La historia trata de una niña que tenía una hermosa gatita que no podía cazar ratones. Una noche la gatita salió a jugar y la niña no pudo encontrarla, entristeciendo a la familia. Más tarde, un ladrón secuestró a la gatita y pidió un rescate a cambio de devolverla. Finalmente, la niña logró recuperar a su gatita sana y salva, y sus padres adoptaron más gatos para que tuviera compañía.