1. NUESTRA GENTE
Primero, las personas. Por Ágora pasan cada día gentes de la Agra do Orzán, del
Ventorrillo, de Mariñeiros, de Peruleiro, de A Silva, de Visma…
Todas ellas forman parte de nuestra Biblioteca. Las que llevan aquí desde que nacieron
y las que llegaron ayer, o anteayer. Las que llevan en los ojos la memoria de la Gramela
y de Visma y las que traen consigo imágenes de Dakar o Montevideo o Marraquetch o
Malabo, para compartirlas con los que estamos dispuestos a ver y a escuchar. Las que
vinieron de la Costa da Morte y las que llegaron de las costas de Senegal. Las que
mudaron de barrio o cambiaron de aldea.
Jóvenes y mayores, niños y niñas. Personas con arrugas en la cara y en las manos,
aradas por el tiempo, y personas con la piel de melocotón en sus pocos meses de vida.
Todas y todos convivimos en este territorio de viento verde, de gentes trabajadoras,
abierto al Atlántico y sus caminos.
Somos de aquí
Donde estamos ahora, debajo de esta Ágora de las palabras, crecieron antes flores y
viajan aguas subterráneas, así nos lo han contado. Y hoy queremos que, como un río,
de aquí emerjan las voces y las memorias de la gente que habitó y habita este entorno:
la del señor Paco de Visma, la de Nieves de Alarcón de A Silva, la de Lecho de
Mariñeiros, la de la señora Carmen festejando en la calle Cuba, … ellos y ellas son el
tesoro de la memoria y de la identidad, imprescindible punto de partida para construír
2. el futuro. Muchos de ellos llegaron hace décadas desde la comarca de Bergantiños, un
área de procedencia muy común en esta zona. Otros y otras ya nacieron aquí. Da igual.
En el día a día, y en los cambios de esta zona, tuvieron y tienen mucha relevancia los
hombres y mujeres que, colectivamente, piensan y proponen para el bien común y
activan, desde abajo, ciudadanía y vecindad. Personas como Xosé Ramón Calvete, de la
Asociación de Veciños de San Pedro de Visma, como Mariluz Martínez y Carlos Suárez,
de la Asociación de Veciños da Agra do Orzán, como Rosa María Barreiro o Xosé Luís
Brandariz, de la AA.VV. do Ventorrillo, o como Ana María Rodríguez, de la AA.VV. de
Peruleiro-Mariñeiros. Los colectivos de los que forman parte son elementos claves del
discurrir de los barrios de la zona Ágora.
Caminos de ida y vuelta
En esta Galicia acostumbrada a emigrar por el mundo adelante conocemos
perfectamente la herida personal del desarraigo, de la distancia con los nuestros, de la
inquietud por la vida nueva que hay que construír. El modelo de emigración que
nosotros vivimos fuera es el que ahora vemos que se reproduce dentro: los que vienen
primero llaman por los que vienen después, normalmente conocidos, familiares,
vecinos.
La mayoría de los extranjeros que viven en esta zona son inmigrantes de origen
africano (fundamentalmente del Senegal y de Marruecos) o sudamericana
(especialmente del Uruguay, de Colombia e de la Argentina).
3. Aprender las lenguas para hacerse entender (el gallego y el español), buscar trabajo,
conseguir un lugar para dormir, … cuesta esfuerzos, disgustos, incomprensiones. Los
inicios non son fáciles. Por eso al llegar aquí lo habitual es agruparse en colectividades
de apoyo (Aseser Teranga, de los senegaleses, es un ejemplo) o en asociaciones
formales e informales que trabajan a favor de la diversidad y de la justicia social (ONG
Viraventos, ONG Equus Zebra, ONG Xabier Pita, Asociación Sen Papeis, ONG Tierra de
Hombres, Cáritas, …).
En la Biblioteca Ágora queremos ser un punto de apoyo para todas estas persoas y
colectivos.
LUGARES DE VIDA
Densidades urbanas
Castigada por cemento sin control y por falta de atención durante décadas, pero
orgullosa de si misma. Solidaria, activa, capaz de tomar la palabra para decirse y para
hacerse escuchar. Así es la Agra do Orzán, el corazón de las zonas de influencia que
atendemos desde la Biblioteca Ágora.
La caótica forma de crecimiento y urbanización de este barrio, por aluvión, sin
planificación controlada, con alturas y densidades excesivas, caracterizó su discurrir
diario durante décadas y aún lo marca de forma muy notable hoy en día.
Delimitada por dos rondas –la de Nelle y la de Outeiro- y con la Rúa Barcelona como
nervio central, el espacio público se vive en torno a la actividad comercial de las
4. Conchiñas, de la Vila de Negreira y de la propia Rúa Barcelona, a la espera de las
actuaciones futuras que se puedan llevar a cabo en el parque del Observatorio, para
convertirlo en espacio público de toda la vecindad.
A finales de los 70 e inicios de los 80 se desarrolla y se urbaniza la zona del Ventorrillo,
un área fundamentalmente residencial con espacios públicos y equipamientos
colectivos, pero con calidades constructivas muy diversas. El Ventorrillo se conforma
como una continuación y complemento del Agra y cuenta, en su extremo, con dos
zonas de muy marcada identidad: Katanga – bloques de viviendas lineales y paralelas a
la Ronda de Outeiro, que debe su nombre popular a la guerra del Congo de comienzos
de los 70 - y Mariñeiros– un conjunto de viviendas de los años 50 muy vinculadas,
sociolaboralmente, al mar e la venta de pescado.
Tanto Katanga como Mariñeiros conservan aún hoy, a pesar de las transformaciones
inevitables que provoca el paso de las décadas, identidades marcadas y dinámicas
propias de barrio, que las hacen especialmente interesantes dentro de la densa trama
urbana del Agra do Orzán.
A pesar de su desorden y de un entorno urbanístico complejo, el Agra do Orzán fue
capaz de asumir con relativo éxito la masiva llegada de inmigrantes llegados del rural
gallego, primero, y de nuevas generaciones procedentes de América y de África,
después. El barrio integró a la población llegada de fuera y construyó una identidad, un
ritmo y un carácter propio, a valorar y a defender.
5. La pervivencia del rural
Si la Agra y el Ventorrillo representan la cara más característica de la densidad urbana
y del urbanismo descontrolado, las parroquias y lugares de la Silva, de Cances y de
San Pedro de Visma perviven como vestigios de los espacios rurales –o ya casi
rururbanos- al lado del espacio edificado, a sus espaldas, atrapados entre la intensidad
de la edificación y las carreteras que cortan sus territorios.
El espacio urbano es espacio libre, no planificado, abierto. La estructura rural es de
viviendas unifamiliares con huertas y patios, sin aceras, adaptadas a la orografía. El
crecimiento de la ciudad y la absorción de los núcleos rurales supone transformaciones
evidentes para sus habitantes y para el propio territorio.
Modifica el paisaje natural pero, también y sobre todo, los hábitos de vida. Impone
nombres de lugares, donde lo comercial arrasa con lo patrimonial, que es necesario
restablecer y preservar para guardar la memoria de séculos: Gramela, Barral,
Caldemoreiras, Loureiro, ... Modifica conductas sociales y hábitos: se cierran las
puertas de las casas de las aldeas, parte de la vecinanza no actúa como tal –habita
pero no vive el territorio-, dejan de ser las fiestas espacio compartido de encuentro, ...
La cohesión social, en este nuevo contexto, sufre mudanzas importantes y se generan
rupturas generacionales entre el mundo rural e integrado de la gente mayor y el
rururbano y desestructurado de sus nietos y nietas.
En la cartografía de los lugares pervive el Concello de Oza –hasta el 1912
independiente del de A Coruña- con lindes en la antigua Casa de Máquinas y en el
6. puente del río de Monelos, que ocupaba toda la periferia coruñesa, desde Visma hasta
Santa María de Oza.
El campo da Burra y el Parque del Observatorio son dos espacios sobre los que la
presión vecinal choca con la presión urbanística en el modelo de futuro de los
mismos. Constituyen un pulmón verde y una atalaya natural de la Agra sobre el resto
de la ciudad. Esa característica hace que se solicite desde la población su conversión
en espacio y parque de carácter abierto y público, para el gozo y el disfrute del
conjunto de la población de un barrio intensamente edificado.
Una característica de la urbanización del territorio en la Agra do Orzán son los patios
interiores de los edificios. Son espacios vacíos, tranquilos, cuidados con celo por sus
propietarios, con potencial para su conversión planificada y consensuada en espacios
conectados para el uso público.
San Pedro de Visma es un núcleo con un fuerte sustrato histórico y una fuerte
tradición campesina y marinera, y que está siendo en estos años modificado
urbanísticamente de una forma claramente invasiva y poco atenta a sus
especificidades.
7. COMERCIO Y TRABAJO
EL COMERCIO DE PROXIMIDAD
El economato Codeco, los cines Chaplin, la apertura de los supermercados, el
videoclub Queijo, el Zara de la rúa Barcelona, las tabernas y bares de siempre, las
épocas pasadas de esplendor comercial y las actuales de necesaria reinvención, … la
gente que nos habla de sus recuerdos sobre el comercio en la zona nos explica la
evolución vivida a lo largo de las décadas.
De los ultramarinos y tiendas de barrio a los primeros supermercados y galerías
comerciales, del auge de la calle Barcelona con su peatonalización y conversión en el
nervio de la Agra al declive vivido posteriormente –con la proliferación en la ciudad de
las grandes superfícies comerciales-, de las épocas en que la Vila de Negreira y las
Conchiñas hervían de gente a la mayor dispersión actual por las tiendas de la zona.
Sea como fuere, y a pesar de las mudanzas vividas, la actividad comercial resultó un
elemento decisivo de la vida económica del barrio, y sigue manteniendo protagonismo
y relevancia en la actualidad. Hoy la zona es claramente multicultural, con locutorios,
todosacien, establecimientos de comida, tiendas específicas y oferta de ocio para las
diferentes nacionalidades y culturas que pueblan el día a día del barrio. La presencia de
este nuevo tipo de actividades económicas ayudó a revitalizar zonas degradadas y a
mantener abiertos muchos pequeños locales comerciales.
Las tres asociaciones de comerciantes existentes en la zona (la de las Conchiñas, la de
la calle Barcelona y la de Agra do Orzán) trabajan, por su parte, en la detección y en la
8. proposición de soluciones y mejoras para el comercio de proximidad y para su
dinamización.
TRABAJOS DE AYER Y DE HOY
La población actual de la zona de la Agra proviene fundamentalmente de diferentes
olas de inmigración –interna, de la propia Galicia, y externa, de Sudamérica y de África,
que confieren al barrio una identidad multicultural muy marcada y característica.
En los pocos espacios urbanos de encuentro existentes (Rúa Barcelona, Praza das
Conchiñas) conviven emigrantes retornados de América, chinos que trabajan en
restaurantes y tiendas de souvenirs, colombianos, marroquís o senegaleses que
regentan negocios étnicos pensados para atender la demanda de sus compatriotas y
abiertos a los originarios de la zona (peluquerías, tiendas de alimentación, locutorios,
bazares, ..), hijos de gentes que en su día llegaron de Carballo o de Malpica, ...
Esa diversidad modificó la casi especialización laboral que en otras décadas pasadas
existió entre determinados espacios y sus habitantes. Así, hablar del barrio de los
Mariñeiros era hacerlo de hombres vinculados al mar desde el Portiño y de mujeres
que vendían el pescado en el mercado de la Praza de Lugo, o de las que formaron
parte despés de los inicios empresariales de Amancio Ortega.
La Agra tuvo mucha relación con la puesta en funcionamento de la refinería, con los
polígonos de Bens y A Grela, y con el desarrollo comercial que trajo consigo la
peatonalización de la calle Barcelona.
9. El Ventorrillo fue la zona más residencial desde sus inicios, y con mayor diversidad en
las ocupaciones sociolaborales de sus habitantes.
El mercado de las Conchiñas
De mediados de los años 70, contaba en su día con una superfície construída de
más de 5000 metros cuadrados, en tres plantas. Fue remodelado a finales de la
primera década del presente século.
Un espacio para el pequeño comercio
El bajo valor del suelo destinado a locales comerciales en relación al resto de la
ciudad, la localización próxima a dos de las principales arterias de comunicación de
Coruña (Ronda de Nelle y Ronda de Outeiro) y la densidad alta de población que
habita el barrio convierte a la Agra do Orzán en un espacio muy desarrollado en el
ámbito del pequeño comercio.
La rúa Barcelona vivió su época de esplendor en la década de los 90, especialmente
a partir de su peatonalización, que conllevó su conversión en un espacio
especialmente dinámico del punto de vista comercial. Hoy continúa siendo la
principal zona de encuentro y relación del barrio.
10. ESCUELAS PARA UN FUTURO MEJOR
Los coles de la zona
CEIP Raquel Camacho
Inaugurado en el curso 1969-70, es un centro que vivió las modificaciones sociales y
urbanísticas de su entorno. Hoy está especialmente atento a la educación en valores
para la convivencia y al respeto a la diversidad. Desarrolla también un trabajo
específico de inserción de las TIC´s en las aulas, a través del proyecto Abalar.
CEIP María Barbeito
Fue creado en el 1977, al tiempo que se urbanizó el barrio del Ventorrillo. Es un centro
público potenciador de valores éticos, que pretende conseguir de los alumnos una
formación integral y personalizada en conecimientos, destrezas y valores morales en
todos los ámbitos: personal, familiar, social y profesional, a través de actitudes
abiertas, democráticas, favoreciendo la igualdad entre sexos y contrario a todo tipo de
discriminación. Es una escuela insertada en la cultura propia de Galicia, en nuestras
tradiciones, y al mismo tiempo respetuosa y abierta a todas las demás culturas.
CEIP San Pedro de Visma
Inaugurado en el 1989, es un centro público plurilíngüe, con mucho vínculo con el
entorno rural en el que se sitúa y al que sabe sacar partido de una forma interesante y
11. diferente. Trabaja temáticas de convivencia, nuevas tecnologías y promoción lectora y
tiene programas específicos como A horta escolar y Radio SPV.
Los Institutos
IES Rafael Dieste
El IES Rafael Dieste se pone en marcha en el año 1989 y acoge alumnado de la Agra do
Orzán y de otros barrios próximos. El Centro fue seleccionado como Centro Plurilingüe
desde el curso 2010-11, y continúa igualmente con el programa de Sección Bilingües
que desarrollada con anterioridad. Organiza un importante programa de actividades
en colaboración con las entidades sociales y culturales de la zona.
IES Agra I
Al lado de la Biblioteca Ágora, el IES Agra I es un centro educativo de referencia en la
zona, hoy caracterizado por su composición multicultural dentro del alumnado. Cuenta
con equipos de mediación y forma parte del proyecto Abalar para la implantación de
las TIC´s en el Centro.
IES Salvador de Madariaga
El I. E. S. Salvador de Madariaga es un centro público que tiene como objetivos la
formación científica, moral, artística, física y social de los alumnos y alumnas.
12. Su funcionamento se ajusta a la normativa vigente, haciendo prevalecer el desarrollo
de la personalidad en el respeto a los principios democráticos de la convivencia y los
derechos fundamentales.
El centro aglutina alumnado de la Enseñanza Secundaria Obligatoria y Post-obligatoria.
Se imparten los dos ciclos de la E. S. O. y los Bachilleratos de Humanidades y Ciencias
Sociales, Artes escénicas, música y danza y Ciencias y tecnología. También imparte la
Educación Secundaria para Adultos, el 2º curso del PCPI y el Bachillerato en régimen
nocturno.
El actual edificio fue inaugurado el 23 de septiembre de 1947.
Otros centros
A mayores de los centros de enseñanza pública, en la zona existen también espacios
formativos de carácter privado, que complementan la oferta existente.
Sirvan como ejemplo el Centro Privado de Formación Profesional Tomás Barros -
caracterizado por ser el único centro privado de Galicia que ofrece todos los ciclos de
la familia de Servicios Socioculturales y a la Comunidad-, academias como Aula Nosa o
escuelas infantiles como Os Picariños, Os Pequerrechos y otras.
13. Quien fue?
María Barbeito (A Coruña, 1880-1970) fue una muy destacada pedagoga gallega,
profundamente innovadora y con firmes convicciones sobre el papel de la educación
en la consecución del progreso y de igualdad. Implantó en los centros que dirigió un
modelo de escuela activa, incluyó en el currículo las actividades físicas y artísticas,
defendió la presencia viva de la lengua gallega en la enseñanza, promovió la
coeducación de niños y niñas, puso en marcha comedores escolares, ... Fue un ejemplo
de maestra y pedagoga al servicio de una enseñanza pública y de calidad.
Tomás Barros (Toledo, 1922 - A Coruña, 1986) fue un pintor y escritor gallego
especialmente destacado en el ámbito de la dramaturgia y la poesía. Tuvo una posición
intelectual claramente antifranquista, colaborando con artistas exiliados como Luís
Seoane o Rafael Dieste y fue un importante dinamizador cultural. De su mano nacieron
revistas como Aturuxo (1952) o Nordés (1975). Perteneció a la Real Academia Galega.
UN PUEBLO DE ARTISTAS
Somos un pueblo de artistas, explica frecuentemente con vehemencia, inteligencia y
pasión Xurxo Souto, escritor y músico de Monte Alto y vecino del Ventorrillo desde
hace años. La densidad y variedad de talento existente en nuestros barrios, antes y
ahora, parece confirmarlo.
La compañía Manicómicos, la compañía Danthea y la sala Gurugú, la iniciativa teatral
de aprendizaje de lenguas Katarsis, la empresa Algarabía Animación, la Asociación
14. Socio-Pedagóxica Galega, … están radicadas en la zona y desarrollan en ella trabajos y
propuestas diversas.
Los barrios Ágora acogieron e acogen también festivales y eventos diferentes y
especiales: la Festa da Diversidade Cultural, protagonizada por los colectivos
inmigrantes y sociales de la zona, o el Festival Artístico Paralelo 43º 21' 45'', que a
través de los comercios y de los espacios urbanos muestra fotografía, pintura,
creaciones plásticas, música o obradoiros artísticos a los vecinos y vecinas.
Pero la Agra do Orzán, A Silva, O Ventorrillo, Visma, … son sobre todo música. La
música de Pucho Boedo, la música de las fiestas recordadas por las estupendas
orquestas que se podían gozar en la Silva o en el Ventorrillo, la de los gaiteiros de la
zona, la de la Agrupación Os Concheiros, la del líder de Luar na Lubre Bieito Romero
tocando la gaita en las pistas del Ventorrillo, la propuesta funk y jazz de Álvaro Muras,
las de los chicos y chicas que hoy ensayan en los locales que existen, …
Y con la música, la palabra. La escritura del Ágora, de su Biblioteca, que es nuestra y
vuestra, y en la que conviven las voces coruñesas y universales de Pilar Pallarés, Miguel
Mato Fondo, Xabier Cordal o Xabier Docampo con las del senegalés Léopold Sédar
Senghor, el uruguyo Eduardo Galeano, el marroquí Mohamed Chukri o la española
Belén Gopegui.
También cine: de la Agra do Orzán salen los cortos de difusión internacional del joven
Fran Calvelo (Carabás, Crisálida, Santiago de Sangre, …). Y del Ventorrillo el
15. documental de Xurxo Souto sobre Pucho Boedo (Pucho Boedo, un crooner na fin do
mundo).
Y baile y danza (galega, clásica, oriental, …). Y blogs. Y graffitti. Y nuevas expresiones de
arte urbano. Y …
Con todo, nada más importante que la propia historia e identidad de los lugares y de
las gentes que conforman estos barrios. La huella de la vida, las marcas en el territorio,
los nombres de los lugares, las experiencias vividas que quedan en la memoria, … La
cultura como espacio de cohesión social y de sentido de pertenencia.
La cultura que nos interesa en Suma Ágora, la queremos poner en valor.
Pucho Boedo, voz del pueblo y artista universal
No sería entendible hablar de la cultura de los barrios de A Silva y del Ventorrillo sin
citar a su más egregio talento, al hijo más notable que de ella ha salido: el gran Pucho
Boedo.
El crooner coruñés nació en el 1929, en A Silva, en el seno de una familia rebelde y
anarquista, que sufrió la represión franquista al estallar la Guerra Civil. Su padre y su
hermano, miembros da CNT, fueron asesinados por el fascismo. Su otro hermano tuvo
que huir hacia Venezuela, donde vivió largos años de exilio. Pucho tenía en aquellos
momentos siete años.
16. A Silva lo vió destacar de niño como futbolista y lo vió trabajar desde muy corta edad y
de lo que hiciese falta: bernizador, limpiabotas, recadero, … Sin embargo, el talento
que tenía al cantar sobresalía sobre el resto. Lo fichó de joven la orquesta Eslava y a
partir de ese momento fué pasando por todas las importantes de aquel momento:
Ubierna, Los Satélites, Mallo, Radio City, Los Trovadores, …
En 1959, con treinta años cumplidos y ya experiencia internacional acompañando a los
Satélites y a los Trovadores, recibe la llamada de Los Tamara, que venían de
Casablanca (Marruecos) y tenían contratos por Europa. Su incorporación a esta
orquesta le permitió pasar a compartir escenario con los grandes del momento: Shirley
Bassey, Jacques Brel, Charles Aznavour, Gilbert Becaud, Charles Trenet, Doménico
Modugno, …
Y llegaron los discos, editados con el sello francés Bel-Air. En total, Pucho grabaría con
los Tamara ocho “elepés”, varios de ellos en gallego -lo que era toda una declaración
de principios en los tiempos de la Dictadura franquista, que tenía marginado y
prohibido a nuestro idioma-. Fueron precisamente esos temas los de mayor éxito
comercial. Y el éxito lo llevó a los grandes escenarios: el Olympia de París, los casinos
de la Costa Azul… Conoció y vivió el éxito, pero Pucho nunca olvidó las raíces y de
donde venía. De una familia obrera de A Silva, en Coruña, espacio privilegiado donde la
tierra entra en el océano y recibe de frente el viento de la libertad.
17. AQUÍ SIEMPRE FUIMOS MUY DEPORTISTAS...!
Traineras, fútbol, fútbol sala, baloncesto, chave, boxeo, skate, gimnasia, ... En la
memoria del vecindario de nuestros barrios se mantiene fresca y es motivo de
conversación y de orgullo la presencia de clubs, deportistas y colectivos vinculados a la
actividad física.
En los vecinos de Mariñeiros quedaron grabados los tiempos del Batallador, en la de
Visma la década de los 40 –en la que sus traineras dominaban las competiciones que
había en toda la comarca-, en el Ventorrillo y en la Agra recuerdan sus agrupaciones
deportivas de los años noventa y los equipos de fútbol sala, ...
Hoy la actividad es diversa y recoge desde gimnasios orientados al boxeo, como el
Azteca, hasta un deporte tradicional gallego como la chave -absoluto protagonista en
la vida de los hombres de Mariñeiros- , pasando por la natación, el aérobic y el
gimnasio del complejo deportivo Agra I o la escuela de fútbol sala del Ventorrillo F.S.
Seguro que tu conoces más clubs y deportistas de la zona...!
Club Básquet Coruña
En enero de 1995, el Club Baloncesto Arteixo firma un acuerdo de asociación con el
Ventorrillo Sports Group, coincidiendo con la inauguración del polideportivo del
Ventorrillo. El convenio especifica que este equipo se vincula desde ese momento a la
agrupación deportiva del Ventorrillo y que de manera conjunta se pondrán en marcha
18. las Escolas de Baloncesto do Ventorrillo. El equipo del C.B. Arteixo, que estaba en ese
momento en la Liga Autonómica, logra ese año su ascenso a la Liga Nacional.
En julio de 1996 el C.A.B Coruña, equipo de baloncesto que había en ese momento en
la ciudad y que militaba en la Liga EBA, pierde la categoría y desaparece. La directiva
del Club de Baloncesto Arteixo plantea entonces a la directiva de la Asociación
Deportiva Ventorrillo la posibilidad de llevar su equipo para A Coruña.
Así nace el Club Basquet Coruña, de la fusión del Club Baloncesto Arteixo y del Club
Baloncesto Ventorrillo. Y así comienza la nueva estructura del club, con un equipo en
la liga EBA y otro en la Liga Nacional: uno juega los partidos en el Polideportivo de
Riazor y el otro en el Polideportivo del Ventorrillo. La sede social se fíja en la Asociación
de Veciños do Ventorrillo, con una Directiva conformada a partir de la fusión de los dos
clubs.
19. La Escola de Boxeo Azteca Box es un gimnasio de A Coruña radicado en el Ventorrillo,
y en el que el boxeo en sus diversas variantes (clásico, sin contacto, femenino e
infantil) es el absoluto protagonista.
Desde Azteca Box se intenta que las personas vinculadas al mismo adquieran los
valores de ese deporte: humildad, nobleza, constancia y trabajo. Y es por esos valores
que la escuela goza de un ambiente plural y positivo, del que participan personas de
todas las edades, procedencias y condiciones.
El Club de Chave Os Mariñeiros nació cuando un grupo de vecinos del barrio decidió
que era hora de cambiar el fútbol por algún deporte más acorde con la realidad física
que el paso de los años les iba imponiendo a todos ellos. Con casi treinta años ya de
historia son una referencia de la chave en la ciudad de A Coruña y en el conjunto de
Galicia, jugando su equipo en la División de Honor gallega.
Ventorrillo Fútbol Sala.
Fundado en 1982 es un club historico de la ciudad, que cuenta con una muy
importante escuela de fútbol sala para niños y niñas. Mantiene en A Coruña la pasión
por este deporte, intentando revivir épocas de esplendor como las del desaparecido
Chaston, junto con otros clubs, como el 5 Coruña.
20. Unión de Remeros de San Pedro de Visma
Dominó en los años 40 las regatas celebradas en Coruña. En las hemerotecas figura la
victoria obtenida en el año 44 sobre el Liceo de Monelos y el Centro Deportivo de
Santa Lucía. La trainera de Visma se llamaba “María del Carmen” y al vencer en esa
regata ganó la Copa Diputación de ese año.
El tiempo de la infancia
Chicos y chicas de otras épocas de los barrios de Agra do Orzán, de Visma, de
Mariñeiros, recuerdan nostálgicos como pasaron su tiempo de la infancia por esta
zona.
Nos hablan del monte, de los campos y de las huertas que rodeaban la Divina Pastora,
las casas de Franco y el barrio de Os Mariñeiros. Un espacio en el que niños y niñas
tenían la posibilidad de desarrollar su imaginación, construír sus propios juguetes,
descubrir por ellos mismos la naturaleza que los rodeaba.
Fue espacio de juegos la vieja arqueta del antiguo vivero de plantas, donde hoy
estamos nosotros como Biblioteca. En sus alrededores se levantaban cabañas de
madera aprovechando los árboles y los niños cazaban jílgueros con el pegamento del
Virgo Blanco o con resina, para venderlos después y sacar algún dinero para alquilar
unas bicicletas en la Plaza de Lugo al Taboada. Otra actividad frecuente y de cierto
riesgo era ir a coger fruta de los árboles de las casas en la zona de Riazor o por las
proximidades del Observatorio.
21. El verano, por su parte, invitaba a ir al Portiño a acostarse al sol en la playa, o la
Dársena a pescar con los amigos en las lanchas de los padres o bien a pasear por el
puerto y el Parrote.
La falta de dinero propiciaba que hubiese que espabilar la imaginación. En el Monte
Rancheiro, donde el Ejército hacía prácticas de tiro, pandillas de chicos recogían los
casquillos e incluso las balas incrustadas en el suelo, que adquirían cierto valor por ser
de cobre. Si se reunía el dinero suficiente quizás la pandilla entera pudiese ir al cine
Finisterre o a comprar golosinas.
Al crecer, a partir de los quince o dieciseis años, ya se comenzaba a acudir a los bailes
de fuera de la ciudad, como el Seijal, el Nikar, el Cinco Estrellas o el Sally. Algunos
incluso se acercaban al Rey Brigo de Betanzos o al Moderno de Sada. Los de
generaciones más jóvenes recuerdan también disfrutar de los bailes del Circo de
Artesáns o del Finisterre.
De bailes y verbenas
En los años 60 estaban muy de moda, además de las fiestas, los bailes en los salones
de hoteles como el Embajador, La Granja, Finisterre, ... Eran salones de baile con
orquesta, con los músicos tocando en directo para los asistentes.
Y después estaban las verbenas. Antes las verbenas eran diferentes, se vivían de otra
forma porque eran esperadas durante todo el año y eran casi la única fiesta que había.
Las fiestas del barrio eran el acontecimiento más importante del año, y para
organizarlas colaboraban jóvenes que recaudaban dinero por las casas acompañados
22. de algún adulto. Eran también, esos días, ocasión para el ligoteo e para el estreno de la
ropa nueva.
La zona del Campo de Vioño, de la Silva, del Ventorrillo, etc tuvo siempre fama de
buenas fiestas y buenas orquestas, y también las que se hacían delante del Finisterre.
Las orquestas más emblemáticas de aquel momento eran Los Trovadores, Los Satélites
o La Orquesta X, pero había aún más en la ciudad y todas ellas de mucha calidad.
Semana Santa, Antroido, San Xoán, Nadal, ...
Como es lógico, el vecindario de la zona celebró y celebra el resto de fiestas del
calendario del año. La Semana Santa, el Antroido, el San Xoán, el Samaín, la Navidad, ...
han tenido y tienen presencia y manifestaciones propias en nuestro entorno. E incluso
supimos que uno de nuestros convecinos – X.L.Brandariz, del Ventorrillo- fue uno de
los iniciadores de las cacharelas en las playas de Riazor y el Orzán, que hoy dan fama a
la ciudad.