2. • Un grupo de científicos, investigadores y académicos, entre
ellos Elon Musk y Stephen Hawking, han advertido que una
carrera armamentista de inteligencia artificial pronto podría
desarrollarse si no se toman medidas preventivas.
• Una carrera mundial de armamento es "virtualmente
inevitable" si cualquiera de las grandes potencias militares
sigue adelante con el desarrollo de armas de inteligencia
artificial (IA), advirtió el grupo en una carta abierta
presentada en la Conferencia Internacional Conjunta de
Inteligencia Artificial en Buenos Aires.
3. • Las armas autónomas (imaginemos Terminators armados,
vehículos inteligentes con ametralladoras y drones
bombarderos) no son sólo cosa de ciencia ficción. Como
señala la carta, algunos sistemas de armas son "factibles
dentro de unos años, no décadas."
4. • "[Las armas] no requieren materias primas costosas o difíciles
de obtener, por lo que se volverán omnipresentes, todas las
potencias militares importantes podrán producirlas en masa
de forma barata", dice la carta.
• "Las armas autónomas son ideales para tareas tales como
asesinatos, desestabilización de naciones, represión de
habitantes y exterminio selectivo de un grupo étnico en
particular", señala la misiva. "Por lo tanto, creemos que una
carrera militar con armas de IA no sería beneficiosa para la
humanidad."
5. • Las guerras actuales de alta tecnología se libran
principalmente a través de máquinas de control remoto. El
ejército de Estados Unidos tiene actualmente el vehículo
MADSS, un rover de 635 kilos que lleva equipo y dispara con
una ametralladora. También cuenta con el Protector, un rover
de 453 kilos que escanea en busca de bombas y dispara una
bazooka.
• Pero los ejércitos ya están experimentando con sistemas
automatizados. El sistema israelí "Iron Dome" detecta y derriba
cohetes entrantes. El sistema de " Phalanx CIWS" usado por los
buques de guerra estadounidenses hace lo mismo con un
arma giratoria Gattling. El sistema C-RAM hace lo mismo en
tierra usando un camión.
6. • En abril, la Escuela de Derecho de Harvard y Human Rights
Watch publicaron conjuntamente un informe que pide la
prohibición de las armas autónomas.