El documento es una reflexión de una maestra sobre las razones por las que disfruta enseñando a niños de 3 años. Explica que le gusta poder abrazar a los niños, ayudarlos con sus atuendos, ver sus desfiles de moda, y escucharlos decir que sus vestidos son bonitos. También disfruta guiarlos en el aprendizaje de las primeras letras y olvidar sus propias penas al atender a los niños. Agradece a todos los maestros por la importante labor que realizan.
2. Al saber que soy maestra, la gente suele preguntarme que enseño. Cuando explico que soy tutora de niños de 3 años,generalmente responden con un “¡ Ah !" tan soso que me gustaría exclamar:
3. ¿En que sitio sino allí me abrazaría un apuesto jovencito y me diría que me quiere?
4. ¿Donde más podría atar lazos al pelo, ajustar cinturones, ver un desfile de modas a diario y aunque siempre me vista de la misma manera, oír decir que mi vestido es bonito?
5. ¿Donde más podría guiar en la escritura de las primeras letras una manita que quizás algún día escriba un libro o un documento importante?
6. ¿En que otra parte olvidaría mis penas porque tengo que atender tantos arañazos, cocos y corazones afligidos?
7. ¿Donde conservaría el alma joven, sino en medio de un grupo cuya atención es tan efímera que siempre debo tener a mano una caja de sorpresas?
8. ¿En que otro sitio derramaría lágrimas porque hay que dar por terminado un año de relaciones felices?
9. A todas las maestras de educación Infantil que tanto siembran, para que otros recojan, gracias maestras!"
10. Y gracias también a: A vosotros compañeros que trabajáis con niños de educación especial tan especiales y tan maravillosos, a mis compañeros de música, por creer, crear y cultivar el arte, a los compañeros de educación física, que con vuestro trabajo hacéis mas fácil el de todos, a los que trabajáis en la escuela rural, y sabéis lo que es enseñar con frío, goteras y en soledad, a todos mis compañeros de idiomas.... A todos.