2. MATEO 7:24 - 27
24Por tanto, todo el que me oye estas palabras y
las pone en práctica es como
un hombre prudente que construyó su casa sobre la roca.
25 Cayeron las lluvias, crecieron los ríos, y soplaron los vientos
y azotaron aquella casa; con todo, la casa no se derrumbó
porque estaba cimentada sobre la roca.
26 Pero todo el que me oye estas palabras y
no las pone en práctica es como un
hombre insensato
que construyó su casa sobre la arena.
27 Cayeron las lluvias, crecieron los ríos,
soplaron los vientos
y azotaron aquella casa.
Esta se derrumbó, y grande fue su ruina».
3. MATEO 5:14
Vosotros sois la luz del mundo;
una ciudad asentada sobre un
monte no se puede esconder.
4. HEBREOS 11: 17- 19
17 Por la fe Abraham, que había recibido las
promesas, fue puesto a prueba y ofreció a
Isaac, su hijo único, 18 a pesar de que Dios le
había dicho: «Tu descendencia se establecerá
por medio de Isaac».[a]19 Consideraba Abraham
que Dios tiene poder hasta para resucitar a los
muertos, y así, en sentido figurado, recobró a
Isaac de entre los muertos.
6. Parábola de los talentos MATEO 25:14-30
14 Porque el reino de los cielos es como un hombre que yéndose
lejos, llamó a sus siervos y les entregó sus bienes.
15 A uno dio cinco talentos, y a otro dos, y a otro uno, a cada uno
conforme a su capacidad; y luego se fue lejos.
16 Y el que había recibido cinco talentos fue y negoció con ellos,
y ganó otros cinco talentos.
17 Asimismo el que había recibido dos, ganó también otros dos.
18 Pero el que había recibido uno fue y cavó en la tierra, y
escondió el dinero de su señor.
19 Después de mucho tiempo vino el señor de aquellos siervos, y
arregló cuentas con ellos.
20 Y llegando el que había recibido cinco talentos, trajo otros
cinco talentos, diciendo: Señor, cinco talentos me entregaste;
aquí tienes, he ganado otros cinco talentos sobre ellos.
21 Y su señor le dijo: Bien, buen siervo y fiel; sobre poco has sido
fiel, sobre mucho te pondré; entra en el gozo de tu señor.
22 Llegando también el que había recibido dos talentos, dijo:
Señor, dos talentos me entregaste; aquí tienes, he ganado otros
dos talentos sobre ellos.
23 Su señor le dijo: Bien, buen siervo y fiel; sobre poco has sido
fiel, sobre mucho te pondré; entra en el gozo de tu señor.
24 Pero llegando también el que había recibido un talento, dijo:
Señor, te conocía que eres hombre duro, que siegas donde no
sembraste y recoges donde no esparciste;
25 por lo cual tuve miedo, y fui y escondí tu talento en la tierra;
aquí tienes lo que es tuyo.
26 Respondiendo su señor, le dijo: Siervo malo y negligente,
sabías que siego donde no sembré, y que recojo donde no
esparcí.
27 Por tanto, debías haber dado mi dinero a los banqueros, y al
venir yo, hubiera recibido lo que es mío con los intereses.
28 Quitadle, pues, el talento, y dadlo al que tiene diez talentos.
29 Porque al que tiene, le será dado, y tendrá más; y al que no
tiene, aun lo que tiene le será quitado.
30 Y al siervo inútil echadle en las tinieblas de afuera; allí será el
lloro y el crujir de dientes.
7. EXODO 7:5
Y sabrán los egipcios que yo soy Jehová,
cuando extienda mi mano sobre Egipto, y
saque a los hijos de Israel de en medio de
ellos.