Los países asiáticos en desarrollo que incorporaron más tecnología ganaron participación en el mercado mundial entre 1985 y 2011. Estos países incluyen a Filipinas, Hong Kong, Indonesia, Malasia, Corea del Sur, Singapur y Tailandia. Cambiar la matriz productiva hacia sectores más tecnológicos puede conducir a un alto crecimiento sostenido de la productividad y el empleo.