Este documento presenta resúmenes breves de cinco razas de caballos: el Exmoor, una de las razas inglesas más antiguas; el Árabe, una de las razas más antiguas con una constitución ósea única; el Silla Francés, reconocido en 1958 como una raza resistente y ágil; el Karabair de Uzbekistán, posiblemente emparentado con el Árabe; y finalmente cómo algunos Karabairs se utilizan para labores agrícolas y competición mientras que otros se cruzan con Árab
Razas de caballos: Exmoor, Árabe, Silla Francés y Karabair
1. LOS CABALLOS
RAZAS DE CABALLOS
Exmoor
De las más antiguas entre las razas inglesas de páramo y montaña, una de las más
primitivas del mundo, con excepción del Tarpan. Su antepasado más directo fue el Pony
I. La Exmoor Pony Society se ocupa de conservar la pureza y la calidad de esta raza
británica, ya que la crianza y el desarrollo en los páramos de esta región de Exmoor
suelen tener más clase y ser más inteligentes que otros criados en territorios tal vez
más suaves de clima, pero menos aptos para el fortalecimiento de estos ejemplares.
Árabe
Lo que hace insólita a esta raza de caballos es la constitución de su esqueleto que posee
17 costillas, 5 huesos lumbares y 16 vértebras caudales, a diferencia de las demás razas.
Esta raza aparece hace unos 3,000 años a. C. y es una de las más antiguas entre las
equinas. La primera fue capturada en Yemen por Baz, tataranieto de Noé.
Silla Francés
Se le reconoce en el año de 1958 al caballo de Silla francés como una raza resistente y
ágil. Es de sangre caliente por la mezcla de razas equinas. Se tiene como dato que fue en
Inglaterra donde se adquirió el progenitor semental de esta raza, un caballo valiente de
la posguerra Pura Sangre de nombre Furioso.
Karabair
Procede de las montañas de Uzbekistán, nación ex soviética de Asia central famosa por
la cría de caballos desde hace más de 2.000 años. Se desconoce los orígenes exactos de
la raza aunque se cree que es pariente de la árabe, debido al parecido que guarda con
ella. Al parecer, los caballos mongoles, los nativos de la estepa y algunas razas
procedentes de Irán y Turquía se emplearon para desarrollar el Karabair..
Son caballos que se adaptan a distintas disciplinas, algunos se utilizan como caballos de
silla y de enganche, mientras que los tipos de mayor peso se emplean en labores
agrícolas. La cría moderna ha contemplado el cruce con árabes a fin de producir
caballos aptos para disciplinas de competición como saltos y el concurso completo.