1. UNIVERSIDAD PANAMERICANA DEL PUERTO
FACULTAD DE CIENCIAS ECONOMICAS Y SOCIALES
ESCUELA DE ADMINISTRACIÓN DE EMPRESA
CÁTEDRA: DISEÑO Y EVALUACIÓN DE PROYECTOS
ECONOMIA NARANJA
Autor:
Arcaya Dhaul
CI. 27.617.29
Valencia, Junio del 2022
2. La denominada economía naranja, también definida como industria creativa, en
los últimos años se ha desarrollado con mayor auge, logrando popularizar dicho
término en países latinoamericanos, debido al éxito que ha tenido en términos de
crecimiento y desarrollo para los mismos. De esta manera, se define como una
herramienta para el desarrollo social, económico y aporte cultural en las regiones,
tratándose de un desarrollo creativo y de carácter cultural protegiendo y abogando
por los derechos de cada región.
De esta manera, la economía naranja es una herramienta de desarrollo cultural,
social y económico, desde las regiones. Se diferencia de otras economías por el
hecho de fundamentarse en la creación, producción y distribución de bienes y
servicios, cuyo contenido Este modelo cuenta con herramientas de carácter cultural
y creativo se puede proteger por los derechos de propiedad intelectual. Esta, busca
propiciar condiciones para generar empleo digno en el sector cultural. Apoyar la
generación y materialización de nuevas ideas creativas y productos innovadores.
Favorecer la transmisión de conocimiento. Fortalecer los saberes ancestrales y las
prácticas del patrimonio cultural inmaterial. Es decir, busca desarrollar el potencial
económico del sector cultural y creativo, generando condiciones para la
sostenibilidad.
En otras palabras, las actividades que conforman la Economía Naranja son
aquellas que hacen parte de las artes y el patrimonio cultural material e inmaterial,
las industrias culturales y las industrias creativas, que se desarrollan a través de
una estrategia que reúne los pilares de organización e intervención de la política de
Economía Naranja, en los que participan las diferentes entidades del gobierno
nacional. Esta iniciativa representa una articulación sin precedentes para trabajar
por la economía cultural y creativa del país.
Este término, definido por Buitrago & Duque (2013); como industria creativa, se
ha popularizado en los últimos años en países latinoamericanos, debido al éxito que
3. ha tenido en términos de crecimiento para los países desarrollados, que, a través
de la innovación, han creado riqueza y valor agregado empujando a países
emergentes a comenzar y adaptar estas buenas prácticas. De acuerdo con el índice
mundial de innovación del 2018, realizado a 126 países teniendo en cuenta 80
factores, clasificándolos desde la propiedad intelectual hasta la creación de
investigaciones científicas, la actividad innovadora es un instrumento clave para el
desarrollo económico y humano en las sociedades. Según el experto John Howkins,
creador del concepto y especialista en las industrias creativas, la economía creativa
comprende los sectores en los que el valor de los bienes y servicios se fundamentan
en la propiedad intelectual, crear una ventaja competitiva a nivel global y hacer que
las ideas creativas logren importancia en los derechos de propiedad intelectual
Es importante Porque las libertades creativas están en el centro de las políticas
de desarrollo humano, como lo expresa el Premio Nobel en economía, Amartya Sen.
“El fomento del bienestar y las libertades que buscamos en el desarrollo no puede
sino incluir el enriquecimiento de las vidas humanas a través de la literatura, la
música, las bellas artes y otras formas de expresión y práctica cultural, que tenemos
razones para valorar. De una forma u otra, la cultura envuelve nuestras vidas,
nuestros deseos, nuestras frustraciones, nuestras ambiciones y las libertades que
buscamos. La libertad y la oportunidad para las actividades culturales se encuentran
entre las libertades básicas cuya mejora puede considerarse constitutiva del
desarrollo
Así pues, se determina y se entiende que l a economía naranja busca fortalecer
y crear mecanismos que permitan desarrollar el potencial económico de la cultura y
generar condiciones para la sostenibilidad de las organizaciones y agentes que la
conforman, en concordancia con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Se
pretende propiciar condiciones para generar empleo digno en el sector cultural,
apoyar la materialización de nuevas ideas creativas y productos innovadores,
fortalecer los saberes ancestrales, las prácticas del patrimonio cultural y la
transmisión de conocimientos tradicionales.