Marcos Vargas experimenta un cambio al regresar de la selva a atender a su madre enferma, pasando de ser un hombre racional a alguien sumergido en la soledad de la selva. Se interna en la selva venezolana no para huir de la justicia ni rescatar a su amada, sino para abandonar a su novia después de ser exonerado legalmente por la muerte de Cholo Parima.