Este documento resume los esfuerzos de la Asociación de Discapacitados Psíquicos de Pozo Alcón (ADISPA) para rehabilitar viviendas deshabitadas en el Poblado de la Bolera y usarlas como alojamientos rurales gestionados por discapacitados. ADISPA se reunió con el Ingeniero Jefe de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir pero no recibió apoyo, y la Confederación prefiere demoler las viviendas debido a su deterioro. Aunque el Ayuntamiento apoyó la moci

1. REFLEXIONES JUNTO A LA FUENTE TAZA
VOLVER A EMPEZAR, II PARTE
En esta segunda entrega, sobre los “discapacitados y las viviendas de la Bolera”, quiero que
conozcan los trámites realizados, hasta hoy mismo, y los resultados obtenidos. Con fecha, 24
de Octubre, de 2012 se dirigió una carta al Ingeniero Jefe de la Confederación Hidrográfica del
Guadalquivir, con sede en Granada. En ella, se explicaba la situación de las viviendas, -descrita
en la primera entrega-, al tiempo que se solicitaba una entrevista para que, miembros de la
Junta Directiva de ADISPA ( Asociación de Discapacitados Psíquicos de Pozo Alcón) expusieran,
personalmente, sus proyectos. Tras innumerables llamadas telefónicas- a las que siempre
respondía una Secretaria-, conseguimos que nos “recibiera” el día, 29 de Enero de 2013.
Acudimos a la reunión: la Presidenta, Fca. Moreno Zarco, el Secretario, Joaquín Jiménez
Carrasco, una vocal, Jerónima Amer y, yo mismo, en representación del Laboratorio de Ideas.
Magnífico edificio y mejor entorno, propiedad de Medio Ambiente. Ideal para una residencia de
discapacitados ó para ubicar un Centro de Interpretación de nuestra sierra…Su deplorable estado de
conversación lo convierte en otro candidato al vertedero.

2. La recepción, fue muy fría y, desde el comienzo, se nos dio a entender que se trataba de
“simple cortesía” y, por tanto, se agradecería mucho la brevedad. El Ingeniero Jefe, Sr.
Fernández Muñoz, escuchó, con actitud ausente, nuestros argumentos que… “había viviendas
deshabitadas y “mal ocupadas”, en el Poblado de la Bolera, que se debieran rehabilitar para
que las gestionaran nuestros discapacitados como alojamientos rurales…”. Nos cuenta que,
en un pueblo de Granada, accedieron a algo parecido a lo que nosotros planteamos y se
encontraron con el problema del mantenimiento de los inmuebles ya que, el Ayuntamiento,
no cumplió con lo pactado y añade...” si el grado de deterioro de las viviendas, exige una
pronta rehabilitación, la Confederación preferiría proceder a su demolición …”. Con respeto,
pero con firmeza, le hicimos ver que no estábamos hablando del Patrimonio de la
Confederación, sino del Patrimonio de todos los andaluces. De cualquier forma, nos dice que él
no puede tomar ninguna decisión y que la mima corresponde a Sevilla pero que está dispuesto
a enviar un informe, a sus superiores, trasladando las inquietudes de ADISPA, para lo cual
habremos de facilitarle planos de las viviendas en cuestión. Se nos hace raro que no estén allí –
los planos-, sobre todo, teniendo en cuenta que la obra, del Pantano y del Poblado, fue
responsabilidad de la Confederación de Granada…una muestra más de su “buena
disposición”. El día 12, de Febrero, le hacemos llegar los planos que nos solicitaba y que nos
proporciona, D. Francisco Braojos, responsable de la Confederación en el Pantano de la Bolera.
¿Saldría el informe de Granada?. Rotundamente, no; lo demuestra la “falta de noticias, tanto
de Sevilla como de Granada”.
Con posterioridad, se presentó una MOCIÓN , en nuestro Ayuntamiento, en la que se explicaba
el proyecto de ADISPA, al tiempo que se solicitaba la adhesión de la Corporación y, por
supuesto, su implicación en la gestión, que sabíamos larga y complicada. La respuesta, fue
afirmativa y se suponía que comprometida, pero…a día de hoy, no se ha pasado de aquella
simple “toma en consideración” y, nadie ha movido ficha; ni ADISPA, ni Confederación, ni
Ayuntamiento.
Ante esta situación cabe preguntarse, ¿ merece la pena rehabilitar estas viviendas?, ¿ merece
la pena tratar de buscar, una solución digna, para el futuro de nuestros discapacitados?. La
respuesta es sí. Sí, merece la pena rehabilitar un Patrimonio que es de todos, que se levantó
con dinero de todos y que se está deteriorando por las desidia de un Organismo, que tiene la
obligación de conservarlo y buscarle una rentabilidad social, como la que le proponemos. Sí,
merece la pena abordar el futuro de este colectivo por las razones ya explicadas, a no ser que
se conformen con una pensión que, en el mejor de los casos, no alcanza los 400 € mensuales. Y
hay, bajo mi punto de vista, una tercera razón; es intolerable que un Organismo Público- la
Confederación- se permita amenazar con la…. “demolición de las viviendas “, como si de un
cortijo propio se tratara…. Quizás, la mejor rentabilidad sea convertirlas en escombros y que
“descansen” en un vertedero… ¡estrategias de quienes, desde sus cómodos despachos, no ven
que puedan tener, en sus manos, la solución de los problemas de 16 personas que, apenas si
se ven ni se oyen!... Tal vez si habláramos de un Gran Pantano,.. de invertir varios cientos de
millones de Euros...¡cuánto prestigio proporcionaría redactar, adjudicar y ejecutar el proyecto

3. de una obra de esta envergadura!. Sin embargo, ¿ de dónde sacar unos miles de Euros para
rehabilitar las dichosas viviendas?.
Creo que el asunto bien merece una tercera y última entrega.
Quiero despedirme con unos versos de Jorge Manrique- que seguro recordamos casi todos - y
dedicarlos a todos nuestros queridos difuntos:
“Nuestras vidas son los ríos/ que van a dar a la mar,/que es el morir;/allí van los señoríos/
derechos a se acabar/y consumir;/allí los ríos caudales,/allí los otros medianos/y más
chicos,/y llegados, son iguales/los que viven por sus manos/y los ricos.”
Pozo Alcón, a primeros de Noviembre de 2014
Francisco Quiñones