El documento describe los sistemas fascistas que surgieron en Europa después de la Primera Guerra Mundial en un contexto de crisis económica, social y política. Define el fascismo como una ideología ultranacionalista revolucionaria basada en la movilización de masas y el liderazgo autoritario que valora la violencia y la guerra, según el historiador Stanley G. Payne. Estos regímenes fascistas contribuyeron al estallido de la Segunda Guerra Mundial.