1. PARA REFLEXIONAR… UNA PARTE DE MÍ
En ocasiones las adversidades no nos dejan pasar mucho
tiempo juntas, pero los años más maravillosos los disfruto a tu
lado. Eres mi tierna y necesaria compañía. No importa que tan
pequeña o grande seas, la edad es lo de menos: somos tan
diferentes, sin embargo, en la nariz, en la boca, en algún rasgo
somos tan parecidas que no podemos negar que procedemos
del mismo lugar. De algo estoy plenamente segura, jamás te
abandonaría. En cada paso, o en cada logro estaré ahí. No iré
demasiado rápido, porque quizá te extravíes en el camino, ni
demasiado lento porque tal vez no te interese seguirme, pero sí
junto a ti. Lo más maravilloso fue haber sido escogidos para
nacer del mismo vientre, y llevar la misma sangre. Eres mi
bendición, hermana, porque eres una parte de mí.
Dios me concedió la gracia de tener una hermana.
Cuántas cosas hemos compartido durante tantos años
Sabemos que nos unen lazos que permanecerán mientras
vivamos.
Hemos compartido juntas la escuela, juntas esperábamos los
reyes, juntas disfrutábamos los juegos, juntas disfrutábamos la
Navidad.
Juntas hemos vivido todas las cosas buenas y malas, las salidas
con nuestros padres, las visitas a familiares.
Mi hermana conoce mis debilidades y yo conozco las suyas.
Por tanto tiempo que hemos compartido juntas mi hermana es
mi amiga.
Con ella puedo llorar de alegría y llorar de pena, pues sé
que siempre saldré consolada de su lado.
El cariño que me une a mi hermana no sabe de distancias ni de
enojos, ella es mi amiga, con la cual puedo compartir miles
de secretos y esperar sus sabios consejos de hermana.
2. Nos unen tantas cosas
desde nuestras raíces, desde nuestros padres terrenales, hasta
nuestro Padre Celestial.
Nunca nos faltan palabras para contarnos nuestras cosas.
Nuestra forma de ver las cosas no siempre coincide pero
si siempre llegamos al mismo fin, que es la felicidad y el amor
de nuestra familia.
Muchas veces que nos miramos no podemos ser más
iguales, otras en cambio, somos ¡tan diferentes!
Pero nuestro amor es incondicional.
Lo mejor de que seamos hermanas es el sentimiento de amor
profundo que nos tenemos, las dos tomaremos nuestros propios
caminos, tendremos nuestros propios hogares, lucharemos de
diferentes maneras, gozaremos de nuestros propios hijos, pero
siempre cerca una de la otra, por cualquier necesidad.
Contar contigo ha sido un regalo que Dios ha puesto en mi
vida, y deseo agradecérselo de todo corazón.
"Que la vida te colme de bendiciones".
Que prometo estar a tu lado para compartirlas.
Una hermana es aquella persona con la que podrás contar,
ella estará para ti en todo momento.
Las hermanas tienden a ser como unas amigas, esas que están
contigo en las buenas y en las malas.
Es una persona que por lo más enojada que estés con ella, no
te puedes pelear porque son de la misma sangre. Una
hermana nunca te va a traicionar, no al menos una buena
hermana.
Es leal, cariñosa, siempre tiene las palabras adecuadas para
hacerte sentir mejor en esos días, ella siempre tendrá una
sonrisa para ti aunque este por los suelos.
3. Eso es una hermana y la quiero en verdad quiero a mi
hermana, ella es la única que me entiende de pies a cabeza,
conoce mis defectos y también mis virtudes, ella jamás te
mentira siempre te dirá la verdad por más cruel que esta sea.
Gracias Dios por una Bendición tan grande como ella algo
bueno debí haber hecho para que la pusieras en mi vida.