cinco".
JUAN E. MELGAREJO
Capitán de Transm. (S.R.) Secretario
En cumplimiento a la recomendación emanada de las memorables reuniones conjuntas entre los
Institutos Históricos mencionados y el Círculo de Jefes y Oficiales Retirados de las FF.AA. de la
Nación, de fecha 14 de Agosto de 1975 elevé a consideración de ellas, sendos legajos con 80
páginas cada uno, con exposición de motivos, fundamentos, investigaciones realizadas,
ilustraciones y anteproyecto, como curso de acción a seguir para la búsqueda de la pertinente
reglamentación por la Ley de las características y determinación del uso de nuestros Símbolos
Patrios.
A la fecha de edición, estas investigaciones y el ante-proyecto de reglamentación de
caracterización y uso de nuestros blasones, fueron elevados por el mencionado Círculo a
consideración del Congreso Nacional.
I PARTE
SEÑALIZACIÓN DE ERRORES Y SUGERENCIAS
CAPITULO I
GENERALIDADES
La sin par y antojadiza confección y uso de nuestros SÍMBOLOS PATRIOS está deformando y
desvirtuando grandemente la verdadera imagen de esos sagrados Símbolos Nacionales, que a la
larga pueden acarrear la consiguiente pérdida del fervor patrio y la desconsideración en el plano
internacional respectivo.
Efectivamente, nos referimos expresamente a los Símbolos Patrios, incisos 1, 2 y 3 del Art. 4° de
la Constitución de la República del Paraguay, sancionada por la Convención Nacional
Constituyente el 25 de Agosto de 1967, y promulgada en la misma fecha por el Poder Ejecutivo;
y en tal sentido por la presente señalamos con la seriedad y responsabilidad que el caso requiere,
la desnaturalización de que están siendo objeto dichos Símbolos Patrios, tanto en su confección
como en su uso.
Culpable de esta situación es el general desconocimiento de la Ciencia del Blasón, que genera la
mera concepción y el libertinaje artístico de nuestros Símbolos Patrios, y en cierta medida
inclusive como un tardío brote del legionarismo apátrida. La falta de una atención idónea no
siempre hace posible el uso de escudos, sellos y pabellones con la perfección deseables, y el uso
indiscriminado de los escudos confeccionados con extravagancia, en las más de las veces
empleándose piezas honoríficas y distintivos militares no instituidos, trae aparejada una
tremenda confusión en la opinión pública respecto al verdadero valor de esos Símbolos.
La desvirtuación de los valores de los Símbolos Patrios y el desconocimiento de la Ciencia del
Blasón pueden traer como consecuencia como dijéramos, la pérdida del fervor patriótico y el
desprecio a los valores propios de la Escudería.
En círculos internacionales se echan de menos nuestros escudos por presentárselos como las así
declaradas "Armas Falsas", esto en razón de su apartamiento de la ley fundamental de su
institución, como así mismo por incurrir en aberraciones y errores específicamente definidos por
los preceptos heráldicos.
Lo más hermoso de la especie humana es precisamente el carácter propio, el espíritu peculiar y el
patriotismo genial de los diversos pueblos que habitan la tierra; y en defensa contra la pretensión
de fundirlos y confundirlos, la raza guaraní ha vertido generosamente su sangre, marcando
pruebas de sacrificio y patriotismo sin parangón en la historia de la humanidad. Nuestros
Símbolos Patrios, esencia de nuestra nacionalidad fueron sagrados para los padres de nuestra
Patria, para los defensores de nuestra territorialidad, y son sagrados para todos nosotros, y por
ende debemos esforzarnos para que lo sean también para nuestros hijos, asegurando así la
inmortalidad histórica del Paraguay.
Tal es así de anárquica esta situación que, como ejemplo, cito seguidamente un abecedario
completo de surtidas versiones del Escudo Nacional y de Hacienda empleados en nuestro país,
que por sí ya dan una idea del desorden que envuelve a nuestra Armería.
a) Inscripción "República del Paraguay" directamente en el campo del Escudo Nacional.
b) Inscripción "República del Paraguay" en una Bordura del Escudo Nacional.
c) Inscripción "República del Paraguay" en el campo del Escudo de Hacienda.
d) Inscripción "República del Paraguay" en una Bordura del Escudo de Hacienda.
e) Estrella con rayos refulgentes en el Escudo Nacional.
f) Escudo Nacional cargando con una Filiera tricolor.
g) Inscripción "Paz y Justicia" directamente en el campo del Escudo de Hacienda.
h) Presentación del León en posición Siniestra, Leopardada y Mornada en el Escudo de
Hacienda.
i) Escudo Nacional de forma Ovalada.
j) Escudo Nacional sin la inscripción "República del Paraguay".
k) Escudo de Hacienda de forma Ovalada.
I) Escudo de Hacienda con Palma y Oliva.
II) Escudo Nacional, distorsionado, con estrella roja.
m) Escudo de Hacienda con Palma y Oliva como ornamento exterior, de forma ovalada, e
incluso con una estrella naciente.
n) Escudo Nacional con la estrella en el centro, sin inscripción República del Paraguay, de forma
ovalada, con Palma y Oliva como ornamento exterior y los colores argentinos en el campo!
ñ) Escudo Nacional y de Hacienda, juntos, ovalados, llevando la inscripción "República del
Paraguay" en una cinta flotante, ambos con Palma y Oliva.
o) Escudo Nacional de forma exterior polaca.
p) Escudo de Hacienda con León diestro.
q) Escudo de Hacienda con León parado.
r) Escudo de Hacienda en jurisdicción del Escudo Nacional.
s) Descripción en texto escolar, con aprobación Oficial, señalándose al Escudo Nacional como
ubicado en el reverso del Pabellón Patrio.
t) Escudo Nacional sin inscripción "República del Paraguay" y en vez de Palma y Oliva, carga
con Palma y Roble.
u) Decreto autorizando inscripciones en el campo de los escudos.
v) La Orden Nacional al Mérito, instituida por el Mcal. Francisco Solano López, máxima
condecoración paraguaya y la tercera más antigua de América, se presenta unas veces con la
Palma y Oliva en ese orden y otras con la Oliva y la Palma, indiscriminadamente.
w) Escudo Nacional con la inscripción "Rep. del Paraguay" en una cinta ondulante como
ornamento exterior, en la barba del escudo.
x) Escudo Nacional, integrado solamente con dos Palmas, en vez de Palma y Oliva.
y) Escudo Nacional, cargando un moño.
z) Escudo Nacional sin inscripción: República del Paraguay, y sin forma exterior alguna, ni
circular, ni ovalada, ni polaca, es decir, amorfa, y etc. etc ...
Esto resulta fácil verificar si nos fijamos en los Ministerios, Iglesias, Escuelas, Colegios,
Facultades, Entes Estatales, Militares y Civiles, Museos, Archivos y Bibliotecas, etc.
Constatamos así ciertamente que nuestros blasones, tan sagrados a nuestros sentimientos
nacionalistas, son confeccionados y usados en forma libérrima, extravagante y antojadiza.
Esta publicación contiene más de cien copias gráficas de diferentes versiones de Sellos y
Escudos empleados en nuestro país en toda época.
Cito seguidamente algunas versiones de nuestros Símbolos localizados en:
- Museo Histórico Militar:
a) Banderola de bronce con Escudo de Hacienda: León sentado de perfil.
b) Ataúd alegórico conteniendo figura del Gral. Díaz en yeso: tapa con grabado del Escudo de
Hacienda con León sentado mirando al diestro.
c) Bandera Nacional con Escudo de Hacienda: León sentado mirando al diestro.
d) Bandera Nacional con Escudo de Hacienda: León acostado.
- Edificio del Congreso: Ostenta en lo alto del frontispicio, relieve del Escudo Nacional y el de
Hacienda, ambos ovalados y ambos con Palma y Oliva.
- Iglesia Catedral: Frontispicio con relieve del Escudo Nacional y el de Hacienda, en versión
mixta, es decir, ambos en una; misma ejecución.
- Iglesia de la Recoleta: En lo alto de la fachada presenta el Escudo de Hacienda con el León
acostado.
- Correo Central: Primera estampilla paraguaya, alegórica al Escudo de Hacienda, de forma
ovalada, con el León rampante, siniestro y abrazado a la pica y el gorro frigio, en posición
danzante.
- Municipalidad de Asunción: Tanto en la ordenanza de institución del Escudo capitalino como
en la confección del mismo se notan aberraciones heráldicas.
- Fuerzas Armadas de la Nación: Según el Manual de Uniformes del Ejército, Art. 31, inciso c,
se establece:
"Las gorras de todos los miembros del ejército llevarán como distintivo del Ejército Nacional, el
Escudo Nacional (fig. 22) bordado en hilo metálico dorado sobre paño de color del arma o
servicio correspondiente".
Ni la figura 22 del ME-40-400 ni las llevadas en las gorras del Ejército Nacional corresponden al
Escudo Nacional, siendo eso sí, dos figuras del citado blasón: la corona de ovación y la estrella,
pero que, ellas dos por separado, no conforman el escudo de armas del Paraguay! Sí, pudieran
ser considerados como muy dignos Escudos de gorra.
Los demás componentes, como ser: la inscripción del título de nuestra Nación y la pieza
honorífica de primer grado que es la Orla, no están representados en tal Escudo de gorra.
Además, el Escudo Nacional es circular y no ovalado.
En el Escudo de Gorra de la Aeronáutica se constata igualmente que solamente lleva dos figuras
del Escudo Nacional, lo cual contradice el Art. 73 del Manual de Uniformes de esa Ar-ma, que
establece el escudo de gorra como sigue:
"un par de alas extendidas de 10 x 4 cms, en cuyo centro se encuentra un Escudo Nacional…".
La Armada por su parte, establece en su reglamento un expreso escudo de gorra sin mencionar el
Escudo Nacional.
- Policía de la Capital: Según el reglamento de uniformes, Art. 41 dice:
"Llevarán en la gorra el Escudo Nacional".
En la práctica, esto es diametralmente distinto: En la gorra llevan solamente dos figuras del
Escudo Nacional: la corona de ovación y la estrella, con el agravante que la corona de ovación
no está compuesta de Palma y Oliva sino de una Palma y un Roble!
- Policía Municipal de Tránsito: En el Uniforme de la Policía Municipal Femenina de Tránsito se
constatan a un mismo tiempo dos Escudos Municipales distintos: uno de forma exterior española
y otro de forma polaca.
Mereciendo igualmente la heráldica militar, ciencia heroica por excelencia, una atención
ejemplar, el Comando en Jefe de las FF.AA. de la Nación ordenó la creación de una Comisión de
Heráldica Militar, dependiente de él, que ya se ocupa del blasonamiento de las distintas armas y
entes militares de nuestro país.
- Escudería Municipal: Con más de 160 Municipios de la República apenas si 10 de ellos tiene su
blasón parlante!
Por consiguiente, y refutando a priori a quienes manifiesten que nuestros escudos son
tradicionales debiéndoselos respetar así como están, a más del argumento constitucional y
heráldico, enfatizo que ningún Escudo Nacional ni de Hacienda fueron tradicionales -salvo como
están instituidos en nuestra Carta Magna- no precisamente porque hayan sido expresamente
modificados por la Ley, sino porque sencillamente no existió una única versión cuyo aspecto,
jurisdicción, forma y contenido haya durado lo suficiente para que así pueda ser conceptuado,
según podrá establecerse en esta misma publicación; ya que en ningún momento ni modo desde
luego puede establecerse cuáles de esos escudos son los tradicionales entre los que están en uso,
ni mucho menos, desde luego, cuáles están en uso entre los que serían considerados
tradicionales. Esto merced a que nunca se dispuso de un departamento de heráldica en la
estructura del Gobierno en nuestro país ni de un instituto heráldico, a nivel Institucional, lo que
permitió que nuestros blasones cayeran en manos de dibujantes y artistas nacionales y
extranjeros, que desnaturalizaron en todo tiempo a su mero antojo dichos Símbolos Patrios.
Sintetizando, se constata que nuestros blasones son simplemente concebidos de manera artística,
sin considerarse los principios heráldicos que rigen esta materia, ni la ley fundamental de la
Nación.
Y si a esto sumamos el variado surtido de versiones de Escudos Nacionales y de Hacienda -para
asombro del mundo-, instalados al frente de nuestras representaciones diplomáticas y consulares
en el extranjero, tendremos por resultado, una imperiosa necesidad de ocuparnos de este asunto,
a fin de dar a nuestros símbolos la real imagen que le corresponden.
Que nuestro país posee dos escudos en su pabellón es cosa sabida, pero la aparición de un surtido
tan vasto de imágenes distorsionadas de nuestros blasones acarrea una tremenda con fusión. Y
justamente la ausencia de un ente heráldico local, ha obligado a muchas personas a apadrinar una
de esas versiones. La ciencia heráldica viene sin embargo en ayuda para caracterizar
correctamente tales símbolos: Los Escudos y Sellos de nuestra Patria. Por su parte, la propia
Constitución vigente, permite la reglamentación de las características de los Símbolos Patríos -
indicado en el apéndice final del Art. 4°- y así entonces el anacronismo de nuestra Escudería
podrá ser superada positivamente.
En la señalización de errores y sugerencias elevada a las autoridades sobre este asunto ya
indicábamos: "Profesores, Escritores y excelsos Historiadores de nuestra Patria, en ausencia de la
Ciencia Heráldica, son los verdaderos protectores de nuestros Símbolos Nacionales y por
consiguiente merecedores de nuestro particular reconocimiento". Este es un pensamiento que
siempre lo mantendremos incólume!
A las cosas siempre se las llaman por sus respectivos nombres o terminología específica y cada
asunto está tratado por su respectiva ciencia. Es natural también entonces que el blasón sea
tratado por la Ciencia Heráldica, pues es precisamente ella la que trata todo lo relativo a los
escudos y su blasonado, es decir, su creación e interpretación. Legisla sus formas, distribución,
piezas, figuras, esmaltes, metales, brisuras, cimeras y adornos. Los preceptos, léxico y
simbología heráldica que rigen esta ciencia son precisos y bien definidos.
Por quien si no? Queda demostrada, que la marginación de esta ciencia en el manejo de nuestra
armería acarrea una tremenda confusión y la consiguiente desnaturalización de la misma.
"El conocimiento del Símbolo tiene, y ha tenido siempre, una gran importancia Histórica, y para
descifrarlo e interpretarlo, se han empleado una serie de métodos, normas y sistemas, que prevé
el blasón".
"La Ciencia Heráldica no se considera como glorificación de una casta privilegiada, sino
únicamente como Ciencia Auxiliar de la Historia".
La continuada y ancestral desvirtuación de los verdaderos valores de nuestros escudos por el
desconocimiento básico del blasón, ha llevado a muchas gentes a interpretar a nuestros
SÍMBOLOS PATRIOS de manera equivocada; y ello se refleja también en el pensamiento -
errado por cierto- de quienes creen que ahora deseamos generar un nuevo escudo.
NO! Nada más falso! No son nuevas creaciones, sino los únicos que constitucionalmente y
conforme a la heráldica pueden ser blasonados: los legítimos escudos del Paraguay!
Y por el contrario, debiéramos asombrarnos por cierto de la enorme cantidad de versiones de
Escudos y Sellos así llamados "Nacional y de Hacienda" que existen en uso en nuestro país y en
el extranjero, convirtiéndonos en tal sentido en verdaderos recordistas, y que por lo embozado de
sus apariciones, pasan desapercibidos sin despertar la justa indignación ni airadas reacciones, por
las irregularidades que presentan!
Dios permitirá que el patriotismo sea virtuosamente iluminado, para que la dignificación de
nuestros Símbolos Patrios sea una bella realidad.
La prueba irrefutable de la genuinidad y autenticidad! de nuestros símbolos está en la propia
Constitución Nacional, y para su comprensión invito muy cordialmente a la concentración de la
lectura del texto del Art. 4° de la misma, que transcribimos inextenso:
“Art. 4° - Los Símbolos de la Patria son:
1- El Pabellón de la República consistente en una bandera compuesta de tres franjas horizontales
iguales: colorada, blanca y azul, llevando de un lado, en el medio, el Escudo Nacional, de forma
circular, goce se describe como una palma y una oliva entrelazadas en el vértice y abiertas en la
parte superior, resaltando en medio de ellas una estrella y en la orla una inscripción que dice:
República del Paraguay; y en el reverso„ en la misma posición, un círculo con la inscripción
distribuida: Paz y Justicia, figurando en el centro un león en la base del símbolo de la libertad;
2 El Sello Nacional, que reproduce el escudo primeramente descripto;
3 El Sello de Hacienda, que reproduce el escudo del reverso del Pabellón, más la inscripción que
dice: República del Paraguay, en la orla;
4 El Himno Nacional, cuyo coro comienza con la frase: Paraguayos, República o Muerte;
5 La Composición musical: Campamento Cerro León.
La Ley reglamentará las características de los símbolos de la Patria, en cuanto no estén previstas
en la resolución del Congreso General Extraordinario del 25 de Noviembre de 1842, y
determinará su uso.
Hasta aquí el Art. 4° de nuestra Constitución Nacional vigente.
Es decir entonces que toda presentación y uso de forma no estipulada en, ella, es
inconstitucional!
Para desarrollar las aseveraciones expresadas en esta investigación, se pasa a fundamentar
constitucional y heráldicamente el blasonado correcto de nuestros símbolos.
En tal sentido deseo señalar que ''la simbología debe ser considerada como cualquier ensayo de
definición de una realidad abstracta, sentimiento o idea invisible a los sentidos, que ha tomado
realidad bajo forma de imagen o de objeto; y las Reglas de la Simbología Aplicada deben seguir
a las de la Heráldica, que en el fondo rige a aquella en todas sus representaciones".

Más contenido relacionado

Similar a Simbolos nacionales (12)

Los Torques
Los TorquesLos Torques
Los Torques
 
Dia del escudo nacional ecuatorianao
Dia del escudo nacional ecuatorianaoDia del escudo nacional ecuatorianao
Dia del escudo nacional ecuatorianao
 
Heraldicas, priorato templario
Heraldicas, priorato templarioHeraldicas, priorato templario
Heraldicas, priorato templario
 
Fenomeno balistico
Fenomeno balisticoFenomeno balistico
Fenomeno balistico
 
Presenatcion de los simbolos del estado apure
Presenatcion de los simbolos del estado apurePresenatcion de los simbolos del estado apure
Presenatcion de los simbolos del estado apure
 
Homenaje a la bandera
Homenaje a la banderaHomenaje a la bandera
Homenaje a la bandera
 
Calderón y su honor calidoscópico.pdf
Calderón y su honor calidoscópico.pdfCalderón y su honor calidoscópico.pdf
Calderón y su honor calidoscópico.pdf
 
Pdf Online
Pdf OnlinePdf Online
Pdf Online
 
Heráldica conceptos y normas de construcción
Heráldica conceptos y normas de construcciónHeráldica conceptos y normas de construcción
Heráldica conceptos y normas de construcción
 
Trono -Capitán América "Liberty"
Trono -Capitán América "Liberty"Trono -Capitán América "Liberty"
Trono -Capitán América "Liberty"
 
Historia del escudo de España
Historia del escudo de EspañaHistoria del escudo de España
Historia del escudo de España
 
Hoplita
HoplitaHoplita
Hoplita
 

Simbolos nacionales

  • 1. ACTOR: HAROLD THEODOR RONNERBECK ESCUDO Y SELLO NACIONAL ESCUDO Y SELLO NACIONAL a) La heráldica preceptúa específicamente que un escudo, en su fase de creación puede tener variadas formas, que se conciben en base a las influencias predominantes en el ente a blasonarse o en otros casos, en formas propias; pero una vez instituidos los Escudos, el todo, forma y contenido como adornos, deben respetarse siempre; salvo que por expresas leyes competentes, sean modificados o instituidos nuevos escudos! Sabemos también por la Constitución Nacional, que la forma de nuestro Escudo Nacional es circular, y por consiguiente no de forma ovalada, elíptica, polaca, etc. Al desconocimiento del blasón se unieron otros hechos que aumentaron la anarquía de nuestra Escudería, y en tal relación, el año de 1903 marca un año infeliz para la Armería Paraguaya. Efectivamente, en ese tiempo en la “Revista de Instrucción Primaría” de difusión oficial, vieron a luz pública una serie de fantasías heráldicas literarias, entre las que se entresacan, por ejemplo, con relación a la forma de nuestros escudos: “DIRECCION PRACTICAS PARA LAS CLASES EN LOS GRADOS SUPERIORES: "Presentará a la clase, dibujadas en el pizarrón varias figuras limitadas por curvas, como ser: círculos, elipses, óvalos y ovoides. Hará notar sus diferencias y analogías, llamando la atención, especialmente, sobre la elipse, haciendo ver que de las curvas cerradas es la más graciosa y que su aplicación está generalizada en casi la mayor parte de los escudos de las naciones americanas". En seguida se procederá a enseñarles su construcción con la limpieza y exactitud. Se les hará
  • 2. observar también que hay otra figura semejante a la elipse, que es la llamada óvalo, pero que sus contornos no son tan proporcionados, ni tan elegante como los de la elipse". Se constata así que se enseñaba oficialmente hasta incluso todavía en la década del 40, que a nuestro blasón debía dársele una forma elíptica antes que oval o circular por "que de las curvas cerradas es la más graciosa" prescindiendo de la propia Constitución Nacional que siempre impuso la forma circular! Es inexacto además que "la mayor parte de los escudos de las naciones americanas" sean de forma de una elipse, lo cual demuestra a las claras lo aventurero de la incursión de su autora en ésta materia". En dicha publicación, con idénticas ligerezas se refería también a los demás atributos de nuestros blasones. Su autora, Educacionista argentina Prof. Corina Echenique, fue merecedora del reconocimiento oficial por su labor en tal sentido! El término circular se describe en diccionarios y enciclopedias de la lengua española y empleados naturalmente en la heráldica, como sigue: . Circular: De figura de círculo. Círculo: Superficie plana limitada por una circunferencia. Circunferencia: Línea curva cerrada, cuyos puntos están todos a igual distancia de un punto medio interior llamado centro. . Queda así demostrado y comprobado que la forma de nuestro Escudo Nacional es únicamente circular, y cualquier otra forma que se le dé es irregular y descalificante. b) Palma y Oliva: Así como así, Palma y Oliva a secas, no conforman la verdadera figura heráldica de nuestro Escudo Nacional, pues bien sabido es que ni la Palma ni la Oliva son especímenes de la flora nacional, y si fueron instituidas en nuestro Escudo Nacional, a semejanza de otros países, fue para simbolizar precisamente a través de figuras heráldicas universalmente empleadas, la significación que se deseaba dar a nuestros escudos. En ese sentido, la rama de Palma y la de Oliva no son en nuestro Escudo Nacional dos ramas separadas de manera a interpretarse que representa cada una de ellas únicamente cosas o casos independientes. Por el contrario, y confirmando lo que aseveramos en el blasonado de este escudo, ellas conforman la: CORONA DE OVACION instituida al valor y hazañas militares del pueblo paraguayo; encontrando en la propia Constitución Nacional su fundamento, pues leemos en ella: "...una palma y una oliva entrelazada en el vértice...'' es decir, como se arman heráldicamente las coronas de ovación. Aquí igualmente nos referimos a la explicación castiza sobre el término: Entrelazar: Cruzar una cosa con otra. Ejemplo: entrelazar mimbres. Esta descripción, traducida gráficamente, produce la siguiente figura, coincidente en un todo con las normas del blasón para formación de las coronas de ovación: .
  • 3. A más de confirmar la conformación cae la Corona de Ovación con la Palma y la Oliva, el término entrelazar anula automáticamente el moño que por mera concepción artística le han aplicado a nuestro Escudo Nacional; pues el moño, del color que fuere, es siempre una figura artificial que, no se halla instituida por nuestra Constitución, ni requerida por los preceptos heráldicos para este tipo de corona. Y para mayor gloria y dignificación de estos Símbolos Patrios, queda así conformada la CORONA DE OVACION, también denominada "Oval", que sí es una figura heráldica, siendo Insignia Honorífica y de Dignidad, como reconocimiento al valor y hazañas militares del pueblo Paraguayo; a semejanza de las conferidas a los militares romanos festejando sus hazañas bélicas. Lamentablemente, el prolongado ayuno heráldico en que se hallaba postrado nuestro país, permitió que se estuviera escamoteando en todo tiempo a nuestro Escudo Nacional esta figura heráldica, símbolo de Honor y Dignidad! Naturalmente, a su vez, como se hiciera notar en la introducción, la Palma y la Oliva que conforman la Corona de Ovación, simbolizan también entre otros, la Justicia y la Paz respectivamente; que en el reverso de nuestra bandera el escudo trae escrita en forma de divisa "Paz y Justicia", asociación que convierten a estos Símbolos Patrios en las así llamadas "Armas Puras", declaradas así cuando poseen cuerpo y alma. Es decir cuando está expresada una divisa de un blasón en palabras y en símbolos respectivamente. c) Sigue diciendo el Art. 4°, 1) de nuestra Constitución: "... resaltando en medio de ellas una estrella. . . ". Heráldicamente, cuando se indica una estrella, siempre se la señala con cinco puntas; caso contrario debe estar expresamente señalado su número, pues según ellas, varían los significados. Además, nuestra estrella no debe dibujarse como en relieve, ya que todo dibujo heráldico es plano! Al blasonar nuestro Escudo Nacional, indicamos la simbología y representación de esta estrella; significando además en las Fuerzas Armadas, al Estado Mayor. Aquí también se constatan irregularidades en las muchas versiones de este Símbolo Patrio. Efectivamente, la Constitución establece: ".. en medio de ellas..." (refiriéndose a la colocación de la estrella en medio de la Palma, y la Oliva) lo cual obliga heráldicamente a abismar la estrella en el escudo es decir, sin que sus
  • 4. puntas toquen a ninguna de las figuras o piezas que la circunvalan. Además, deben desecharse las versiones con la estrella terrazada, es decir, no debe pintarse una terraza detrás o debajo de la estrella, pues para ella debe estar expresamente señalado en la letra de su institución o requerido por el blasón. Respondiendo a las preguntas del porqué en la versión de color, en la descripción y su correspondiente ilustración, aparece rodeando a la estrella un cielo de azur, citemos que, así como en algunos casos la ciencia del blasón prohíbe o excluye figuras o piezas no instituidas; en otros casos definidos como el nuestro, con sus preceptos viene en ayuda de la Armería para solucionar disidencias como la que se presenta en nuestro caso, cual es la estrella de oro (metal) sobre campo de plata (metal). Se preceptúa básicamente en el blasón que no se podrán aplicar metal sobre metal ni color sobre color, constituyendo lo contrario una verdadera ilegalidad heráldica, capaz de descalificar honoríficamente a todo escudo en que aparezca tal situación, con la única excepción, se dice, y universalmente aceptada, del Escudo de la Ciudad de Jerusalén. Es admitido y necesario que el artista interprete acabadamente la letra de la institución de un escudo y que al ilustrar un Masón, configure las piezas y Figuras de tal forma que no contra vengan dicho precepto; y en nuestro caso precisamente es que se deberá pintar la estrella rodeada de un cielo de azur, para salvar tal situación. Reglamentada así por la Ley, esto quedará definitivamente salvado. A su vez, la superficie de nuestro Escudo Nacional, el campo es de Plata, que a más de oro, es el otro metal heráldico. Por otra parte, la estrella de nuestro Escudo Nacional no es reluciente, refulgente o radiante, pues en tal caso debe estar expresamente señalada así, ya que los rayos de estrellas tienen su simbología bien definida, según su cantidad. d) Nos referimos ahora a la pieza honorífica de primer grado de nuestro Escudo Nacional, cual es la ORLA, expresamente instituida por la Constitución Nacional del Paraguay. En efecto, leemos en ella: " ... y en la orla una inscripción que dice: República del Paraguay..." Como puede comprobarse, la orla está instituida por la propia Constitución, y el artículo "la" antepuesto a "orla", es determinante, quedando así demostrado que nuestro Escudo Nacional carga una pieza heráldica honorífica de primer grado que es la ORLA, la única pieza honorífica de éste símbolo, pero no por ello menos importante; lamentándose que por tanto tiempo le fue negada en las versiones conocidas, despreciándose con ello la verdadera función de esta pieza honorífica y la posición que le corresponde con ella a nuestro Escudo Nacional. Para aclarar esto de la Orla, señalaremos las diferencias de una tal pieza honorífica con relación a la Bordura y a la inscripción directa del título de nuestra Nación directamente en el campo del escudo, como suelen presentarse estos símbolos con más frecuencia: .
  • 5. ORLA: Pieza honorífica de primer grado, puesta dentro del escudo y separada de los bordes de éste otra tanta distancia como ella tiene de ancho, y que es la doceava parte del escudo, En casos de escudos circulares se añade compuesta de dos círculos concéntricos. (Pieza expresamente instituida por la Constitución y que simboliza "Protección"; en este caso Protección honorífica al título nacional). . . BORDURA (Imagen superior): Pieza honorífica de primer grado, que rodea el ámbito del escudo por lo interior de él, tomando la sexta parte de su latitud. (No instituida a nuestros símbolos por la Constitución. Representa la cota de malla de los caballeros).
  • 6. INSCRIPCIÓN EN EL CAMPO (imagen inferior): La heráldica preceptúa básicamente que no podrá aplicarse inscripciones, abreviaciones, lemas, divisas, empresas, motes, voces ni gritos de guerra en el campo de los escudos. En las versiones de color, las piezas heráldicas no dejarán ver el campo del escudo a través de ellas. . e) Necesitándose reglamentar la versión de color de nuestros Símbolos Patrios, es necesario establecer las normas de dónde partir, para las tales ejecuciones en color. En tal relación, no se justifica la inscripción en sable (negro) del título de la Nación, por ser el sable símbolo de sufrimiento, muerte, dolor, aflicción, tristeza y luto, por consiguiente no es el esmalte requerido. En la heráldica eclesiástica esto sería diferente, ya que el negro en esa jurisdicción simboliza fe, esperanza y resurrección futura, pero que no es nuestro caso. En cuanto al oro de la inscripción del título Nacional y la divisa, dos fundamentos heráldicos legitimizan su empleo en nuestros blasones: 1 No puede ser de color, pues la Orla ya es de gules; por consiguiente debe ser de metal (recordar precepto básico: no se empleará metal sobre metal ni color sobre color). 2 Siendo en nuestro caso la inscripción del título de una Nación, corresponde el primer metal de la gradación heráldica: Oro, que es el único metal heráldico que simboliza la Soberanía, el poder, la grandeza de la nación, esplendor y gloria! Siendo en nuestros Símbolos Patrios, la Orla símbolo de Protección Honorífica al título Nacional, únicamente puede aplicarse el primer esmalte de la escala heráldica cual es gules; por hallarse exclusivamente en este color la simbología de protección total, es decir, inclusive con derramamiento de sangre! Ningún otro metal ni esmalte heráldicos reunen la simbología que requiere esa inscripción del título Nacional ni de la Orla. Quedan así demostrados los fundamentos que establecen la utilización del gules en la Orla y el oro en la inscripción del Título de nuestra Nación, en las ejecuciones de color, en nuestros blasones. En las versiones de blanco y negro, impresas ó pintadas y las ejecuciones metálicas, se admiten desde luego los dibujos simplemente perfilados; no así las versiones educativas en blanco y negro, que deben representar los metales y colores originales que se reglamenten; los que deberán confeccionarse en base a las reglas heráldicas relativas a la señalización de los colores y metales, señales gráficas creadas por el Jesuita Silvestre Pietrasanta, universalmente aceptadas y empleadas. f) Señalaremos seguidamente la irregularidad del empleo de la Filiera en nuestros escudos, ya sea en las versiones en color como en las de blanco y negro. Se trata en efecto, de la zona orillada en que los dibujantes y artistas colocan generalmente el tricolor patrio. Particularmente hallamos una tal colocación del tricolor Patrio de buen gusto, desde el punto de vista artístico; pero el buen gusto tiene sus limitaciones en la Armería, y más aún cuando se trata de Escudos Nacionales, y para colmo empleando piezas honoríficas disminuidas. .
  • 7. Efectivamente, la Ciencia Heráldica establece para la: Filiera: Pieza Honorable Disminuida Bordura disminuida a la tercera parte de su anchura ordinaria. (Pieza no instituida desde luego por la Constitución Nacional SÍMBOLOS PATRIOS .
  • 8. A mi esposa Nélida Meza y a mis hijos Ruth Nélida, Christian Jorge y Carlos Alberto . AL LECTOR: La sensibilidad patriótica hacia la dignificación de nuestros SÍMBOLOS PATRIOS se manifiesta con fervor en todos aquellos que se interesan por la problemática que los envuelve. En tal sentido, es propicio resaltar, la favorable disposición de las siguientes personas: - Excmo. Sr. Ministro de Educación y Culto Dr. Don Raúl Peña por el suministro de papeles y cartulinas, - Jefe de Publicaciones de las Fuerzas Armadas de la Nación y Presidente de la Comisión de Heráldica Militar del Comando en jefe, Cnel. DEM., Don Jorge R. Guggiari por la impresión de esta edición. A ellos mi especial reconocimiento, en el entender que con la publicación de estas investigaciones, legisladores y dignatarios nacionales contarán con un medio informativo adecuado para un preciso estudio y tratamiento del proyecto de Ley que caracterice y determine el uso de nuestros Símbolos Patrios. EL AUTOR PREFACIO Durante los primeros años de vida de la Academia de la Historia Militar del Paraguay, cuya Presidencia a la sazón la ejercitaba, recibimos el cartapacio que contenía las investigaciones concernientes a nuestra insignia, escudos, sellos y demás emblemas nacionales, llevadas a cabo por el consagrado heraldista Don HAROLD RONNEBECK, que las consideré de inicio, como de gran valor y de alto interés patriótico. Por tal motivo, lo alenté y apoyé en el sentido de que dichos trabajos sean difundidos y publicados de ser posible, con la aquiescencia del Excmo. Sr, Presidente de la República y Comandante en Jefe de las FF.AA. de la Nación, General de Ejército Don Alfredo Stroessner, hasta cuyo despacho accedimos, con el referido propósito. Ahora, en la inminencia de concretarse esa tan deseada finalidad, que pretende poner término a la anarquía reinante en el uso y abuso de los sagrados símbolos de la Patria, formulo mis más fervientes deseos porque, los ejemplares de esta limitada edición, contribuyan eficazmente para; que por Ley de la República, se reglamente definitivamente sus características, conforme a sus legítimos títulos determinando además,; el adecuado y justo empleo de los mismos, por demandarlo así el más elemental acervo ciudadano. CEFERINO VEGA GAONA , Gral. División (SR) INTRODUCCIÓN Nuestra Nación posee junto a su patrimonio cultural un cúmulo ingente de valores morales, espirituales e intelectuales, conformadores del conjunto de caracteres específicos que la distinguen de las demás naciones, y que por sí mismos sirven a través del tiempo, como fragua modeladora que ha forjado nuestra nacionalidad. En tal sentido, como patrimonio patrio, nuestros escudos y sellos ocupan un sitial de preponderancia, puesto que ellos constituyen la imagen de la Nación, de este país pletórico de nacionalismo y fervor patriótico de este suelo defendido por prohombres que con sus acciones heroicas hicieron posible el surgimiento del Paraguay, como un Estado Libre y Soberano.
  • 9. Pero he aquí que nuestros Símbolos Patrios, por desconocimiento de la materia, entre otros, antes de ser respetados v distinguidos, a veces son desnaturalizados, desvirtuando la verdadera imagen de nuestra Nación; admitiéndose, naturalmente, que los mismos siempre han ejercido una bienhechora influencia sobre todos aquellos que en todo tiempo los han venerado y defendido. A raíz de todo ello, presentamos a través de esta publicación, un extenso sondeo del material que permaneciera oculto por largo tiempo y cuyo tratamiento por ende descuidado, y que ha estado ahondando cada vez más la problemática de nuestra Armería. Las labores realizadas a través de muchos años de cuidadosa investigación con respecto a los Escudos y Sellos de nuestro país, han corroborado sin embargo que, conforme a la Carta Magna que los instituyó, nuestros blasones son tan y muy dignos como los más, tratándose en el concierto de la Heráldica Nacional de Occidente, de las así llamadas "Armas Puras"; por componer con los atributos de los dos escudos de nuestro país, unos blasones con "alma y vida, que resulta cuando se presenta la divisa Nacional en forma de leyenda y al mismo tiempo de manera simbólica, es decir, que, a "Paz y Justicia" inscripta en el escudo del reverso del pabellón se asocia la alegórica Oliva y Palma del anverso, que en ese orden también simbolizan Paz y Justicia. En cuanto a la problemática de la caracterización y uso de nuestros símbolos en el transitar del tiempo, con estas investigaciones se ha echado luz sobre situaciones desconocidas, cotejándose los términos constitucionales con la aplicación de los preceptos heráldicos correspondientes; mereciendo la importante atención y el profundo interés de las más altas Autoridades Nacionales, quienes con su más puro fervor patriótico, expresaron así el pronunciamiento que seguramente permitirá a la Ley reglamentar las características de los Símbolos Patrios y a determinar su uso adecuado. En tal sentido, nos honramos en manifestar que el Excmo. Señor Presidente de la República y Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas de la Nación, General de Ejército Don Alfredo Stroessner ha declarado su total apoyo a esta acción tendiente a la dignificación de nuestros Símbolos Patrios; y a quien hemos dedicado como un modesto homenaje el original de estas investigaciones, en oportunidad de celebrar la ciudadanía el vigésimo aniversario de su ejercicio de la Primera Magistratura de la Nación. Otros ejemplares de este trabajo también han encontrado igual atención por parte de altas Autoridades Civiles y Militares e Instituciones Nacionales, entre las que me permito mencionar: - Excmo. Sr. Presidente del Poder Legislativo - Dr. Don Juan Ramón Chaves - Excmo. Sr. Ministro de Defensa Nacional Gral. Div. (SR) Don Marcial Samaniego - Excmo. Sr. Ministro de Educación y Culto Dr. Don Raúl Peña - Excmo. Sr. Ministro de Hacienda Gral. DIM (SR) Don César Barrientos - Honorable Academia Paraguaya de la Historia - Honorable Academia de la Historia Militar del Paraguay - Honorable Círculo de jefes y Oficiales Retirados de las Fuerzas Armadas de la Nación, como igualmente Oficiales Generales de la Nación y otros Dignatarios. Cábenos citar con satisfacción aquellas memorables e importantes reuniones -de las que publicamos sus actas- llevadas a cabo por iniciativa del Circulo de Jefes y Oficiales Retirados de las Fuerzas Armadas de la Nación representado por el Presidente del Departamento Técnico del Salón de Bronce el Gral. Brig. (SR) Don Francisco Vega Gaona, sus Miembros Cap. Frag. (SR) Eloy Recalde, Cap. Frag. (SR) Bernardino Duarte y el Cap. (SR) Juan E. Melgarejo, conjuntamente con el Cnel. Manuel W. Chaves, Director del Instituto de Historia Militar del
  • 10. Ministerio de Defensa Nacional; el Sr. Carlos Pussineri Scala, Director de la Casa de la Independencia; el Tte. 1º de Marina (SR) Don Juan B. Gill Aguínaga, Presidente del Instituto de Numismática del Paraguay; el Dr. Marcos A. Laconich, Presidente de la Academia Paraguaya de la Historia; el Dr. J. Antonio Ramos, Historiador Nacional y el Autor, en torno a estas investigaciones, las que fueron objeto de estudio y confrontaciones; resolviendo el Presidente del Círculo de Jefes y Oficiales Retirados de las FF.AA. de la Nación y Senador Nacional Cnel. DEM (SR) Don Juan Manuel Torres Villanueva buscar con esos antecedentes, la pertinente reglamentación por la Ley que la propia Constitución Nacional prevé. De esa forma, estos excelsos historiadores nacionales y una muy respeble entidad, desarrollaron una fructífera acción en pro de la dignificación de los SÍMBOLOS PATRIOS. El interés de nuestras instituciones por esta cuestión de nuestros blasones constitucionales, se puede observar igualmente en publicaciones de entidades importantes de nuestro país, como ser, IPVU, Revista Militar, Editorial FVD, Bco. Nacional de Fomento, Editorial Hermes, campaña radial de Radio Asunción, y otros. Siendo los SÍMBOLOS PATRIOS, patrimonio de todos los Paraguayos, nadie puede sin embargo ahora alzarse con la autoría de la versión constitucional, que corresponde únicamente al CONGRESO GENERAL EXTRAORDINARIO DE 1842, durante la sabia conducción de Don CARLOS ANTONIO LÓPEZ. Esta publicación ofrece al juicio crítico constructivo, el deseo de aportar datos para un mayor conocimiento de nuestros auténticos ESCUDOS Y SELLOS DEL PARAGUAY. HAROLD RONNEBECK REUNIONES DEL DEPARTAMENTO TÉCNICO DEL SALON DE BRONCE DIA 20-VI-75 ACTA N° 4 - Las: 17,30 hs. En la ciudad de Asunción, capital de la República del Para-guay, reunidos en el local social del Círculo de Jefes y Oficiales en Situación de Retiro de las FF.AA. de la Nación, los Señores Miembros del Departamento Técnico del Salón de Bronce del Círculo, y presidido por su Presidente el General de Brig. Don Francisco Vega Gaona y los Miembros Cap. de Frag, (SR) Eloy Recalde, Cap. de Frag. (SR) Bernardino Duarte, Cap. (SR) Juan E. Melgarejo, el Coronel de Cab. Res. Manuel W. Chaves, Señor Carlos A. Pussineri Scala, Director de la Casa de la Independencia, Señor Tte. 1° de Marina (SR) Juan B. Gill Aguínaga y el señor Harold Ronnebeck, Heraldista, a los efectos de definir la composición del escudo nacional que deberá encabezar el Orden de Batalla del Ejército que actuó durante la guerra contra Bolivia en los años 1932-35, en vista de que hasta la fecha existe una verdadera anarquía a este respecto. Abre el acto el General Gaona para expresar que., el Departamento Técnico, preocupado en cumplir debidamente con todo lo referente a las representaciones simbólicas que deberá guardar el Salón de Bronce, por cuanto su contenido tiene profundo sentido histórico cuya fisonomía no debe ser alterada bajo ningún concepto; y que, teniendo en cuenta que nuestro escudo nacional, según es usado en las instituciones tanto civiles como militares, en muchos casos no guardan relación con lo determinado en nuestra Carta Magna, dando como resultado un heterogéneo grupo de símbolos de los que el Departamento Técnico no quisiera a hacer uso para no caer en errores fundamentales que no guardarían relación con la trascendencia de la obra emprendida; que, por otro lado, tampoco existe una reglamentación de las disposiciones expresadas en nuestra Constitución que nos sirva de orientación en la obra emprendida, razones por las cuales fueron
  • 11. invitados los señores presentes para estudiar dicha situación. En el uso de la palabra el Heraldista señor Ronnebeck, expresa, en primer término, "mi satisfacción -dice- por encontrarme reunido con tan distinguidas personalidades a cuyo cargo están los trabajos del Salón de Bronce; y más aún sabiendo que es el Círculo la promotora de la reunión para estudiar exhaustivamente lo relacionado con nuestro escudo nacional". Prosigue haciendo un resumen técnico de la composición de los diferentes signos de nuestro escudo, para afirmar, finalmente que, para hacer uso de los símbolos que representan nuestro escudo, en forma correcta, el escudo de la República debe fijarse a la izquierda del observador puesto frente a él; y el de Hacienda, a la diestra del mismo, con la leyenda Paz y Justicia en forma distribuida; y no en el campo del escudo, como se viene haciendo hasta la fecha. El Tte. 1° Gill Aguínaga expresa que coincide totalmente con lo pormenorizado por el señor Ronnebeck con respecto a la posición de los símbolos de nuestro escudo, y que la existencia de la anarquía en su uso se debe, precisamente, al hecho de que no existe una reglamentación al respecto. En el uso de la palabra el Coronel Chaves expresa que el Círculo debe elevar un Memorándum a las altas autoridades nacionales solicitando la reglamentación de nuestro escudo, cuya importancia no debe escapar a nadie, pues el correcto uso de los símbolos de la patria debe guardar relación estricta, en todas sus faces, con los preceptos de la Heráldica, cuya vigencia es universal. Seguidamente es escuchada la opinión de los demás señores presentes quienes coinciden totalmente con lo hasta ahora expresado al respecto de los símbolos de nuestros escudos y su cabal posición de conjunto, aceptándose la moción concreta del Coronel Chaves; pero antes se resuelve realizar otra reunión el día 26 del corriente a las 17 horas, para lo que se extenderán invitaciones a importantes personalidades de nuestras instituciones históricas, así como de, estudiosos de la materia. Sin otra cosa que tratar, se levanta la reunión, siendo las 19.45 horas". JUAN E. MELGAREJO Cap. Transm. (SR) Secretario DIA 26 DE JUNIO DE 1975 ACTA N° 5 "En la ciudad de Asunción, capital de la República del Paraguay, reunidos en el local social del Círculo de Jefes y Oficiales en Situación de Retiro de las FF. AA. de la Nación, los Señores Miembros del Departamento Técnico del Salón de Bronce del Círculo, y presidido por su titular, el General de Brigada S R ., Don Francisco Vega Gaona y los Miembros Cap. de Frag. S. R., Eloy Recalde, Bernardino Duarte, el Cap. S. R . , Juan E. Melgarejo, el Señor Juan B. Gili Aguínaga, Presidente del Instituto de Numis-mática del Paraguay, el Seòor Carlos Alberto Pussineri Scala. Director de la Casa de la Independencia, el Doctor Marcos Laconich, Presidente de la Academia Paraguaya de la Historia, el Dr.. Antonio Ramos, Historiador Nacional y Señor Harold Ronnebeck; Heraldista Nacional, quienes se constituyen en Sesión a los efectos de dar cumplimiento a lo dispuesto en la Sesión anterior, llevada a cabo el día 20 de los corrientes, para tratar de definir lo relativo al Escudo Nacional y el trámite posterior a realizar. Abre el acto el General Vega Gaona, expresando su satisfacción por la presencia de tan distinguidas personalidades para estudiar los asuntos relativos a nuestro Escudo Nacional, principal preocupación del señor Presidente del Círculo de Jefes y Oficiales en Situación de Retiro de las FF. AA. de la Nación en especial; y del Departamento Técnico del Salón de Bronce en general, por el hecho de que, en el panel central debe fijarse los dos escudos, el de la República y el de Hacienda, símbolos de la Patria que hasta la fecha se viene usando en forma por demás anárquica por lo incorrecta. A una pregunta del Doctor Laconich, usa de la palabra el Cap. Melgarejo
  • 12. explicándole pormenorizadamente los deseos del presidente del Círculo y la preocupación del Departamento Técnico, por cuanto el trabajo que se quiere realizar tiene importancia histórica, y no sería el caso de reincidir en la anomalía explicada por el Gral. Vega Gaona, que es el de usar o fijar en la cabecera del panel central el símbolo de nuestra Patria en forma indebida. En el uso de la palabra el señor Ronnebeck, expone técnica y detalladamente sus conclusiones sobre lo que debe ser y la forma de fijar nuestro escudo nacional, recomendando que se redacte un cuestionario con todo lo relacionado al escudo nacional desde la fecha de su creación, las diferentes formas que se le dio para su uso etc., etc., de manera que el Círculo de Jefes y Oficiales en Situación de Retiro de las FF. AA. de la Nación, sea la iniciadora de un movimiento institucional ante las autoridades nacionales para obtener la reglamentación de la composición de nuestro escudo, de manera a dar un corte definitivo a su conformación y uso. El Doctor Laconich mociona concretamente que se designe para la tarea de la redacción del cuestionario al señor Harold Ronnebeck, por ser la persona más llamada para hacerlo, por cuanto esa es precisamente su especialidad. El Doctor Duarte mociona que dicho cuestionario, una vez que el señor Ronnebeck lo haya terminado y entregado su original al señor Presidente del Círculo, esta Institución la envíe al Doctor Laconich, Presidente de la Academia de la Historia, para que, por su intermedio, se disponga la providencia exacta sobre la conformación y uso de nuestro escudo; y con estos antecedentes, elevar el Círculo, como promotora de la iniciativa, un petitorio a las autoridades nacionales de reglamentación y uso de nuestro escudo. Finalmente el señor Ronnebeck agradece la confianza depositada en su persona para llevar a cabo las tareas sobre los antecedentes de nuestro escudo, prometiendo elevar al Presidente del Círculo un original de ese trabajo en la brevedad posible. El General Vega Gaona agradece a los presentes por su espíritu de colaboración: y no habiendo nada más que tratar, se levanta la Sesión siendo las 20 horas diez minutos del día 26 de Junio del año mil novecientos setenta y cinco". JUAN E. MELGAREJO Capitán de Transm. (S.R.) Secretario En cumplimiento a la recomendación emanada de las memorables reuniones conjuntas entre los Institutos Históricos mencionados y el Círculo de Jefes y Oficiales Retirados de las FF.AA. de la Nación, de fecha 14 de Agosto de 1975 elevé a consideración de ellas, sendos legajos con 80 páginas cada uno, con exposición de motivos, fundamentos, investigaciones realizadas, ilustraciones y anteproyecto, como curso de acción a seguir para la búsqueda de la pertinente reglamentación por la Ley de las características y determinación del uso de nuestros Símbolos Patrios. A la fecha de edición, estas investigaciones y el ante-proyecto de reglamentación de caracterización y uso de nuestros blasones, fueron elevados por el mencionado Círculo a consideración del Congreso Nacional. I PARTE SEÑALIZACIÓN DE ERRORES Y SUGERENCIAS CAPITULO I GENERALIDADES La sin par y antojadiza confección y uso de nuestros SÍMBOLOS PATRIOS está deformando y desvirtuando grandemente la verdadera imagen de esos sagrados Símbolos Nacionales, que a la larga pueden acarrear la consiguiente pérdida del fervor patrio y la desconsideración en el plano internacional respectivo.
  • 13. Efectivamente, nos referimos expresamente a los Símbolos Patrios, incisos 1, 2 y 3 del Art. 4° de la Constitución de la República del Paraguay, sancionada por la Convención Nacional Constituyente el 25 de Agosto de 1967, y promulgada en la misma fecha por el Poder Ejecutivo; y en tal sentido por la presente señalamos con la seriedad y responsabilidad que el caso requiere, la desnaturalización de que están siendo objeto dichos Símbolos Patrios, tanto en su confección como en su uso. Culpable de esta situación es el general desconocimiento de la Ciencia del Blasón, que genera la mera concepción y el libertinaje artístico de nuestros Símbolos Patrios, y en cierta medida inclusive como un tardío brote del legionarismo apátrida. La falta de una atención idónea no siempre hace posible el uso de escudos, sellos y pabellones con la perfección deseables, y el uso indiscriminado de los escudos confeccionados con extravagancia, en las más de las veces empleándose piezas honoríficas y distintivos militares no instituidos, trae aparejada una tremenda confusión en la opinión pública respecto al verdadero valor de esos Símbolos. La desvirtuación de los valores de los Símbolos Patrios y el desconocimiento de la Ciencia del Blasón pueden traer como consecuencia como dijéramos, la pérdida del fervor patriótico y el desprecio a los valores propios de la Escudería. En círculos internacionales se echan de menos nuestros escudos por presentárselos como las así declaradas "Armas Falsas", esto en razón de su apartamiento de la ley fundamental de su institución, como así mismo por incurrir en aberraciones y errores específicamente definidos por los preceptos heráldicos. Lo más hermoso de la especie humana es precisamente el carácter propio, el espíritu peculiar y el patriotismo genial de los diversos pueblos que habitan la tierra; y en defensa contra la pretensión de fundirlos y confundirlos, la raza guaraní ha vertido generosamente su sangre, marcando pruebas de sacrificio y patriotismo sin parangón en la historia de la humanidad. Nuestros Símbolos Patrios, esencia de nuestra nacionalidad fueron sagrados para los padres de nuestra Patria, para los defensores de nuestra territorialidad, y son sagrados para todos nosotros, y por ende debemos esforzarnos para que lo sean también para nuestros hijos, asegurando así la inmortalidad histórica del Paraguay. Tal es así de anárquica esta situación que, como ejemplo, cito seguidamente un abecedario completo de surtidas versiones del Escudo Nacional y de Hacienda empleados en nuestro país, que por sí ya dan una idea del desorden que envuelve a nuestra Armería. a) Inscripción "República del Paraguay" directamente en el campo del Escudo Nacional. b) Inscripción "República del Paraguay" en una Bordura del Escudo Nacional. c) Inscripción "República del Paraguay" en el campo del Escudo de Hacienda. d) Inscripción "República del Paraguay" en una Bordura del Escudo de Hacienda. e) Estrella con rayos refulgentes en el Escudo Nacional. f) Escudo Nacional cargando con una Filiera tricolor. g) Inscripción "Paz y Justicia" directamente en el campo del Escudo de Hacienda. h) Presentación del León en posición Siniestra, Leopardada y Mornada en el Escudo de Hacienda. i) Escudo Nacional de forma Ovalada. j) Escudo Nacional sin la inscripción "República del Paraguay". k) Escudo de Hacienda de forma Ovalada. I) Escudo de Hacienda con Palma y Oliva. II) Escudo Nacional, distorsionado, con estrella roja. m) Escudo de Hacienda con Palma y Oliva como ornamento exterior, de forma ovalada, e
  • 14. incluso con una estrella naciente. n) Escudo Nacional con la estrella en el centro, sin inscripción República del Paraguay, de forma ovalada, con Palma y Oliva como ornamento exterior y los colores argentinos en el campo! ñ) Escudo Nacional y de Hacienda, juntos, ovalados, llevando la inscripción "República del Paraguay" en una cinta flotante, ambos con Palma y Oliva. o) Escudo Nacional de forma exterior polaca. p) Escudo de Hacienda con León diestro. q) Escudo de Hacienda con León parado. r) Escudo de Hacienda en jurisdicción del Escudo Nacional. s) Descripción en texto escolar, con aprobación Oficial, señalándose al Escudo Nacional como ubicado en el reverso del Pabellón Patrio. t) Escudo Nacional sin inscripción "República del Paraguay" y en vez de Palma y Oliva, carga con Palma y Roble. u) Decreto autorizando inscripciones en el campo de los escudos. v) La Orden Nacional al Mérito, instituida por el Mcal. Francisco Solano López, máxima condecoración paraguaya y la tercera más antigua de América, se presenta unas veces con la Palma y Oliva en ese orden y otras con la Oliva y la Palma, indiscriminadamente. w) Escudo Nacional con la inscripción "Rep. del Paraguay" en una cinta ondulante como ornamento exterior, en la barba del escudo. x) Escudo Nacional, integrado solamente con dos Palmas, en vez de Palma y Oliva. y) Escudo Nacional, cargando un moño. z) Escudo Nacional sin inscripción: República del Paraguay, y sin forma exterior alguna, ni circular, ni ovalada, ni polaca, es decir, amorfa, y etc. etc ... Esto resulta fácil verificar si nos fijamos en los Ministerios, Iglesias, Escuelas, Colegios, Facultades, Entes Estatales, Militares y Civiles, Museos, Archivos y Bibliotecas, etc. Constatamos así ciertamente que nuestros blasones, tan sagrados a nuestros sentimientos nacionalistas, son confeccionados y usados en forma libérrima, extravagante y antojadiza. Esta publicación contiene más de cien copias gráficas de diferentes versiones de Sellos y Escudos empleados en nuestro país en toda época. Cito seguidamente algunas versiones de nuestros Símbolos localizados en: - Museo Histórico Militar: a) Banderola de bronce con Escudo de Hacienda: León sentado de perfil. b) Ataúd alegórico conteniendo figura del Gral. Díaz en yeso: tapa con grabado del Escudo de Hacienda con León sentado mirando al diestro. c) Bandera Nacional con Escudo de Hacienda: León sentado mirando al diestro. d) Bandera Nacional con Escudo de Hacienda: León acostado. - Edificio del Congreso: Ostenta en lo alto del frontispicio, relieve del Escudo Nacional y el de Hacienda, ambos ovalados y ambos con Palma y Oliva. - Iglesia Catedral: Frontispicio con relieve del Escudo Nacional y el de Hacienda, en versión mixta, es decir, ambos en una; misma ejecución. - Iglesia de la Recoleta: En lo alto de la fachada presenta el Escudo de Hacienda con el León acostado. - Correo Central: Primera estampilla paraguaya, alegórica al Escudo de Hacienda, de forma ovalada, con el León rampante, siniestro y abrazado a la pica y el gorro frigio, en posición danzante. - Municipalidad de Asunción: Tanto en la ordenanza de institución del Escudo capitalino como
  • 15. en la confección del mismo se notan aberraciones heráldicas. - Fuerzas Armadas de la Nación: Según el Manual de Uniformes del Ejército, Art. 31, inciso c, se establece: "Las gorras de todos los miembros del ejército llevarán como distintivo del Ejército Nacional, el Escudo Nacional (fig. 22) bordado en hilo metálico dorado sobre paño de color del arma o servicio correspondiente". Ni la figura 22 del ME-40-400 ni las llevadas en las gorras del Ejército Nacional corresponden al Escudo Nacional, siendo eso sí, dos figuras del citado blasón: la corona de ovación y la estrella, pero que, ellas dos por separado, no conforman el escudo de armas del Paraguay! Sí, pudieran ser considerados como muy dignos Escudos de gorra. Los demás componentes, como ser: la inscripción del título de nuestra Nación y la pieza honorífica de primer grado que es la Orla, no están representados en tal Escudo de gorra. Además, el Escudo Nacional es circular y no ovalado. En el Escudo de Gorra de la Aeronáutica se constata igualmente que solamente lleva dos figuras del Escudo Nacional, lo cual contradice el Art. 73 del Manual de Uniformes de esa Ar-ma, que establece el escudo de gorra como sigue: "un par de alas extendidas de 10 x 4 cms, en cuyo centro se encuentra un Escudo Nacional…". La Armada por su parte, establece en su reglamento un expreso escudo de gorra sin mencionar el Escudo Nacional. - Policía de la Capital: Según el reglamento de uniformes, Art. 41 dice: "Llevarán en la gorra el Escudo Nacional". En la práctica, esto es diametralmente distinto: En la gorra llevan solamente dos figuras del Escudo Nacional: la corona de ovación y la estrella, con el agravante que la corona de ovación no está compuesta de Palma y Oliva sino de una Palma y un Roble! - Policía Municipal de Tránsito: En el Uniforme de la Policía Municipal Femenina de Tránsito se constatan a un mismo tiempo dos Escudos Municipales distintos: uno de forma exterior española y otro de forma polaca. Mereciendo igualmente la heráldica militar, ciencia heroica por excelencia, una atención ejemplar, el Comando en Jefe de las FF.AA. de la Nación ordenó la creación de una Comisión de Heráldica Militar, dependiente de él, que ya se ocupa del blasonamiento de las distintas armas y entes militares de nuestro país. - Escudería Municipal: Con más de 160 Municipios de la República apenas si 10 de ellos tiene su blasón parlante! Por consiguiente, y refutando a priori a quienes manifiesten que nuestros escudos son tradicionales debiéndoselos respetar así como están, a más del argumento constitucional y heráldico, enfatizo que ningún Escudo Nacional ni de Hacienda fueron tradicionales -salvo como están instituidos en nuestra Carta Magna- no precisamente porque hayan sido expresamente modificados por la Ley, sino porque sencillamente no existió una única versión cuyo aspecto, jurisdicción, forma y contenido haya durado lo suficiente para que así pueda ser conceptuado, según podrá establecerse en esta misma publicación; ya que en ningún momento ni modo desde luego puede establecerse cuáles de esos escudos son los tradicionales entre los que están en uso, ni mucho menos, desde luego, cuáles están en uso entre los que serían considerados tradicionales. Esto merced a que nunca se dispuso de un departamento de heráldica en la estructura del Gobierno en nuestro país ni de un instituto heráldico, a nivel Institucional, lo que permitió que nuestros blasones cayeran en manos de dibujantes y artistas nacionales y extranjeros, que desnaturalizaron en todo tiempo a su mero antojo dichos Símbolos Patrios.
  • 16. Sintetizando, se constata que nuestros blasones son simplemente concebidos de manera artística, sin considerarse los principios heráldicos que rigen esta materia, ni la ley fundamental de la Nación. Y si a esto sumamos el variado surtido de versiones de Escudos Nacionales y de Hacienda -para asombro del mundo-, instalados al frente de nuestras representaciones diplomáticas y consulares en el extranjero, tendremos por resultado, una imperiosa necesidad de ocuparnos de este asunto, a fin de dar a nuestros símbolos la real imagen que le corresponden. Que nuestro país posee dos escudos en su pabellón es cosa sabida, pero la aparición de un surtido tan vasto de imágenes distorsionadas de nuestros blasones acarrea una tremenda con fusión. Y justamente la ausencia de un ente heráldico local, ha obligado a muchas personas a apadrinar una de esas versiones. La ciencia heráldica viene sin embargo en ayuda para caracterizar correctamente tales símbolos: Los Escudos y Sellos de nuestra Patria. Por su parte, la propia Constitución vigente, permite la reglamentación de las características de los Símbolos Patríos - indicado en el apéndice final del Art. 4°- y así entonces el anacronismo de nuestra Escudería podrá ser superada positivamente. En la señalización de errores y sugerencias elevada a las autoridades sobre este asunto ya indicábamos: "Profesores, Escritores y excelsos Historiadores de nuestra Patria, en ausencia de la Ciencia Heráldica, son los verdaderos protectores de nuestros Símbolos Nacionales y por consiguiente merecedores de nuestro particular reconocimiento". Este es un pensamiento que siempre lo mantendremos incólume! A las cosas siempre se las llaman por sus respectivos nombres o terminología específica y cada asunto está tratado por su respectiva ciencia. Es natural también entonces que el blasón sea tratado por la Ciencia Heráldica, pues es precisamente ella la que trata todo lo relativo a los escudos y su blasonado, es decir, su creación e interpretación. Legisla sus formas, distribución, piezas, figuras, esmaltes, metales, brisuras, cimeras y adornos. Los preceptos, léxico y simbología heráldica que rigen esta ciencia son precisos y bien definidos. Por quien si no? Queda demostrada, que la marginación de esta ciencia en el manejo de nuestra armería acarrea una tremenda confusión y la consiguiente desnaturalización de la misma. "El conocimiento del Símbolo tiene, y ha tenido siempre, una gran importancia Histórica, y para descifrarlo e interpretarlo, se han empleado una serie de métodos, normas y sistemas, que prevé el blasón". "La Ciencia Heráldica no se considera como glorificación de una casta privilegiada, sino únicamente como Ciencia Auxiliar de la Historia". La continuada y ancestral desvirtuación de los verdaderos valores de nuestros escudos por el desconocimiento básico del blasón, ha llevado a muchas gentes a interpretar a nuestros SÍMBOLOS PATRIOS de manera equivocada; y ello se refleja también en el pensamiento - errado por cierto- de quienes creen que ahora deseamos generar un nuevo escudo. NO! Nada más falso! No son nuevas creaciones, sino los únicos que constitucionalmente y conforme a la heráldica pueden ser blasonados: los legítimos escudos del Paraguay! Y por el contrario, debiéramos asombrarnos por cierto de la enorme cantidad de versiones de Escudos y Sellos así llamados "Nacional y de Hacienda" que existen en uso en nuestro país y en el extranjero, convirtiéndonos en tal sentido en verdaderos recordistas, y que por lo embozado de sus apariciones, pasan desapercibidos sin despertar la justa indignación ni airadas reacciones, por las irregularidades que presentan! Dios permitirá que el patriotismo sea virtuosamente iluminado, para que la dignificación de nuestros Símbolos Patrios sea una bella realidad.
  • 17. La prueba irrefutable de la genuinidad y autenticidad! de nuestros símbolos está en la propia Constitución Nacional, y para su comprensión invito muy cordialmente a la concentración de la lectura del texto del Art. 4° de la misma, que transcribimos inextenso: “Art. 4° - Los Símbolos de la Patria son: 1- El Pabellón de la República consistente en una bandera compuesta de tres franjas horizontales iguales: colorada, blanca y azul, llevando de un lado, en el medio, el Escudo Nacional, de forma circular, goce se describe como una palma y una oliva entrelazadas en el vértice y abiertas en la parte superior, resaltando en medio de ellas una estrella y en la orla una inscripción que dice: República del Paraguay; y en el reverso„ en la misma posición, un círculo con la inscripción distribuida: Paz y Justicia, figurando en el centro un león en la base del símbolo de la libertad; 2 El Sello Nacional, que reproduce el escudo primeramente descripto; 3 El Sello de Hacienda, que reproduce el escudo del reverso del Pabellón, más la inscripción que dice: República del Paraguay, en la orla; 4 El Himno Nacional, cuyo coro comienza con la frase: Paraguayos, República o Muerte; 5 La Composición musical: Campamento Cerro León. La Ley reglamentará las características de los símbolos de la Patria, en cuanto no estén previstas en la resolución del Congreso General Extraordinario del 25 de Noviembre de 1842, y determinará su uso. Hasta aquí el Art. 4° de nuestra Constitución Nacional vigente. Es decir entonces que toda presentación y uso de forma no estipulada en, ella, es inconstitucional! Para desarrollar las aseveraciones expresadas en esta investigación, se pasa a fundamentar constitucional y heráldicamente el blasonado correcto de nuestros símbolos. En tal sentido deseo señalar que ''la simbología debe ser considerada como cualquier ensayo de definición de una realidad abstracta, sentimiento o idea invisible a los sentidos, que ha tomado realidad bajo forma de imagen o de objeto; y las Reglas de la Simbología Aplicada deben seguir a las de la Heráldica, que en el fondo rige a aquella en todas sus representaciones".