1. La Evolución de
la madera
Andrimar Cuarez
C.I 27.733.973
I.U.P Santiago Mariño
Extencion: Pto Ordaz
2. Las ramas de los árboles fueron los elementos
más antiguos manejados y manipulados por el
ser humano para su supervivencia. Por su
abundancia, accesibilidad y fácil manejo, la
madera ha sido un elemento clave en nuestra
evolución y se ha identificado, junto con la
piedra, como uno de los materiales esenciales.
De hecho, su etimología deriva del vocablo
latino “materia”. La madera se encuentra en la
naturaleza en forma de cuerpo leñoso en
árboles y arbustos, con una estructura
polimérica de fibra de celulosa en forma de
tubo, acompañada de otras sustancias también
aprovechables, como las resinas, los aceites,
los taninos o diversos azúcares.
3. La producción de herramientas, útiles y armas marcó el comienzo
de su utilidad para los primeros homínidos, pero pronto
descubrimos su capacidad de combustión y fuimos capaces de
aplicar este material para controlar y producir el fuego. El uso de la
madera como combustible marcó una etapa clave en nuestros
orígenes, ya que mediante el fuego se superó el ritmo natural
marcado por la luz solar, aumentando las horas de convivencia. La
madera ejerció de algún modo como material determinante para
la cohesión social. El fuego incrementó las relaciones entre los
individuos, mejoró los sistemas de protección frente a los grandes
depredadores y transformó nuestros sistemas de alimentación y
conservación de alimentos.
4. La madera ha constituido uno de los materiales de
construcción más empleado por el ser humano durante
milenios. Éste utilizaba los elementos cercanos que le ofrecía la
naturaleza como la piedra o los troncos para cubrir sus
necesidades básicas de refugio y transporte. La llegada de la
revolución industrial durante los siglos XVIII y XIX permitió el
desarrollo de otros productos como el hormigón armado y el
acero que debido a la sencillez de manufactura en serie y a la
capacidad de cubrir mayores luces, se erigieron
progresivamente como materiales estructurales predominantes
en el siglo XX relegando la utilización de la madera a
construcciones de menor entidad.
5. En las últimas décadas se ha producido un redescubrimiento
de la madera, especialmente en los países industrializados,
donde la conciencia contemporánea aboga por la necesidad
de proteger los recursos naturales. Las grandes cantidades
de energía y las elevadas emisiones de gases de efecto
invernadero, necesarias para producir materiales de
construcción de alta tecnología como el acero, el hormigón
o el aluminio, son incompatibles con este concepto
creciente de sostenibilidad ambiental. En este sentido, la
madera constituye la estructura de soporte del árbol y
presenta la ventaja de ser un producto estructural en
origen, sin necesidad de un proceso de transformación
industrial asociado con el elevado coste energético que ello
supone. El empleo de madera como material de
construcción aporta además grandes beneficios ecológicos.
Los elementos de madera colocados en obra fijan el
carbono capturado en sus paredes celulares durante toda la
vida útil de la estructura, contribuyendo a un desarrollo
plenamente sostenible.
6. El grado de transformación que ha sufrido la madera como
elemento estructural ha ido aumentando desde los orígenes
hasta nuestros días. Las primeras aplicaciones que tuvo la
madera en construcción fue el aprovechamiento del fuste
descortezado del árbol o rollizo. Posteriormente, el
escuadrado de la sección permitió una mayor flexibilidad de
montaje y una mejor adaptabilidad geométrica con el resto
de materiales. Se utilizaban piezas enterizas procediendo
cada una de ellas de pies distintos.
Para aumentar las luces estructurales en cubiertas se
desarrollaron las armaduras de celosía en forma de cerchas
y para aumentar la altura en edificaciones, las
construcciones entramadas de madera de gran escuadría. El
mayor problema al que se enfrentaban este tipo de
construcciones era la solución de los enlaces entre las piezas
de madera.