La Fundación de Derechos Humanos del Estado Sucre comenzó en 1989 para promover los derechos humanos y la participación ciudadana. Con el tiempo ha evolucionado para centrarse en empoderar a los ciudadanos pobres y vulnerables para que incidan en las políticas públicas. Mantiene el compromiso de defender los derechos fundamentales de grupos amenazados y promover una cultura de paz, democracia y estado de derecho.
1. El 14 de Abril de 1989, con el nombre de
Vicaría Episcopal de Derecho y Justicia de la
Diócesis de Cumaná, con la bendición y
auspicio de Mons. Alfredo José Rodríguez
Figueroa, comenzamos a trabajar en el estado
Sucre con la intención de promover el
protagonismo de la gente en la defensa de los
Derechos Humanos y, a la vez, asesorar y
defender directamente a víctimas de violación de
derechos.
El 23 de noviembre de 1993 nos constituimos
como “Fundación de Derechos Humanos”,
comprometiendo nuestra vida en la promoción y
la defensa de los derechos humanos de los
sucrenses más desprotegidos.
En el año 1997 priorizamos el derecho político a
la participación ciudadana, convencidos de que
sólo la ciudadanía organizada puede hacer
exigible y sostenible la vigencia real de todos los
Derechos Humanos.
Con la nueva Constitución, respaldada con el
referéndum del 15 de diciembre del 1999, con la
creación de la Defensoría del Pueblo, dejamos de
lado, el trabajo de defensa directa de víctimas de
violación de derechos.
Cuando cumplimos 15 años, en el año 2004,
pusimos nombre propio a la Fundación:
“INCIDE”. No fue solo un cambio de
nombre; fue el señalamiento de la nueva
dirección de trabajo asumida: la participación de
la ciudadanía, de los pobres sobre todo, no
sólo como derecho y valor, sino como
mecanismo para incidir en las políticas
públicas.
A finales del año 2016, reasumimos nuestro papel
inicial de actuar directamente en defensa de las
personas y grupos cuyos derechos fundamentales y
elementales para la vida, se vulneran impunemente.
Al cumplir más de dos décadas de trabajo
ininterrumpido en el estado Sucre,
mantenemos nuestra decisión de colocarnos
al lado de las mayorías pobres y de la
población vulnerada y vulnerable en sus
derechos.
Los pobres y los grupos sociales más
vulnerables, como opción fundamental.
La opción por la equidad, como camino hacia la
construcción del derecho y
la justicia.
La defensa de todos los
Derechos Humanos para
todos, como compromiso.
El respeto y protección
del derecho de los pobres a decidir su desarrollo
sostenible, a exigir sus derechos, a participar e
incidir en los asuntos públicos.
El respeto y cuido de los derechos de la
naturaleza, como condición de desarrollo
sostenible.
La defensa de la democracia y del Estado de
Derecho.
La opción por la paz y por la convivencia
tolerante, sin impunidad.
1.- Promover la creación, consolidación y
articulación, desde el protagonismo y
participación de los pobres, una ciudadanía
organizada, democrática, soberana,
públicamente instituida y reconocida, con
conciencia de exigibilidad de derechos y con
poder real para involucrarse e incidir en la
gestión pública con deliberación y decisión, en
vistas a revertir las causas estructurales de la
pobreza, dentro de una visión de desarrollo
sostenible, desde una perspectiva de equidad y
solidaridad con los más pobres.
2.- Contribuir, con nuestra acción directa, en la
reconstrucción del Estado de Derecho y en el
sostenimiento y defensa de los grupos sociales
amenazados en el ejercicio de sus derechos
fundamentales, criminalizados por el
ejercicio del derecho a la defensa y la
reivindicación de derechos más elementales,
tales como la vida, la alimentación, salud, agua
potable y seguridad ciudadana.
3.- Favorecer el surgimiento de una cultura de
paz y tolerancia en la sociedad sucrense, que
propicie el acuerdo, el encuentro y la
convivencia armoniosa, sin recurrir a la
violencia y sin pacto con la impunidad.
NUESTRA HISTORIA
NUESTROS VALORES
NUESTRA VISIÓN
2. Somos una organización no gubernamental,
independiente y autónoma de partidos políticos,
instituciones religiosas y
organizaciones
internacionales, sin fines
de lucro, con personalidad
jurídica propia.
Realizamos nuestra misión
institucional dentro del
marco de la Constitución
de la República Bolivariana de Venezuela y
cumplimos con la legislación vigente en todos
los procedimientos administrativos,
organizacionales y laborales.
Nos sostenemos financieramente con
cooperaciones voluntarias de personas y de
instituciones privadas, nacionales e
internacionales con quieres establecemos
acuerdos de cooperación. Todo el
financiamiento que recibimos es controlado por
una comisión externa de transparencia
financiera.
En estos casi 30 años, hemos creado una amplia
red de relacionamiento nacional e internacional
con instituciones afines que trabajan los temas
de Derechos Humanos, Participación Ciudadana
e Incidencia en Políticas Públicas.
Proyecta nuestros sueños, identifica nuestra
misión, define nuestros desafíos, orienta nuestro
quehacer y pauta el modo de hacerlo.
Es un verbo imperativo que recoge la fuerza que
queremos transmitir a todas las personas,
comunidades, instituciones con quieres
trabajamos en procesos de construcción de una
ciudadanía que emerge con conciencia y fuerza y
se institucionaliza en una esfera pública.
Una ciudadanía públicamente instituida y
reconocida, democrática, participativa,
protagónica, autónoma, con conciencia de
derechos y con fortaleza para hacerlos valer,
incide en los asuntos públicos.
Fomentar el respeto hacia un Estado de
Derecho, que posibilite la democracia, el libre
ejercicio y defensa de los derechos humanos.
Una sociedad reconciliada, que desarrolle su
existencia en un clima de paz, sin que las
mayorías estén sometidas por la violencia y
sin impunidad para violadores de Derechos
Humanos.
Tlf.: 0293-4325255
Twitter: @INCIDE_ONG
Blog: http://derechoshumanosincide.blogspot.com
Dirección: Calle Bolívar, Parcelamiento Hospital,
Quinta Ninoska. Cumaná - Edo.Sucre, Venezuela.
FUNDACIÓNDEDERECHOSHUMANOSDELESTADOSUCRE
NUESTRO NOMBRE
NUESTRO MENSAJE
NUESTRO SUEÑO
¡Por la participación ciudadana!